Aude Lois Grameth, estaba emocionada realizando su sueño y el de sus padres, ir a la universidad para ser una abogada prestigiosa.
Xder Fleming, es el más joven de los Alfas y estaba seguro que alguien quería que perdiera su manada.
El era el Alfa...
Camino con muy poca calma, el encuentro con los padres de Aude no estuvo bien, pero con lo que ahora sé, tampoco dejaré que nadie me la quite, y menos un idiota humano que tuvo la osadía de tocar a mi mate.
Lo miro, y no puedo creer que ese imbécil haya estado con ella.
— ¿Erick Hermeson? — pregunto y el cometa su rostro, me mira.
— ¿Puedo ayudarte? — estamos dentro de una tienda donde según este tal Erick trabaja.
— Necesito hablarte, ¿salimos? — le pido y el me mira extrañado.
— Estoy trabajando y no se quién eres — lo mítico y suspiro.
A veces los humanos son tan estúpidos. No soporto en verdad pensar que él la tocó, que fue capaz de estar con ella, si se nota que no se la merecía, Aude es mucho para un simple humano como el.
— Te sugiero que me sigas — digo molesto, mientras más lo veo mis celos aumentan. Odio pensarla con otro y mientras más rápido termine con esto, mejor.
— Oye... — dice y lo saco del lugar tomándolo por la camisa el idiota se queja hasta que estamos afuera del lugar, lo llevo hasta un callejón cerca y lo arrastro hasta ahí, lo empujo y cae.
— Voy a llamar a la policía, ¿quién te crees? — dice y siento su miedo ante mi.
Y si, debería sentir mucho miedo porque mi impulso protector es muy volátil y hasta no ver su sangre no estaré tranquilo.
— ¿Conoces a Aude Lois Grameth? — pregunto mientras él se levanta y sacude su ropa.
— Mira, no se quien eres, pero yo tampoco tengo que ver con ella — lo escuchó y me enfurece su actitud despreocupada al escuchar el nombre de mi amada luna.
— Voy a volver a preguntar — digo con calma, aunque Dark no está nada calmado, ya quiere romperle la cara — ¿sabes quien es Aude Lois Grameth?
Me mira.
— ¿Quien, la rarita? — dice y levantó una ceja, ¿acaba de llamar rara a mi Aude? ¿Será que quiere morir?
— ¿Cómo la llamastes?
— ¿Eres el novio de esa rara? Mira, yo en verdad solo estuve con ella una vez, no me simpatizaba nada solo que ...
Le di el primer golpe porque ya no aguantaba que siguiera faltándole el respeto a mi amada, él no sabe quién es ella y lo importante que es. No tiene ni puta idea la estupidez que hizo al quitarle la virtud a Aude y tomarlo como si fuera algo sin importancia. Debería de matarlo, debería de dejar claro que no volverá ni siquiera a pensar en ella.
Cuando trata de recuperarse lo tomo por el cuello, Dark está ansioso por salir pero estamos muy cerca de que nos vean y no estaría bien mostrarlo y espantar a los humanos a mi alrededor.
— No vuelvas siquiera a nombrarla — lo amenazó — y necesito que la liberes de los asquerosos recuerdos que compartió contigo.
— Ok ok, ya te dije que solo estuve una vez con ella — se queja y trata de fajarse de mi agarre, pero eso será imposible.
— ¡Repítelo! — le exijo — yo, Erick estupido Hermeson, Libero a Aude Lois Grameth a todo aquello que la une a mi en el pasado.
— ¿Qué mierdas? ¿estás loco? — lo suelto y vuelvo a golpearlo, esta vez sangró por la nariz.
Pero siento que eso no será suficiente hasta que decida liberarla.
— ¡Repítelo, carajo! ¡que no tengo todo el día, imbécil! — lo agarro por el cuello y la camisa y lo levantó del suelo — repite lo que te acabo de decir.
— Ok ok... — está asustado y Dark ríe, estoy seguro que se hará sobre sus pantalones. — Libero a...libero a...
— ¡Maldición apurate! — siento que vendrá gente a donde estamos.
— Esta bien, esta bien. Solo no recuerdo lo que tengo que decir — ¿será imbécil?
Lo suelto tirando al suelo y pongo mis manos una sobre mi cara.
— Solo repite — digo.
— Si, si. Voy a repetir — me mira mientras se levanta dejando distancia entre los dos.
— Yo, Erick Hermeson, libero a Aude Lois Grameth de todo aquello que la une a mi en el pasado — le digo y lo miró con mi poca paciencia y lo vuelvo a agarrar con fuerza de la camisa y se la rompo.
— Si, si ya lo digo, ya lo digo — dice casi llorando.
— ¡Dilo, mierda! — le grito y tiembla.
— Yo....yo... ibero...libero a Aude Gramert... Yo, Erick Hermeson, libero a Aude Lois Grameth de todo aquello que la une a mi en el pasado... libero a Aude Lois Grameth de todo aquello que la une a mi en el pasado — me mira — ¿Así?
Lo tomo y saco el pergamino del bolsillo trasero de mi pantalón.
Y ante que lo note, tono su rostro y marcó su sangre en el acuerdo y lo suelto. El me mira agitado, está realmente asustado.
— Olvidaras todo de ella — habla Darw y él me miraba, se desmaya.
Yo quemo el acuerdo mientra camino dejando que las cenizas se la lleve el viento, liberando a Aude de todo lo que tenga que ver con este imbécil.
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