Capítulo 15

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Me encontraba en casa de Silver, pues le había comentado de mi salida con Shadow, aunque a él no le convencía y se notaba algo molesto.

-Silver, ya te dije que esto puede beneficiarnos... Si hago que se ilusione, su caída será más baja-.

-Amy, no dudo de tu juicio, pero me sorprende que hayas aceptado salir con él sólo porque te hizo carita de perro-.

-Él no me hizo nada, en realidad, pero no quita el hecho de que sólo se quedó observando lo que pasaba, sin hacer ni decir nada-.

Estaba sentado frente a mí, pero luego se levantó y fue a la cocina, para tocar con un tenedor la carne que se estaba descongelando en agua caliente. Al cabo de unos segundos, volvió a sentarse frente a mí.

-Silver, ¿por qué fuiste a buscarme? – su expresión cambió a una sorprendida-.

-¿Ya viste la hora? Deberías irte a casa.

Genial, evitó mi pregunta y no entiendo con que motivo iría a buscar a alguien a quien evitó un buen rato, pues siempre que le hablaba salía corriendo con la cara totalmente roja.

Me sacaba con leves empujones de su casa, por lo que reaccioné y me aparté de la puerta, no podía creer su actitud, pues bien sabía que estaba depositando mi confianza en alguien que podía traicionarme si es lo correcto, ¿y él no podía responder a una sola pregunta?

-Silver... Vas a contestar a mi pregunta o te juro que tu pecho se quedará sin pelo. –mi mirada pasó un momento a su pecho, y yo me mantenía en una posición firme e intimidante-.

-¿Me estás amenazando, Amelia? –imitó mi postura y juro que pude brincar de susto, le quedaba bien-.

-Sí. –me mantuve tranquila y firme aún-.

-Jaja, pues lo siento, ¡adiós! – canturreó y utilizó su telequinesis para sacarme de su casa, maldito sea-.

Con su mano libre abrió la puerta y me dejó lo suficientemente lejos para que volviera a entrar sin problemas.

Dejé el tema por la paz y me fui a descansar, después de todo aún tenía que arreglarme y vestirme para la noche.

(...)

Al llegar a casa le mandé a Silver un mensaje:

-Silver, ¿podrías acompañarme al muelle? Sólo en caso de que ocurra algo y tenga que huir de ahí.

Casi al instante, me llegó su réplica:

-De acuerdo, estaré ahí a las 8:30 para que Shadow no sospeche.

Aún restaban 3 horas para ir al dichoso festival, por lo que buscaba que atuendo ocupar para un festival, pero antes de eso comí algo, no iría con el estómago vacío, no señor. Ya después de comer, me lavé los dientes, me duché y me fui a preparar, pues ya restaban 2 horas.

Opté por un vestido de color rojo, que llegaba hasta mis rodillas y unas zapatillas con poco tacón a juego.

Mis púas ya estaban largas, por lo que opté por hacer un peinado parecido al de Bella, de la Bella y la Bestia, cuando van a su baile. Me maquillé de modo que se viera natural. ¿Qué? Uno aprende cosas de maquillar cuando se estudia actuación.

Restaba media hora para que llegara Shadow, así que me senté y esperé.

Restaba media hora para que llegara Shadow, así que me senté y esperé

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