Peligrosa Venganza ( 8° SAP)

Capítulo 15.

Donovan.

¿Qué demonios hice?

Mi cabeza sentía que iba a estallar en cualquier momento y por culpa de eso es que no medí las consecuencias de mis actos. Solo se que me abrumaron esas imágenes, muchas donde ella siempre sonreía, Emilia siempre me dijo que tuve algo con ella, pero siento que fue algo más. No eramos simples amantes, esas imágenes decían lo contrario y esa intensa incertidumbre que me dejó nublado de mi juicio porque sin importar que estaba arriesgando mi vida vine a su mansión a pedirles explicaciones.

Me olvidé que Dominico estaba a mi cuidado.

Me olvidé de lo peligroso que es estar en este lugar.

Definitivamente mi cabeza esta frita, porque de forma inconsciente arruine todos mis planes y ahora estaba encerrado en una celda esperando que ella se digne a venir. Todavía su mordida duele, pero ese beso trajo más imágenes que necesitan explicación, de las cuales seguro no tendré.

— Maldita sea — mascullo.

¿Cómo fui capaz de meterme en la boca del lobo?

La idea es que debía acabar con ellos, no viceversa y ahora tengo que buscar la forma de escapar. Un ruido se escucha, como si abren la puerta y no veo nada  hasta que observo como el pequeño niño rubio llega a mí mirándome de forma intrigante.

— No deberías estar aquí — hablo.

— ¿Dónde está tu hijo? — pregunta con su ceño fruncido.

Su gesto me hace hacer lo mismo. — No tengo hijos — afirmo.

— ¿Y el niño del parque? — cuestiona.

— No es mi hijo, sino mi sobrino — contesto.

La verdad no se que hago hablando con un niño.

— ¿Cuántos años tienes? — pregunto.

— Tres años, señor malo — responde.

— Donovan es mi nombre ....

— Valentino Sokolov Ferrara — se presenta estirando su pequeña manito en mi dirección entre las rejas de la celda.

Tomo su mano procesando la información en su nombre y rápidamente deduzco el porque tienen ocultado a este niño. Delante mío tengo al mismísimo heredero de La Bratva, porque es él hijo del ruso ese con ella.

— ¿Quiénes son tus papás?

Solo quiero confirmar lo que ya se.

— Mi mami se llama Jade y mi papi Ignati. Es el mejor papi, nunca me olvidó en el parque como tu hiciste con tu hijo — declara con cierto reproche en su voz.

Jade Ferrara e Ignati Sokolov, son sus padres. Este niño es una mina de poder, no solo por ser el futuro lider de La Bratva sino porque entra en el linaje de sucesión para ser el próximo Il capo de tutti capi.

— No es mi hijo, es mi sobrino — le aclaro.

— ¿Qué es un sobrino?

Suspiro, no puedo responder todas sus preguntas.

— Mejor ve a dormir, luego le preguntas a tus padres que significa la palabra sobrino ...

— Eres mal papi — se queja.

Vuelve a fruncir el ceño.

— Seguro tu fabuloso papi puede responder tus preguntas, yo no tengo paciencia para niños como tú — determino molesto.

Quiero salir de aquí y hablar con un niño de tres años me quita tiempo, aunque pensándolo mejor sería clave usarlo para salir.

— Hombre malo — lo escucho decir.