Bajo la superficie [BORRADOR]

Capítulo 3

Después de seis horas de gritos, suplicas, promesas y posibles traumas -para mi -estoy en el sofá con el monstruito rubio que está en frente de la TV pasando canales a lo loco, sin detenerse en uno en específico.

Debo admitir que estoy jodidamente exhausta, sabia a lo que me enfrentaba, pero ahora sé que la paga no es suficiente.

Miro a la niña.

Ella parece un angelito incapaz de hacer algo malo, pero solo me bastó unas horas para darme cuenta que es todo un demonio de la destrucción. Aunque admito, su personalidad me agrada un poco, es tan obstinada y orgullosa que da ternura. En la mañana no hizo más que presumir su sorprendente cantidad de juguetes, tanto que me hizo sentir mal por un momento, luego miré todo su entorno y me di cuenta que esto es justo lo que todo niño necesita.

Al darme cuenta que su jueguecito con los canales va por mal camino, le arrebató el control y busco de nuevo los canales "aprobados por mi" que dijo su madre. Marco el primer canal que encuentro en la lista que me entregó y Lian comienza a saltar gritando la letra de la canción.

—Algo raro vas a ver y de otra dimensión, no soy de aquí pues...

Después de terminar de ver la pequeña coreografía de la niña, mis ojos se concentran en la caricatura de una princesa caprichosa que viene de otro planeta llamado Mewni, creo. Llega a la tierra y se hospeda en la casa de un personaje bastante simpático, Marco Díaz.

Luego frunzo el ceño al notar que he pasado mucho tiempo viendo esos muñecos raros y me concentro en mi teléfono para hablar con mi mejor amiga, Holly.

Ella me va contando como va todo el viaje de camino a D.C, ya que viene de su campus para pasar el fin de semana. Aún se me estruja el corazón al recordar que las cosas no están saliendo como lo planeamos. Cuando éramos pequeñas siempre fantaseamos con ir a la universidad juntas, ir a fiesta, conocer los mismo amigos, tener lindos novios y vivir en el mismo piso, pero todo esos planes se vinieron a bajo.

Me alegra genuinamente que ella esté cumpliendo sus sueños, los míos van a tardar un poco y no se van a dar como planee, pero me mantengo positiva ante eso.

Holly ganó una beca universitarias gracias a su buen desempeño academia, también Hayden. ¡Diablos! Hayden es puto genio, pero decidió rechazar la oferta.

De repente el sonido de una llaves hacen que deje el teléfono a un lado. Me apresuro acomodarme y superviso que todo esté en orden con Lian, cuando veo que en el televisor en vez de unos latosos muñequitos hay tres grandes cuadros pidiendo un PIN, me altero.

¡Canales de adultos!

Entro en pánico, unos pasos resuenan a través del pasillo y me apresuro arrebatarle el control a la niña del demonio que comienza a gritar.

Diosito soy yo otra vez. ¡Me van a correr en mi primer día! ¡ayudaaa!

Logro quitárselo y presiono botones a la loca con la esperanza que se quite, pero esta cosa no cede y me desespero más cuando escucho a Lian empezar a llorar y justo entonces, veo a la persona asomarse por el pasillo.

A la mierda, apago la TV.

—Tío Dru, Ika a regaño —se apresura a decir mientras corre a sus brazos.

Tomo un largo suspiro que casi me hace desvanecer en el sofá, solo que decido levantar el rostro y sonreír con una sonrisa forzada al hombre que está frente de mi, pronto se desvanece al notar que Lian está llorando como una Magdalena.

—Debes estar pensando que soy la peor niñera, solo es que...

—Voy a tratar de ignóralo también —dice sin ninguna emoción.