-¿Puedo pasar?- pregunté tocando con los nudillos la puerta de los aposentos de Jace que se encontraba semi-abierta.
Él sentado en su cama me hizo un gesto con la cabeza para que me sentara a su lado.
-¿Cómo te encuentras?- pregunté caminando hacia él.
-Destrozado…-susurró- lo teníamos todo planeado, habíamos hablado hasta de cuántos hijos queríamos tener…
Tragué saliva sentándose a su lado y posando mi mano encima de la suya.
-Lo siento mucho, debí haber peleado con más ganas…
Jace levantó la vista y sonrió con tristeza jugueteando con mis dedos.
-Hiciste lo que pudiste…-sus ojos estaban repletos de tristeza- yo debí reaccionar antes e impedir que le enterrara la daga.
Resopló y se limpió una lágrima con la mano libre.
-La última conversación que tuve con ella no fue muy buena- confesó- le dije que me casaba con ella por obligación.
Junté las cejas sintiendo cierta lástima.
-Pero la quería, sentía mucho cariño por ella- apartó su mano de la mía y se las llevó al rostro- debí decírselo.
-Jace…-pasé mi mano por su rodilla intentando aguantar el nudo que se estaba formando en mi garganta- estoy segura de que Baela sabía que tú la querías.
Me miró y acercándose a mí besó mi frente con delicadeza.
-Le agradabas- sonrió intentando dejar de llorar- una vez me dijo que siempre que te veía andabas distraída por el castillo, como si buscaras algo o a alguien.
Sonreí.
-No se estar quieta…
Jace se puso de pie y pasó una mano por mi pelo.
-Iba a dar una vuelta en Vermax para despejar la mente- me ofreció su mano- no me importaría que me acompañaras.
Acepté su mano y nos pusimos de pie mientras yo extendía la otra mano para limpiar las lágrimas que aún surcaban su rostro.
-Eres un buen hombre…-susurré- Baela iba a ser muy afortunada de tenerte como esposo.
Jace me miró, como si estuviera intentando memorizar cada parte de mi rostro y besó la mano que aún me sujetaba.
-Gracias…
-Pero si fuera un buen hombre no habría discutido con Baela por ti.
-¿Por mi?- pregunté.
-No debí pedirte que fueras mi amante- agachó su cabeza algo avergonzado- actúe de forma injusta y egoísta.
-Está más que olvidado..-susurré sin apartar la mirada de él- aunque yo también debo pedirte disculpas por hacerte presenciar un beso que no tuviste por que ver.
Él levantó la vista y me apartó un mechón del pelo.
-Estuve a punto de romperle la cara- confesó- no soporte ver cómo te tocaba y por eso me fui, sabía que si me quedaba eso acabaría mal.
-Fue un beso para…
-¿Te gustó?
Su respuesta me cogió por sorpresa,pero asentí incapaz de mentirle.
-Aegon no es buen hombre- se acercó aún más a mí- solo destrozaría tu interior,¿Lo comprendes?
-No puede destrozar nada estando tan lejos de mí…-contesté en un hilo de voz.
Jace tragó saliva y besó mi mejilla posando su dedo en mi mentón.
-Dejemos de hablar de mi tío- me miró a escasos centímetros- y vamos a quitarnos los zapatos en la playa.
Sonreí incapaz de poder evitarlo.
-Voy a enseñarte cómo se debe cuidar un corazón tan frágil como el tuyo.
-¿Frágil?- pregunté.
-Has estado sola mucho tiempo, Lyanna- me dedicó una mirada que alteró mis nervios- tu corazón a debido de soportar mucho, pero ahora nos tienes a nosotros y a Daemon.
Sonrió agitando la cabeza.
-He visto como te mira , ¿Sabes?
Tiró de mi mano dispuesto a salir de su habitación.
-Y lo que tendré que discutir con él para que me deje pasar tiempo junto a ti.
Me reí viendo cómo me conducía hacia el exterior del castillo.
-No creo que te lo prohiba- dije provocando que él frenara sus pasos levantando la vista hacia él cielo para ver como un enorme dragón surcaba los cielos.
-¿Qué diablos hace Vaghar en Rocadragón?
-¿Vaghar?
-Es el dragón de…
-¡Aemond!- nos sobresaltó Melisa justo detrás de nosotros.
Los dos nos giramos para mirarla y fruncí el ceño esperando una aclaración.
-Lo siento mucho Lyanna- ella entrelazó sus manos con nerviosismo- espero que puedas perdonarme.
-¿Perdonarte?- me aparté de Jace y caminé hacia ella-¿Qué has hecho?
Escuchamos a Vaghar rugir con fuerza y clavé más aún mi mirada en Melisa. ¿Qué es lo que debía perdonarle?
-Aemond está aquí porque yo le dejé una nota escrita en la que le advertía del peligro que era dejarte marchar de la Fortaleza Roja.
Miré a Jace sin comprender de qué hablaba Melisa.
-¿Qué peligro puedo suponer yo?- pregunté esperando que fuera Jace el que contestara.
-No sé a qué puede referirse…-susurró Jace.
Miré de nuevo a Melisa y ella dio un paso hacia atrás.
-Lord Borros Baratheon firmó un acuerdo con otro señor por tenerte como sirvienta- ella se encogió de hombros- tanto tú como tu madre sois de su pertenencia.
-¿Qué?
Nos giramos a la vez cuando Vaghar aterrizó justo a nuestro lado y Aemond bajó con velocidad desenvainando su espada sin apartar su mirada de Jace.
-Podemos hacerlo por las buenas- me miró esbozando una sonrisa que recorrió todo mi cuerpo atemorizandome- o por las malas.
![](https://img.wattpad.com/cover/327992186-288-k720801.jpg)
ESTÁS LEYENDO
La chica del antifaz// Jacaerys Velaryon & Aegon Targaryen
RomanceFANFIC HOUSE OF THE DRAGON