Su lejanía, esa frialdad que lo caracteriza y no estar en el lugar indicado cuando fue necesario, traerán dolor al empresario Jeon Jungkook.
Queda totalmente prohibida la adaptación de ésta historia sin mi consentimiento.
Amor
Enfermedad
Dolor
Cambi...
—¿Estuvo Jungkook conmigo dentro de la sala del hospital? —le preguntó Youngsoo a Jisoo cuando estaba echada en la cama de aquella lujosa habitación.
Era un lugar muy amplio, la cama enorme y en ella dormían juntas, porque su amiga no se separaba de ella en ningún momento.
—Sí, él llegó y armó un lío enorme. No sé qué decir de su comportamiento, pero retó a InYeop. Se conocen ¿Sabes? No sé de qué, será por ser los dos CEOS de tremendas empresas —dijo Jisoo y se recostó cerca de ella—. Me diste una envidia enorme.
—¿Porqué? —estaba Youngsoo con su interior mezclado de emociones, saber que estuvo a su lado era raro y a la vez muy especial para ella.
Quiso recordar las palabras que escuchó, pero no podía saber cuáles fueron.
—¿Qué porqué? ¡Ay amiga! Allí tan guapos los dos se decían cosas muy duras, pero yo escuché solo un poco porque me fui, no quería que dijeran que era una fisgona —suspiró y se levantó un poco haciendo aspavientos con las manos—. Pero que me hubiera quedado allí como si fuese el relleno de un sándwich, seguro que lo hubiera hecho. Ahí en medio de tremendos bombones que son la adicción de cualquier mujer y el placer personificado —se dejó caer de golpe en la cama poniendo cara de placer extremo.
Youngsoo empezó a reír, era su quitapenas, tan alegre siempre y decía lo que pensaba sin importarle nada.
—Tienes que ir a trabajar Jisoo, no quiero que tengas problemas por estar aquí conmigo siempre —le dijo ella mirándola un poco preocupada.
En eso llamaron a la puerta.
—¡Soy InYeop! ¿Puedo pasar?
Las dos se miraron.
—Amo vivir aquí amiga —dijo Jisoo y tapó a su amiga que tenía que estar en cama al menos por un día.
Ella se levantó y se puso su una bata porque estaba en pijama de pantalón corto.
Abrió la puerta.
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—Muy buenas señor Hwhang —le dijo con una sonrisa.
—Espero no molestar, solo vengo a decirle una cosa a la señorita....bueno mejor dicho a la señora Jeon —Jungkook le dejó claro que ya sabía quién era en realidad Youngsoo.
El día anterior.
—Jeon —le dijo InYeop al verlo aparecer por el pasillo del hospital.
Jungkook se quedó parado ante él y lo miró con una frialdad que al otro lo desconcertó.
Habían hecho tratos uno con el otro, los dos tuvieron en su poder la misma arma contra una de las peores enfermedades. Y resulta que él se la había entregado a su mujer, se portó mucho mejor y eso lo tenía desquiciado.
—¿Qué ocurre? —le preguntó porque no sabía de qué trataba todo aquello.
—¿Sabes siquiera quién es la mujer que hay ahí dentro? —su voz era grave y su cuerpo estaba totalmente erguido y desafiante. Su dureza hizo que Jisoo se levantara de una de las sillas que había allí para descansar.
