Capítulo 55

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-Por fin terminó el día, ya estaba exhausta de tanto trabajo, trabajo y trabajo.

-Ja, ja, pero si yo te veía cabecear en clase, no trabajar.

-Ush, es que ese profesor me cae mal.

-Me sorprendería si a alguien le cayera bien, sinceramente.

-¿Shady?

Volteé, otra vez, ¿de verdad no se cansa?

-Yo mejor me voy.

-No, Rosita, vámonos, ¿sí?

Ella asintió, la abracé nuevamente y la invité a subir a mi moto, ella subió cuidadosamente y comencé a avanzar, escuché que María comenzó a acelerar el paso así que aumenté la velocidad, Rose se sujetó a mi un poco más para evitar caerse, cuando imaginé que ya estaríamos lejos, bajé un poco la velocidad y me detuve.

-¿Dónde estamos?

-En el muelle, ¿no lo reconoces?

-Se ve totalmente diferente de día y sin decoraciones.

-Te entiendo, hace tiempo que no estabas aquí y no recuerdo haberte visto nunca pasear por aquí.

-Ah, no, no solía venir acá, ya sabes, me la pasaba persiguiendo a Sonic y pues... Nunca me detuve a admirar nada.

-Ven, vamos, quiero sentarme un rato cerca del agua.

Lentamente me acerqué a la orilla del lago, aún con tantos festivales, el agua se conserva limpia y cristalina, es relajante ver tanta paz en ella. Rose se sentó al lado de mi y se recargó en mi hombro, yo por mi parte recargué mi cabeza en ella.

-¿Qué somos?

-¿A qué te refieres? - levanté ligeramente mi cabeza y la miré, tenía la mirada algo triste -.

-Bueno, ya sabes, no sé qué somos y no sé si tú sigas enamorado de ella o no...

Comenzó a sollozar de nuevo, no me gusta verla llorar.

-Rosita, yo no estoy enamorado ya de ella, eso es pasado, ¿por qué dudas?

-Es solo que veo como te sigue buscando, sigue queriendo hablar contigo y...

-Tú mejor que nadie debe saber que solo lo hace por lastimarte, ella, por alguna razón sigue creyendo que puede hacer conmigo lo que le plazca, pero no es así, eso hace tiempo que terminó, yo estoy enamorado de ti, te amo a ti.

-Sha... Shadow...

-Tonta.

No resistí más, la besé de nuevo, quería hacerle entender lo que siento por ella, lo genuino que son mis sentimientos hacia ella, es extraño, pero por alguna razón ya ni siquiera trataba de mantenerme frío y rudo, quiero mostrarle verdaderamente todo lo que siento por ella. Después de separarnos, ella volvió a recostarse en mi hombro.

-¿Qué debería hacer?

-¿Con qué?

-Ya no sé si debería vengarme, aún con todo lo que ha pasado, no me veo capaz de seguir con esto.

-Ya imaginaba algo así, ¿sabes? Tú siempre has sido así y está bien, siempre has sido alguien que ve luz por muy difícil que sea la situación, sabes que te apoyaré.

-Gracias, Shadow, muchas gracias.

-¿Nos vamos? Seguro Silver estará preocupado.

Ella me sonrió y asintió, subimos a la moto y comencé a conducir, al cabo de un rato, llegamos con Silver.

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