Capítulo 23

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(3 días antes de la celebración)

-¿Y bien, Amy, qué tienes planeado?

-¿Cuánto tienes a tu disposición para gastar?

-El dinero no es problema.

-¿Podemos comprar alcohol?

-Mamá dijo que no... Pero ella no está aquí -Silver sonrió de manera pícara-.

-Ey, ey, nada de alcohol.

-Ash, que amargado. Regresando al tema, lo mejor es que la fiesta sea al atardecer, justo antes de que caiga la noche, para evitar que se vayan temprano.

-Sí, es una buena idea... A todo esto, ¿qué hace él aquí?

-Ey, no hables de mí como si no estuviera aquí. Estoy dispuesto a ayudarla.

-Te lo advierto, un paso en falso y en vez de ayudarla serás parte de -Silver lo miró de manera amenazadora-.

-Tienes mi palabra, no haré nada extraño.

Silver relajó la mirada, para luego dirigirse a Amy.

-¿Te quedarás a dormir?

-Sí, no quiero ir a casa hoy, mamá está muy pesada.

-De acuerdo, aún queda tiempo antes del anochecer... ¿Vamos por las decoraciones?

Resoplando, Amy y Shadow asintieron, lo que causó emoción en Silver.
Caminaban tranquilamente por la plaza, viendo que tipo de invitación enviarían, qué globos pondrían, entre otras cosas. Silver parecía divertirse y a Amy eso lo alegraba. Hace años que no pasaba tiempo con Silver.

De pronto, Amy se detuvo. Miraba fijamente un hermoso vestido color rojo.

-Ah, ¿aún te gusta ese color?

-Jamás dejó de gustarme, simplemente opté por utilizarlo menos. Ya sabes, colores oscuros.

-No digo que te siente mal el color negro, pero no tienes que aparentar. Tú ya eres... Bueno, tú eres tú con cualquier color que ocupes. Deberías retomar lo que eras antes.

-¿Ahora eres experto?

-Ja, ja, no, pero es algo que escuché por ahí. Vamos, cabeza de chicle, Silver nos está dejando atrás.

Pasó su mano por su cabello, despeinándola en el acto.

-¡Ey! Me cuesta mucho trabajo mantenerlo arreglado.

-Ja, ja, ¿lo arreglas? -Amy lo golpeó-, ja, ja, ja, okey, okey. Por cierto, ¿no te molesta tenerlo hasta la cintura? Tú acostumbrabas tenerlo siempre arriba de los hombros.

-Mmm... Pues sí es molesto, pero no me retractaré a mantenerlo así, pienso que se ve lindo.

-¡Vamos, chicos, los estoy dejando atrás!

-A todo esto... ¿Cuándo empezaste a reír?

-Es un secreto.

-¡Ey! Eso es injusto.

-¡Oye, cabeza de marihuana, vayamos por un helado!

-¡No me llames así, negro!

Ambos comenzaron a ponerse apodos burlistas hacía su apariencia y color, lo que causó que Amy riera a carcajadas. Se alegraron de verla reír y fueron por un helado.

Comenzaba a anochecer, por lo que cada quien se fue por su lado.

-¿Estás segura de saber que hacer?

-¿Sabes cuáles son sus talones de Aquiles?

-Amm... Pues de Sally sólo conocía su pequeño crush con Sonic. De las otras dos, no sé.

-¡Exacto! María tiene dos, uno es su hermoso cabello, el otro es una persona. Fiona y Bunny realmente no hicieron nada malo, y no podría yo sola contra Scourge, así que las dejaré pasar.

-¿Qué harás, exactamente?

-Ah, ya lo verás, ya lo verás.

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