Final 3

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-¿Ya decidiste, Rosita?

-Ya, Shady, ya sé qué haré.

-¿Quieres compañía?

-Je, je, creo que podré sola, solo necesitaré ayuda con alguien en especial.

-No me agrada la idea, pero de acuerdo, esperaré tu señal.

Me besó y se adelantó, mientras tanto yo fui con alguien. Toqué, después de escuchar un "adelante" proveniente de dentro, pasé.

-Le recuerdo que es horario de clases y.. ¿Necesitas algo?

-La verdad, si, quiero disculparme.

-¿Qué?

-Eso, lo siento mucho, yo llegué con mucho rencor y no encontré mejor manera que vengarme pero... Ahora veo que no es lo que quiero, no puedo, porque antes de todo ustedes fueron mis amigos y no está bien hacerles daño.

-Ay, Amy, yo también quiero disculparme contigo, dejé que María me llenara la cabeza, ni siquiera me detuve a pensar en el tiempo que nos conocíamos, creo que sabe manipular corazones y por eso actué como actué, lo siento mucho Amy, nunca quise hacerte nada.

Soltó un par de lágrimas y yo junto con él, sé que Tails es honesto, no puedo enojarme con él, ahora veíamos que María era la culpable de todo y aunque eso no los liberaba de su culpa, si la disminuía.

Cuando terminé de hablar con él, me dirigí a hablar con todos y cada uno de los que eran mis amigos, logrando recuperar la amistad de todos, dándonos cuenta que el factor en común es María, todo lo hizo María., ahora sólo quedaba una persona más, la más difícil.

Cuando llegó el receso, Shadow enseguida me encontró y aunque noté su preocupación al ver mis ojos rojizos, rápidamente lo tranquilicé, era hora de hablar con Sonic.

Cuando lo encontramos, él trató de irse repetidamente, pero finalmente y ante mi insistencia y la de Shadow, aceptó hablar conmigo, fuimos al lugar secreto, así estaríamos un poco más tranquilos.

-¿Y bien? ¿Se te ofrece algo?

-Disculparme.

-¿Cómo? ¿Tú?

-Yo sé que actué mal, pero no pensaba con claridad, solo estaba dejándome llevar por el rencor y, aunque tardé mucho, ahora entiendo que no es lo que quiero. Me heriste, me heriste mucho, pero no podría estar sin tu amistad y bueno, al hablar con todos, descubrí que la mayor parte de la culpa es de María, pues nos manipuló a todos y bueno, todos salimos mal de esto.

Él simplemente me abrazó y comenzó a llorar, lo cual me hizo llorar a mí, después de unos minutos, logramos detener el llanto.

-Siempre seremos amigos, Ammes... Aunque... Bueno, no importa, con recuperar tu amistad me basta.

Le sonreí, sinceramente si estaba contenta con mi decisión, al menos pude recuperar a mis amigos de nuevo, aún tenía la incertidumbre, en el fondo estaba esperando recibir de nuevo una puñalada de parte de ellos, pero por ahora estaba conforme con mi decisión, Shadow al poco rato fue a buscarme, aunque no le agradaba la idea de que tuviera de nuevo amistad con ellos, ambos sabemos que mi decisión es la mejor.

Fuimos de nuevo a hablar con Tails, a fin de cuentas me salté casi todas las clases, ya no hacía falta entrar a las últimas, además de que no sentía ganas, quería dormir después de llorar tanto.

-Adelante.

-Hola de nuevo.

-Oh, Amy, Shadow, pasen.

-Solo vengo a pedirte un permiso, Rose no se siente muy bien y no creo que esté Silver, ¿puedo retirarme con ella?

-Adelante, justificaré sus faltas, de todos modos no habían faltado así que será fácil, tranquilos, déjenmelo a mí.

-Gracias, Tails.

-Rosita, espérame afuera, ¿si? No tardo.

Asentí y antes de salir, noté la mirada confundida de Tails, supongo que no es normal para él que Shadow use apodos o que hable tan cariñoso, aunque a mí me gusta mucho que lo haga. Me quedé cerca de la puerta, esperando que no me descubriera Shadow, tiene buen oído.

-¿Hay algo más?

-Sí, sólo quería advertirte una pequeña cosa y también quiero que se lo comuniques a los demás, si le vuelven a hacer algo a Rose, no seré compasivo con ninguno de ustedes, ¿entiendes? Si vuelvo a ver a Rose llorando por su culpa, me aseguraré de que jamás vuelvan a salir del hospital.

-Escucha, por mi parte no habrá más problemas, no quiero hacerle daño y ya no me dejaré manipular por nadie, tienes mi palabra.

Imaginé que Shadow ya saldría, así que me alejé con cuidado de la puerta.

-Vamos, Rosita - sabía que me delataría sola, pero lo abracé y no pude evitar llorar, él me abrazó más, imagino que si sabe que escuché la conversación y como si leyera mi mente... -, haría cualquier cosa por ti y lo sabes, no llores Rosita, lo que le dije es verdad.

-Lo sé, y eso me hace sentir feliz.

Me besó de nuevo, cada vez me besa con más frecuencia y eso me da a entender que todo lo que dice y hace por mi es verdad, no me cabe la menor duda de que hice bien al elegir conocernos.

No fuimos directamente a casa de Silver, primero pasamos al campo de rosas, luego me invitó a comer, después me llevó a diferentes lugares a caminar, él sabía perfectamente que quería distraerme, al final pasamos con Silver y le contamos todo, solo se quedó preocupado por saber que podría hacer María ahora, y aunque nosotros también lo estábamos, decidimos no tomarle mucha importancia.

(...)

-Amy, hola, buenos días.

-Hola, Sally, ¿qué tal?

-¡Sally! ¿Por qué estás hablando tan amablemente con esa zorra?

-En primer lugar, María, tú eres la única zorra aquí.

-¿Cómo te atreves..?

-Lo que dice Sally es cierto - ahora habló Fiona -, hiciste que cayéramos tan bajo, a tal punto de humillar a Amy, sólo porque nos metiste ideas a la cabeza, pero ya no más, jamás te lo vamos a volver a permitir, si te vuelves a meter con Amy, no sólo te las verás conmigo, si no con todos.

María, al verse acorralada por todos, salió corriendo del colegio, ahora se cambiaban los papeles y sin necesidad de humillarla como ella hizo conmigo.

Después de ese día, no supimos nada más de María y nosotros continuamos tratando de reparar los lazos perdidos.

RevengeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora