SOY SUYO

32. ¿Quién soy?

— Y yo ¿quien soy? — sigo con mis dudas — ahora que llevo esto — muestro mi hombro y él me la mira — ¿que significa esto? ¿que seré tu pareja? ¿que seré tu...amante? ¿que soy para tí?

— Ahora eres todo — responde, su tono de voz baja, aunque sigue siendo profunda y sigo sintiéndola en mi interior — eres lo que llamamos mate, mi mitad, lo que llaman los humano como soul mate, eres eso para mi, solo que para los lobos eso tiene un significado...más profundo.

— ¿Mas profundo? explicame — le pido.

Sonríe y me parece tan adorable. Enserio  ¿ahora lo ves de esa manera?

— Hay muchas cosa que  quisieras saber, y yo estaría dispuesto a decirte, pero no has comido en días y quiero...

— ¿En días? ¿cuanto tiempo estuve dormida? — pregunto sorprendida

— Desde que llegamos hoy son tres días — dice y me quita el cabello del hombro que por la brisa tapo su marca. — me preocupe mucho por que no sabia que pasaría, tuve miedo de perderte — su voz es tan sincera, que me conmueve.

— Tenias que hacerlo ¿No? eso me dijiste — sonríe otra vez y me mira rascando su cabeza.

— Si te soy sincero, me apresure, pero si, tenia la necesidad de apresurar todo, soy un Alfa y he perdido mucho — parece tristes, posa su mirada en el suelo — encontrarte me dio la fortaleza para seguir, pero te necesitaba, por eso lo hice, y Dark se sobrepaso en hacerlo — toca mi hombro con caricias suaves, mi piel se eriza, y muerdo mi labio para enviar suspirar.

— ¿Dark? — pregunto confundida

— Mi lobo se llama Dark, el te mordió y ahora se siente apenado por todo lo que te hizo pasar.

— ¿Tu lobo? no entiendo — cada vez todo es más confuso.

— Soy un hombre, como vez — estira sus manos y muestra su musculoso cuerpo — pero mi espíritu es de un lobo, soy uno, el es mi parte animal.

Me quedo en silencio.

— ¿El me mordió? — pregunto — ¿y tú?

— Diría que él es mi parte impulsiva — sonríe y muerde su labio, es tan provocativo — a veces es más fuerte que mi parte racional. Me disculpo por lo que pasó. Lo siento, Aude.

— ¿No pensantes en hablarme y decírmelo, antes? — le preguntó, apartando la mirada de su pecho.

Sentí ganas de pegarme de él.

¡Contrólate! — me digo.

— Lo pensé, si — responde — pero... ahora estas confundida, pero ¿si recuerdas todo lo que me dijistes luego de que marque?, como estabas y como te pusiste. No creo que si te lo hubiera dicho antes, resultara bien.

Sonrió.

— Tienes razón, lo siento — le digo un poco avergonzada, le dije muchas cosas porque estaba confundida y herida.

— No lo sientas — responde — fui yo que actúe muy mal. Es mi primera vez. Soy un joven Alfa que decidió hacer su manada y sus leyes, es difícil cuando no tienes en quien apoyarte.

— ¿Eres un Alfa?

Asiente orgulloso.

— Soy el guía de esta manada — dice — debo ser fuerte en todos mis hábitos, y tu me completastes con tu llegada.

Sus palabras por alguna razón me hace sonrojarme, como si aquello que acaba de decir es lo más tierno y dulce que me han dicho. Viniendo de un hombre tan rudo como él, creo que sí lo es.

— ¿Y yo soy? — vuelvo a preguntar

— Eres mi Luna, quien alumbrará con tu luz mi camino y el de nuestra manada.

¿Poeta? a demás de ser sexy el joven lobo a mi lado resulta poeta, curioso. Pero no quise reír, pero si le sonreí.

 — Ahora vamos, que debo hacer muchas cosas y tú debes comer — me guía hacia el interior de la habitación y no lo veo tomar su celular mientras voy hasta el espejo, llevo un camisón largo color rosa muy claro, no tengo ropa, y de repente recuerdo porque estoy ahí.

Gretha, había muerto en nuestra habitación.

— El closet esta lleno de ropa — me dice y me muestra la puerta que ahora abre.

Era cierto, había mucha ropa la mayoría eran blancas.

— ¿De quien es? — pregunto tocando las prendas, también había zapatos y en los cajones ropa interior.

— Es tuya, la pedi el dia que llegamos, ya que no pude ir por la que tienes en la habitación de tu residencia estudiantil — cerró la puerta y me miró — sobre tu amiga...

— ¿Qué paso? estuve todo este tiempo dormida y...

— Ella murió y su familia se llevo su cuerpo al siguiente día del hecho, el problema es que... — tomo mi mano y se sentó en la cama haciendo que yo hiciera lo mismo también — uno de mis chicos esta involucrado en su muerte — me sorprendo poniendo mis manos sobre la boca — el no la mato.

— ¿Como lo sabes? dices que esta involucrado también.

— El murio horas despues con una horrible herida en su espalda — me sorprendo aun mas de su confesión — me dijo cosas sobre él y ella, que aun estoy investigando.

— Podría hablarle a...

— No,  quiero hacer esto yo, no quiero involucrate. Porque esta no es la primera muerte que involucra a mi manada — lo miro con detalle, su rostro se contrae quizás de dolor — el año pasado perdimos a... una persona especial para todos, especialmente para mi.

— Hmm... ¿tu novia? — pregunto y sonríe

— No, Jharla y yo no eramos novios ni nada de eso, ella era como mi hermana, mi compañera — me mira, parece triste — Alguien la mato con la finalidad de dañar y acabar con lo que soy.

— Quiere decir que...

— Quiere decir que te cuidare mucho — dice y se levanta — que ahora que todos sabrán quien eres, debo cuidarte mucho mas.

Tomo mi rostro entre sus manos, y siento como todo mi cuerpo se estremece con el solo roce de sus manos, besa mi frente.

— Tomare un baño y vendré a comer con contigo antes de salir — dice y se va.

Me lanzo sobre la cama y miro hacia el techo.

Estoy muy confundida, Hombres lobos, luna, marcas, todo esto es tan nuevo y algo loco.