SOY SUYO

11. Mi mate

Ser cuestionado me tenía muy mal, vivía entre reuniones y defender mi nombre, peleando para que me respeten, por eso debía demostrar que si podía, que no solo era fuerte sino que también podía lograr mantener a mi familia, pero había un gran problema, no tenía a mi mate y quién mató a Jharla sabía muy bien eso. Mientras ella vivía, nadie dudó de mí, nunca cuestionaron mi habilidad, menos luego de que nuestras empresas formarán parte importante de la sociedad de los Lobos y de los humanos.

Comenzar las clases en la universidad otra vez no era algo que quería, aunque este sería mi último año, soy joven y no debería de atrasar esto que también era importante como perder mi manada, que era todo para mi; así que luego que empezarán las clases y analizarlo bien decidir ir con la rectora y tener un año sabático, no estudiaría, hasta que no termine de resolver este gran problema que me haría perder todo por lo cual he trabajado por más de unas décadas, mi manada era mi familia y juré ante ellos cuidarlos y protegerlos. No los podía abandonar ni defraudarlos, me tocaba luchar por ellos y sus vidas.

Le pedí a todos que nos reuniremos en la gran sala de nuestra casa, ver los rostros de todos, "no puedo fallarles", debo seguir con mi frente en alto y buscarle solución a todo esto.

— Necesito hablarles sobre algo — Les digo.

Oscar y Marine, están a mi lado. Quisiera tener eso que ellos tienen, quisiera tener a mi mate desde siempre y saber que será por siempre. Ellos dos estan a mi lados desde que eramos solo niños y aun asi nunca han dudado de mi, son mis amigos mas íntimos, los únicos con los que he contado siempre.

La última vez que reuní a todos aquí fue para informarles que la muerte de Jharla fue hecho por un lobo, la marca en su rostro y en su pecho solo un hombre lobo lo pudo hacer.

Todos me miran porque a partir de ese día, todos hemos tenido que cuidarnos mucho. Estar siempre juntos, jamás mentir o salir de la casa sin acompañante o sin vigilancia, hemos pasado unos meses muy difíciles.

— Hoy empezarán las clases y yo hoy...— tomo aire al ver como todos me miran, no estoy nervioso, fue una decisión que discutí con Óscar y él como yo sabemos que es lo mejor hasta poder solucionarlo todo.

— Decidí tomar un año sabático y...— hay murmullos que Óscar trata de calmar.

— ¡Dejen hablar a nuestro Alfa! — su voz se escucha en cada rincón de la casa. Por eso es mi beta, es uno de los más fuertes, los más grandes y con la voz más gruesa.

Se callan.

— Tengo que dedicarle tiempo a la empresa y también... — los miro a todos — a ustedes, perder a Jharla fue difícil y...

— ¡Jharla era nuestra luna!, — me interrumpe Yurli, ella era la hermana de Jharla y se enseña a culparme de todo lo que paso — deberías de afrontar de una vez que no sirves como Alfa, no puedes dirigir una manada.

— ¡Callate Yurli! — la amenaza Marine — Sabes muy bien que Jharla no era nuestra luna — ella me mira, sus ojos grises me dan su apoyo y le pido que no siga. A estas alturas la rabia de Yurli la entiendo.

— Solo quería decirles eso — termino ignorando la discusión y mirando a Yurli, ella sabe muy bien que aqui estará mejor que con su padre, pero su dolor por perder a su hermana no la deja ser razonable. La entiendo.

— Iremos a la universidad todos — digo — yo iré con la rectora en una reunión en la facultad.

— Debemos ir contigo Alfa — dice Henry uno de los chicos — te apoyamos.

Algunos aprueban su idea otros prefieren callar.

Siento que todo esto ellos también dudan de mí. Debo hacer algo pronto, que vuelvan a confiar.

— Vamos, no los obligaré a nada, solo quería que supieran mi decisión — bajo las escaleras y mi celular suena.

La rectora avisó que nuestra reunión tardaría un poco porque se reunirá con los nuevos alumnos y quería que estuviera con ella. Formo parte del consejo de estudiantes de mi facultad, y debo dar la bienvenida junto a ella.

— ¡Yurli! — ella voltea y me mira — sube a mi camioneta — le ordeno y todos nos ven.

La mayoría estudiamos economía y negocios, tenemos varias de empresas una de tecnologia y otra de inversiones, todos en mi manada trabajan de alguna y otra forma, si no es en la empresa en la casa, puede ser independiente y decides en algún momento dejar la casa, tengo miembros de mi manada fuera de en la ciudad, algunos en la agencia de la policía y otros son deportistas profesionales, dentro de la política y hasta solo ser estudiante en la universidad, los que aún están en la casa es porque estudian, muchos en la universidad sabe quien soy. Me respetan.

— Yuili, si no quieres seguir aquí no te voy a detener. Hablaré para que mi padre te acepte — le digo mientras los ojos verdes de Yurli se pierde por el paisaje que muestra la ventanilla del auto.— y que sus condiciones no sean tan severas. Sabes que podré hacerlo.

— ¿Te importa tan poco la pérdida de Jharla? deberías de estar triste. Acepta que no sirves como Alfa, Xder — dice con rabia.

— Jarla no es la única. No voy a renunciar por un error de ella — voltea y me mira con odio.

— ¿La culpas a ella? ¿La culpa por lo que le pasó? Eres...eres!

— ¡Recuerda quién es Xder, Yurli! — habla Oscar que es él quien maneja el auto — es tu Alfa y le debes respeto.

— ¿Respeto? — se molesta aún más y yo suspiro — ¡acaba de culpar a mi hermana muerta de que la mataran!

— Quién mató a Jharla quería que yo renunciara, ¿eso es lo que tu quieres también? — le digo — ¿es así, Yurli? Si es asi tu eres responsable de que ella muriera. Y si, la culpo — digo con voz firme — la culpo porque no se puede tener secreto entre nosotros, yo lo prohíbo y ella los tuvo. Se veía con alguien en ese lugar y ese alguien la mató. Así que si no quieres estar aquí y que sea tu Alfa. Hablaré con mi padre, tienes hasta mañana para decidirlo. Y será lo último que te diré! si no te vas seguirás en tu puesto y no me desafiaras más delante del resto, soy condescendiente contigo y no te castigo como debería hacerlo. O ¿si? ¿eso es lo que quieres para que empieces a respetarme?

Se mantiene callada.

— Jharla fue la que me pidió que no se castigara como dicen las leyes en la manada, ella me lo pidio y por eso yo no lo hago — ella sabe muy bien las leyes, las conoce porque ella es una de las que mas las estudia en nuestra manada — decidete y me lo haces saber.

Ella no habla, como todos en el auto, soy considerada pero también debo ser firme, no la dejare conmigo para que se siga lamentando cuando no fui solo yo el responsable de la muerte de Jharla, ella fue irresponsable y no pude