Donovan.
Si pensé que los Ferrara eran complicados, no me imaginaba que los Sokolov fueran de la misma manera, al punto estar preocupados por la casi muerte de su lider a ahora contentos por la llegada de un nuevo miembro a la familia. Una tremenda versatilidad impresionante que en este preciso momento me tenía en una clínica importante de Moscú esperando que mi hijo y Amira terminen de conocer a su hermano menor.
Mil veces prefiero esto a tener que andar a lado de la insoportable consejera de la N'drangheta. Es demasiado intensa y metiche en mis asuntos, todavia seguía siendo su sombra porque no teníamos ratros de su ex esposo por ende no podía salir de esta condena en donde Jade había impuesto mi permanencia hasta que se solucione el problema.
Necesito encontrar a ese sujeto para terminar con mi mayor problema.
— Para que después no digas que no soy una buena amiga — acota Ellie al darme un café.
— Que suerte la mía — ironizo.
— Eres malo de verdad — se queja.
Ellie mira detrás mío y por eso giro para encontrarme con Clara mirandonos con atención.
— ¿Qué demonios hace aquí? — mascullo.
— ¿La conoces?
— Si, trabaja con Jade — me limito a contestar molesto.
Odio que invada cada espacio mío.
— No podía quedarme más en el vehículo — dice Clara al acercarse a donde me encontraba con Ellie.
— Mujer insoportable — siseo.
— Hola. Soy Ellie, la mejor amiga de Donovan — se presenta ella como si nada.
— Clara Bustamante, amiga de Donovan...
— Tú no eres mi amiga — la detengo.
— Vaya — murmura Ellie. — ¿Desde cuándo tienes otra amiga? — inquiere en forma de reclamo y acompañada de una sonrisa divertida.
— No empieces — siseo al conocerla bien.
La puerta de la habitación se abre y es Ignati que el que sale topándose con nosotros.
— Menos mal que sigues aquí — dice en mi dirección.
— ¿Sucede algo? — consulto frunciendo mi ceño.
— Bienvenida a Moscú, Clara — saluda a la consejera.
— Muchas gracias, señor Sokolov. Felicitaciones por la llegada de su hijo — habla estrechando sus manos.
— Gracias — se limita a contestar y me hace señas para que nos alejemos ambos de ellas.
— Odio cuando te pones de esta forma — gruño.
— ¿Cómo sería eso?
— Misterioso — declaro rodando mis ojos.
— Creo que tienes muy poca paciencia — se burla.
— Deja de dar vueltas, Sokolov.
— Quiero que seas el padrino de Leonid — sentencia provocando mi sorpresa.
— ¿Por qué? — cuestiono sin entender.
— ¿Por qué de qué?
— ¿Por qué quieres que sea el padrino de tu hijo? — pregunto sin entenderlo.
— Somos amigos. Confío en tí y se que mi hijo tendrá un gran padrino en su vida. Seguro lo que diga que no, tú se lo darás y dejaras que haga, pero bajo tu supervision — comenta.
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Peligrosa Venganza ( 8° SAP)
RomansaOctavo libro de la Saga Atracciones Peligrosas. Jade Ferrara no dudo en levantar su revolver y matar al que consideraba el amor de su vida. Quiso ser ella la que terminará con él antes que su padre lo haga, porque los enemigos no pueden ser tu debil...