Gran parte de la noche, Minghao fingió estar dormido, para así acurrucarse en los brazos ajenos.
Lo cierto es, que esa calidez, que tanto ansió tener, no eliminó la pesadez en su pecho, las pesadillas eran continuas, y el temor a perderlo todo le hacía despertar cada cierto tiempo, y asegurarse de no haber quedado atrapado en un mal sueño.
Jisoo no sé daba cuenta de aquellos episodios nocturnos. Agradecía eso. No ser un obstáculo.
Al llegar la madrugada y consigo el frío, empezó a conciliar de a poco el sueño, se resistió lo más que pudo a cerrar los ojos, quedó hipnotizado con el rostro del mayor.
Maldijo el momento en que el teléfono resonó con fuerza y el eco del apartamento empeoró el estruendo, no del todo consciente buscó a tientas el mismo en la mesita junto a la cama y atendió la llamada, sin detenerse a cuestionar quien era el remitente. Su cabeza estaba hecha un lío, las palabras no surgieron. Paso de estar somnoliento a preocuparse por el silencio. Una corazonada lo obligó a levantarse, se escondió en el baño, al recostarse a la pared se dejó caer al suelo completamente rendido.
—¡No cuelgues! —temiendo el rechazo, el hombre se esforzó en transmitir lo miserable que se sentía—. Necesitamos hablar.
—Tú necesitas hacerlo, yo no —respondió cansado, suspiro al notar que en realidad no había dormido nada, al darle un vistazo a la hora.
—Hao, por favor~
La súplica acabó por convencer al artista, se mantuvo en la llamada sin objetar nada. Cabeceó un par de veces esperando que Jun hablara y al final, recayó en la empatía.
—¿Estás...bien? —preguntó curioso en un susurro.
—Te extraño.
La probabilidad de que fuese una trampa, cruzó por la mente de Minghao, quiso burlarse del comentario, pero no lo hizo. De tanto pensarlo, se sintió mal por no visitarlo.
—Jun, voy a colgar, no quiero que te metas en problemas.
—Debes alejarte de él.
—¿Qué? —confundido alzó la voz, cubrió sus labios arrepentido.
—Su familia me tendió una trampa —explicó paranoico—, el otro día los niños grabaron la conversación. Escucharon sobre mi hermano.
—¿De qué diablos estás hablando?
—Eras el único que sabía y ahora la policía quiere llenar de mentiras mi cabeza. Jisoo no es él, ¿Cierto? —se le quebró la voz, tuvo que descansar antes de continuar—. ¡Es imposible!
—Oye...—un nudo se le formó en la garganta, los sollozos al otro lado de la línea le erizaron la piel—. Ve más despacio, para que pueda entenderte.
—Jisoo tenía unos exámenes de laboratorio el día que fue a dar al hospital —dijo omitiendo el hecho de haber sido el culpable—, no sé cómo ni por qué, pero hizo una prueba de parentesco con mi ADN. Alteraron el resultado. Estoy seguro de eso.
—¿Estás drogado? —preguntó por descarte, procesó la información a medias.
—¿Podrías confiar en mi, al menos una vez? —insistió el mafioso—, alguien quiere hacerme creer que es mi hermano, ¿Por qué?
—Dudo que Jisoo este armando un complot contra ti —renuente, sostuvo su cabeza con la esperanza de reducir el malestar—. No tiene sentido.
—Ese es el problema, hay otra persona detrás —dijo con notable desespero—, tienes que alejarte, ¿Recuerdas el lugar del que te hable cuando nos conocimos?, Escondete ahí.
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The Rain [HaoShua]
FanficSu alma gemela. Su otra mitad. Aquella persona a quien le pertenecía el extremo contrario de su hilo rojo del destino. Jisoo no creía en ninguna de esas tonterías. Sin embargo, al darse cuenta de quién era él..., eso cambio por completo. Pero el...