Cap. 90 - Venganza

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WILLIAM:

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WILLIAM:

Pensé que al poner mis términos en el régimen de visitas, tendría cerca a Aradia. Pero fue más inteligente que yo, es una nana la que siempre está presente.

Han pasado seis meses, no la he visto un solo día, ni en el cumpleaños de Alexander. Hoy me he quedado más tiempo para así tener una oportunidad.

Estoy en el cuarto de mi hijo, duerme profundamente, oigo ruido abajo, quizá llegó. Bajo con cautela, cuando veo que Douglas y Aradia se besan en el umbral de la puerta, todo se me cae encima.

Perdon por interrumpir — carraspeo — estaba por irme

Me abro paso entre ellos

No te preocupes, no hay nada que me separe de mi prometida — Douglas dice eso a propósito

¿Prometida? Vaya que las cosas cambian muy rápido — me forcé por sonreír — Espero mi invitación a la boda

Ni lo sueñes — casi me grita

Aradia no dice nada, solo me mira. Se que aún en el fondo de su corazón todavía me ama, tanto como yo a ella.

Me encargare de que tengan el mejor regalo de bodas — me di la vuelta

Subí a la camioneta, quería alejarme de aquí.

Llévame al departamento de Layla — ordené

Unos veinte minutos después estaba llegando, subí y toqué la puerta.

En cuanto me vio, me abrazó.

¿Ya lo sabes? — cuestionó

Me acabo de enterar — entré directo a tomar una botella.

La invitación me llegó hace unos días — me decía

¿Cuándo se casará? — cuestioné

En un par de semanas — me informó

Necesito más información — voltee a verla

Déjala ya, ahora está tranquila. Douglas la hace feliz, mañana tiene un desfile... volverá a las pasarelas

Es mía ¿Porque nadie puede entender eso? — grité

La perdiste, nunca debió ser tuya... eso estaba mal — se acercó a mi

No puedo vivir sin ella, creí que podía, pero no es así — mis ojos se llenaban de lágrimas — he sido un imbécil por manipularla y maltratarla, pero la amo

Lo sé — me abrazó

Estuvimos platicando un largo rato, no quiso decirme ningún detalle, pero tengo los medios para enterarme. Salí de su departamento y llamé a la estupida de mi secretaria.

Viviendo con el enemigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora