♡Loud²~Motzu

Cincuenta y Seis

Momo jugaba inquieta con sus dedos, mirando a todos lados del blanco pasillo, esperando que Tzuyu, o su madre, aparecieran por ella, sintiendo agobio entre toda la blancura y el horrible olor a alcohol que hacía su nariz picar.

-¡Moguuuuuuri!— canturreó Tzuyu, la pelirroja corrió un poco hacia ella con una sonrisa, había podido notar los ojitos de cachorro perdido desde lejos.

Abrió sus brazos y Momo no dudó en acomodarse en el abrazo, sonriendo al sentir la calidez de su novia.

-Todo está bien, amor— murmuró la pelirroja- ¿Vamos a la sala de espera?

Momo sólo asintió, caminaron a la par, con Tzuyu rodeando los hombros de la castaña con un brazo, hasta llegar a la dicha sala, una parte más relajada, cálida y un poco más humana comparada al resto del hospital.

-Estás muy callada, Momo- dijo Tzuyu, en cuando se sentaron algo apartadas de las otras personas de la habitación.

El tono de su novia había sido suave, pero ambos sabían que había sido más una exigencia.

-N-No quiero hablar— murmuró la castaña, mirando a Tzuyu, esperando que comprendiera.

Tzuyu apretó sus labios en una mueca, tomó las manos de Momo, acunandolas entre las suyas.

-Sabes que estoy aquí para ti, siempre— dijo.-Y no es que quiera que me cuentes qué piensas sólo para exigirlo... Te noto mal, Momo, y si hablas conmigo quizás te alivie.

Momo mordió su labio inferior, bajó su mirada hacia sus manos, abarcadas completamente entre las de Tzuyu.

-No qui-ero que su-fran—murmuró la castaña―, no qui-ero que llo-res, no qui-ero que les du-ela.

Momo sorbió un poco su nariz, aguantando las lágrimas.

-No qui-ero morir- admitió.

Tzuyu no tenía palabras, sintió sus palabras abandonarla, sólo atinó a abrazar a Momo, dejando que algunas lágrimas corrieran por sus mejillas.

-No vas a morir, Momo—dijo, su voz era segura.

-L-La pa-san mal p-por mi cul-pa- balbuceó Momo, entre llanto.
-Momo, eres la persona que más felicidad me trajo en toda mi vida― dijo la pelirroja -, y... Sí la paso mal cuando te veo mal, pero no se compara a toda la alegría que me da tenerte.

>> Así que no pienses en que nos haces sentir terribles, porque eres la persona más linda que pude conocer, y nunca dejes de serlo.

>> Y no vas a morir, porque nadie va a dejar que eso pase, ni yo, ni tu madre, ni los doctores... Sólo hay que pelear un tiempo, ¿Bien? Tú puedes pelear, Moguri, lo sabes.

Momo no respondió, se apartó para secar sus mejillas con la manga de su abrigo.

-Te a-mo, Chewy- murmuró, con una pequeña sonrisa.

Tzuyu había logrado calmarla, quizás no reconfortarla del todo, menos haberla convencido, pero entendía con todo su corazón que su novia nunca se rendiría con ella.

-Te amo más-respondió.