Cuarenta y seis

126 19 0
                                    

Más días pasaron igual, con Momo quedándose horas extra en la escuela para aprender su solo, Tzuyu yendo a trabajar y regresando muy tarde y agotada para hacer otra cosa además de dormir.

Momo se entristecía por cada hora que le robaran a su Tzuyu, aunque volvía a la normalidad en cuanto la abrazaba en las noches.

Pero donde peor se sentía era cuando la clase de baile terminaba, y ella quedaba sola estirando un poco sus músculos, al pensar que las horas que quedaban eran para morir de aburrimiento hasta la medianoche.

Mientras estiraba sus piernas en el suelo, la puerta de la sala de baile fue tocada dos veces, haciendo que alzara su vista, encontrándose con su querida directora.

Jeongyeon le dedicó una sonrisa.

-Todavía no tuve el placer de ver tu baile — dijo, acercándose a ella, se sentó junto a la castaña, quien aún estaba algo agitada por la clase, sus mejillas estaban rojas y sólo respondió con una sonrisa cansada―. ¿Te está gustando?

Momo asintió con ganas.

-Lo harás genial— la animó la mayor—. Hace mucho que no estoy con ustedes, ¿Pasó algo interesante?

Momo pensó un momento, se acomodó en el suelo, para sentarse mejor y ver a su directora.

-Hyo-dijo-. Se pu-so de pié, el otro día.

Jeongyeon abrió los ojos de más, antes de sonreír con alegría.

-¡Qué bien! Y todavía no la felicité- se sintió un poco mal, e hizo nota mental para hablar con la chica al día siguiente.

—Y... ¿Tú?— preguntó Momo, con sutileza. Jeongyeon no dejó de sonreír.

-¿Recuerdas en tu cumpleaños? ¿Qué tuve que ir con Nayeon?- Momo asintió―. Pues fuí, sin ganas, pero las cosas resultaron bastante bien.

>>Se supone que debía consolarla, pero terminamos discutiendo y se podría decir que me declaré- dijo.- No fue tan romántico y bonito como hubiera querido, pero le dije... Y también todo lo que pensaba de su estúpida relación con Jennie— añadió, en tono casi de asco.

Momo sonreía ampliamente al ver a su directora tan feliz.

-Fue muy raro, Moguri, pero me respondió— dijo, sonriendo—. Me dijo que yo le gustaba también, pero que creía que yo era como "demasiado" 'para ella... ¡Ja!

>>También me confesó que sí sentía algo por Jennie, pero que se debía más a todo lo que habían hecho, toda su historia... Y que conmigo era diferente, porque me quería exactamente igual que a ella, pero sin que hubiéramos hecho nada... Y eso la confundía un poco.

>>Esa noche sólo nos besamos, no nos malinterpretes- aclaró Jeongyeon, hablando rápido, haciendo que una risa escapara de los labios de Momo-. Todavía no le pedí ser mi novia, si fuera por mí, nos casaríamos, pero debo ir lento.

Momo rió más fuerte por las palabras de la mayor.

-Estoy muy feliz, Moguri- confesó Jeongyeon, su sonrisa sólo lo reafirmaba-, realmente feliz.

Momo sonrió por ella, de alguna forma, se sentía orgullosa por su mayor.

-Oh, tu madre me pidió que te llevara hasta tu casa-dijo—, estaba haciendo unas
compras, ¿Quieres ir? Momo asintió, levantándose rápidamente para tomar sus cosas.

En su mente, quería apurarse, la idea de que mientras más rápido llegara a casa para que más rápido llegara Tzuyu la llenaba de energía.

♡Loud²~MotzuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora