♡Loud²~Motzu

Treinta y Seis

-¿El señor Hirai te dio una condón?

-No, Sana, es un caramelo, ¿No conoces un paquete de golosinas?

-Oh, tienes razón, lo siento, no leí la parte de "Mentolado".

Las dos chicas no dijeron nada, algo incómodas.

Sana comenzó a reír, dejando el condón sobre la mesa, junto a Tzuyu, quien le dedicó una mirada molesta.

-Ahora que los jefecitos se fueron, Momo, puedes abrir mi- digo, el regalo de Tzuyu.

Momo miró confundida a su novia, ella ya le había dado su regalo, ¿Tendría otro?

Tzuyu tardó un momento en recordar, comenzó a negar, tratando de frenar a Sana, pero la pelirosa dejó la caja, pintada de rojo y con un moño del mismo color frente a Momo.

-Oh, tu color favorito, Tzuyu— comentó Jihyo con gracia.

La castaña pasó su mirada del regalo a Tzuyu antes de abrirlo, ladeando un poco su cabeza al ver lo que había en su interior.

Tanto Sana como Jihyo comenzaron a reír cuando Momo tomó las orejitas de gato de encaje y se las acomodó sobre la cabeza, con una sonrisa.

—Lindo― dijo la cumpleañera, con toda la inocencia del mundo.

Tzuyu escondía el rostro entre sus manos, encogida en su silla, insultando a Sana.

Sentía la inocencia de Momo en peligro.

Escuchó a Momo reír, con lo que pareció alegría, y abrió sus dedos un poco para ver, frunció el ceño cuando la vio abrazar lo que parecía ser un onesie de patito, y suspiró con alivio.

-Ni te relajes, hay más- dijo Sana, haciendo que Tzuyu se tensara de golpe, viendo a la castaña sacar un pote del interior de la caja, mirándolo sin entender lo que era hasta leer la etiqueta.

-Va-se-lina-dijo con torpeza, se preguntó por qué sus amigas le regalarían algo así, sin notar que su novia volvía a esconder su rostro con vergüenza mientras sus dos amigas reían.

Encontró un par de cartas con palabras bonitas, firmadas de parte de Sana y Jihyo, fue cuando comprendió que sólo estaban molestando a Tzuyu con el regalo, sonriendo mientras las leía, se levantó para abrazarlas como agradecimiento.

-Sana— murmuró Tzuyu, apretando las dientes, haciendo que la pelirosa se le acercara para hablar solo entre ellas dos-. No fue tan terrible como pensé, aunque creí que no lo harías... Sigues siendo una idiota.

Sana sólo rió.

-Lo iba a hacer en serio, Tzuyu, que poco me conoces-dijo, con una amplia sonrisa—. Pero todas las cosas que quería comprarles eran muy costosas, así que sólo les di lo más importante.

—¿Orejitas de gato y lubricante?

-Exacto-dijo.- Además Jihyo me hizo razonar, y si le regalaba todas esas cosas sería algo de ustedes dos, pero el cumpleaños es sólo de Momo, así que no sería un regalo para ella, por eso elegimos el onesie. Quizás para su aniversario les de esas cositas- la chica alzó las cejas varias veces, irritando a Tzuyu.