Capítulo 8.

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Jade.

Tenía la intuición que Iggy me escondía algo, lo conozco también y que no pueda verme a la cara mientras hablamos dejaba claro que algo estaba ocultando. También se que está dolido por las palabras que me dijo Ellie esa tarde que estuvo por la casa de Inzie, se que no debí actuar de esa forma con ella, pero tampoco pude controlar lo que sentía al verla gozar por mi perdida. Ninguna mujer debería alegrarse por la pérdida de otra mujer, nunca nadie sabe si puede pasarte lo mismo y estar en mis zapatos no se lo deseo a nadie.

Se que no tuve ni segundos de procesar todo lo sucedido, pero igual me hubiera encantado ser madre de nuevo y vivir ese momento acompañada de Ignati. Él es un gran padre, lo es con Valentino y lo será si en el futuro llegamos a tener más hijos juntos.

No veo mi futuro sin él a mi lado.

— ¿Cómo estás? — escucho que me pregunta mi hermanastro.

— Mejor, en unos días dejaré tu casa si es eso lo que te preocupa — contesto al sentarme en el jardín de su hogar junto con Kerr.

— No te estoy corriendo, Jade, sabes muy bien que eres bienvenida a esta casa y las demás. Además no pienso dejarte ir hasta que estes en condiciones para viajar — determina.

Sonrío a sus palabras. Mi relación con Sasha en estos años había cambiado demasiado, ya podía soportarme un poco y podía asegurar que me quiere cada día un poquito más.

— ¿Sabes lo que Ignati me está ocultando? — le pregunto.

Lo veo cambiar su cara y ponerse más serio.

— Ignati te dirá, no es mi deber hacerlo — dice y se marcha del jardín dejándome más certera a la idea que algo me estaban ocultando.

¿Qué será?

Recuperarme significaba estar un poco de vacaciones, no estoy trabajando ni en nada relacionado a la línea de mis perfumes mucho menos pensado en la mafia. Se que cuando llegué a Calabria todo será completamente diferente, porque así como pisé mi ciudad natal es inminente la sucesión del legado de mi tía a mis manos.
Toda mi vida me había preparado para ese momento, solo que ahora me preocupa muchas cosas, sobre todo la llegada de Valentino a la vida de todos los Ferrara y a la mafia.

Ser madre es difícil, sobre todo cuando somos parte de la mafia.

Mi celular empezó a sonar, sonrío al ver el número de Lucia, la hermanastra de Iggy que estaba haciendo una videollamada y eso significaba una sola cosa, Valentino.

— ¡Ciao amore mío! — lo saludo al ver su precioso rostro a través de la pantalla.

— ¡Mami! — chilla completamente feliz.

Por un buen rato me la paso hablando con el amor de mi vida, él me cuenta todo lo que estuvo haciendo estos días e incluso me dice que habló con su padre porque se sentía triste y que él le había prometido que pronto estaríamos de vuelta a su lado, además de decirle que lo llevaríamos a conocer a sus abuelos, haciendo referencia a mi padre y mi madrastra.

No puedo seguir ocultando más a Valentino de su familia.

Entrando la tarde, Ignati vuelve a la casa y me encontra en el jardín junto a Kerr disfrutando un poco del sol. Solo me sorprende ver su ropa sucia como estaba, más viniendo de él que tiene un toc con el tema de siempre estar impoluto.

— ¿A donde estuviste? — consulto. — parece que estuviste en la tierra — acoto bromeando.

— Intentaron a atacar a Ellie.

Lo miro a los ojos. — Supongo que la salvaste — afirmo conociendo a mi prometido y su debilidad por esa mujer.

— Siempre la voy a proteger — declara.

Peligrosa Venganza ( 8° SAP)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora