[COMPLETADA]
El es un hombre solitario a causa de sus traumas y malos tratos, en busca de una mujer que esté a su lado, a pesar de los secretos.
Los viejos amores y las deudas serán clave en esta historia.
Siempre obtiene lo que quiere, o al menos...
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ARADIA:
🔞
Despierto, William está a mi lado, cuando lo veo y siento ese cosquilleo en mi vientre, pienso que es el ser más bello del mundo, amo la ternura que emana de sus ojos cuando me mira.
Espero a que despierte y me vea con esos hermosos ojos azules que me llenan de amor.
Siento el calor que brota de su cuerpo cuando se acuesta a mi lado, no puedo evitar pensar, que todos los demonios en mi cabeza están complacidos.
Casi por instinto comienzo a tocarme.
Se que esta a mi lado y puedo despertarlo, pero esta vez prefiero hacerlo sola.
—Se lo que haces — dice bajito
—¿Que hago?— quito la mano de mi intimidad
—Te masturbas mientras me ves dormir — abre los ojos — ¿Acaso te dejo con ganas?
Se acomoda encima de mi
—No — niego muchas veces
—¿Entonces? — se abre camino entre mis piernas
—Es que verte dormir me excita — digo casi en un susurro
—¿Que mas te excita? — comienza a besar mi cuello
—Cuando haces ejercicio, esos sonidos que salen de tu boca — respiro profundo — son parecidos a los que produces cuando me haces tuya
—¿Que mas? — baja sus besos hacia mis pechos
—Cuando tu cuerpo está sudado por el ejercicio — digo con la poca cordura que me queda —cuando te quitas la corbata con frustración...
—Dime más... —sigue prendido de mi piel
—Siempre me excitas — confieso
—Lo se — sonrie — ¿Quieres que te folle?
—Si — digo rápidamente
Mis deseos están secuestrados en su cuerpo desnudo, amo como besa mi cuello y susurra unos ligeros gemidos.
Amo como muerde mis labios y calienta mi alma con caricias.
—Lo que ordene, mi princesa — dice triunfal
De un momento a otro se hunde en mi, sin querer entierro mis uñas en sus brazos, bombea duro, dentro y fuera de mi. Hace círculos con su cadera, eso hace que pueda tocar aún mas ese punto en mi interior que me hace revolverme de placer.
