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Unas semanas después.

Me he mantenido completamente firme con mi posición respecto a los hombres y las relaciones en las últimas semanas, no quiero saber de las relaciones, no quiero saber de los hombres, en especial de Diego o Damian.

Esté último, ni siquiera me ha vuelto a contactar ni nada parecido, he sabido de él, se está de nuevo con su amada Amelia, su gran y costoso amor. Diego, por otro lado, si ha insistido en hablar conmigo, ha insistido bastante hasta el punto de volverse un riesgo para mi seguridad o la de la familia.

Porque tal parece que hubo muchas cosas que no supe en realidad de Diego, cómo por ejemplo lo que paso con su prometida después de que su compromiso terminara, él me había contado que ella lo había dejado porque ella estaba enamorada de alguien más o algo por el estilo.

Lo que no me dijo es que después de eso, ella fue encontrada brutalmente golpeada y desfigurada, además de que, el supuesto hombre, casado y con bebe recién nacido, también fue golpeado brutalmente, ambos lo acusaron de lo que paso, más nunca tuvieron pruebas suficientes para inculparlo.

─¿Aaa.... Abuelo porque no lo dijiste antes? ─ le preguntó incrédula cuando él me contó lo que sabía de él.

─Me habías pedido no interferir más en tus relaciones, además no te miraba verdadero interés en él, además de que siempre ha habido alguien listo para disparar si él no te trataba cómo se debe ─ dijo él con tranquilidad.

Además de eso, no solo el abuelo lo sabía mi papá también y no dijo nada, pero cuando lo hicieron hubieron muchos cambios, para empezar Sasha cancelo su contrato con ellos, lo cancelo completamente.

Ella, en sus palabras, dijo que no tenía nada que ver con un golpeador de mujeres, sé que Diego intento hablar con ella al respecto, sus padres también, diciendo que las falsas acusaciones que había en relación a su hijo no tenían porque dar por terminado su negocio.

Eso por supuesto no convenció a mi cuñada, mi hermano por supuesto se encargó de que mi cuñada tuviera un proveedor lo más pronto posible, ya que no se podía quedar sin uno.

Es claro que esta familia, no puede tener mucha paz por mucho tiempo.

A pesar de todo, he tratado lo más posible de no pensar en nada de eso y me enfoco en mi trabajo y en el bautizo de mis ahijadas que será esté fin de semana.

Junto con Paula hemos estado organizando toda la fiesta, fiesta que se hará en la hacienda de Damian, es él será el padrino de las niñas, no me sorprende para nada que la fiesta sea allá, en todo caso, lo único que me interesa es pasar un buen rato con mi amiga y la que ahora serán mis ahijadas nada más.

─Hay alguien que quiero presentarte princesa ─ me dice el abuelo, vine a casa de mis padres porque me sentía sola en mi departamento y bine a pasar un rato aquí y mi abuelo me ha salido con esto.

─Abuelo, no estoy interesada ─ le digo tomando de mi limonada, es raro que mis sobrinos no estén corriendo por el lugar de un lado a otro.

─Conocelo primero y después dime si te agrada o no, sabes bien que tus hermanos me decían lo mismo y tuve razón de sus esposas ─ dice él con suficiencia.

─¿Por qué meos no te interesas en buscarle una esposa a Cedrick ─ le propongo.

─No creas que no lo hago, lo que pasa que la búsqueda de una esposa para Cedrick es más complicada ─ dice él.

─Eres todo un caso abuelo─ digo negando.

─Conócelo al menos y si después de eso dices que no, pues no y listo ─ dice él.

Cassia Litman Herederos Litman 4Donde viven las historias. Descúbrelo ahora