Historias Mal Contadas

Bailar bajo la luna

— ¿Está hermosa cierto? — los ojos dorados en su delante brillaban opacando el cielo estrellado — Lan Zhan — el nombrado lo miro — Lo siento por darme cuenta tan tarde — el templo en su atrás o la cuerda en su cuello eran lo secundario — Tengo que decírtelo — miro al de ropas amarillas en su atrás.

— Se lo dirás más tarde Joven Wei — tenía que terminar rápido con todo esto e irse del lugar no se quedaría a ver la caída de su secta.

— Es muy importante, no puede esperar — esto no tendría un buen final lo sabía, después de todo estaba atrapado con una cuerda en su cuello.

— Entonces puedes decirlo ahora — el podía salir de esto, pero no dejaría que estaba entre sus manos lo haga.

— No es necesario — hablo antes que lo haga Wei WuXian — Nadie necesita escucharlo — estaba siendo egoísta lo sabía, su hermano amaba al Wei, pero como podía dejar que lo acepte sin nada después de ver sufrir a su hermano ¿Cómo podía hacerlo? — Es muy tarde — el sabía que saldría de esa boca, su energía espiritual estaba apunto de ser recuperada — Las 33 cicatrices en la espalda de WangJi no desaparecerán — la mirada de todos estaba sobre él.

— Hermano — no podía creer que su hermano hablara así después de todo lo que sabe, después de todo lo que han vivido.

— ¿Porque? — podía leer la mirada de su hermano era "decepción" — Eres demasiado bueno, amable o tonto — no sabía si era pregunta — Le diste ayuda, lo defendiste hasta el final ¿Cómo te pago él? Te desprecio antes y cuando volvió solo vio tus sentimientos como un juego — su hermano solo giro a ver al otro — Pero aún así lo miras con tanto amor, yo soy tu hermano deberías hacerme caso y apoyarme — saco su espada.

— Pero Lan Huan — tenía un presentimiento de lo que pasaría y en cierta forma lo beneficiaba — Fuiste el primero en darle la espalda a tu hermano por darme la razón, alguien que conocías de meses a tu hermano de toda la vida — la espada tambalea — WangJi siempre te dijo la verdad, pero fue tu decisión no creerle hasta el punto de liderar también el asedio — ahora él sorprendido era el Lan menor — ¿No lo sabías? ¿No te lo dijo? Tu hermano también quería muerto a Wei WuXian solo porque le dije que te alejaría de él — la espada apuntaba hacia ellos.

— Lo hice por mi hermano — estaba decidido a acabar con esto ahora — Nunca debió conocerte — el de negro lo miraba molesto.

— Permitiste que castigarán a tu hermano ¿Lo merecía? — la mirada de Lan XiChen era de desesperación — Dejaste que lo marcaran de por vida, dejaste que lo aislarán, su propia familia le dió la espalda no crees que al que no debería perdonar es a ti — estaba con una sonrisa en el rostro.

— ¡Yo era el culpable ¿Porque Permitiste que lastimaran a Lan Zhan?! — claro que recuerda a ver visto esas cicatrices, la cueva era un poco borrosa, pero por algún motivo sabía que estaba ahí — Yo cometí errores lo sé, pero no le di la espalda siempre creí en él a pesar de todo porque el siempre justo y recto deberías haberlo sabido mejor que yo, eres su hermano — estaba molesto, podía sentir la energía resentida fluyendo lastima que todavía era débil.

— ¡Cállate! — no era muy tarde para arreglar las lo sabía, pero sentía que si Wei WuXian estaba no podría arreglarlo nunca — No debiste conocerlo, tu simplemente deberías morir eres el único error que cometió mi hermano — sin pensarlo dos veces se lanzó a atacar al nigromante cerro por un breve segundo sus ojos, solo fue segundo.

— ¡LAN ZHAN! — siempre le había gustado el color rojo, resaltaba mucho ante todo, pero en este momento ver aquel color pintando las tunicas blancas era horrible la mano del Jin había tambaleado dándole la oportunidad de atrapar al Lan antes que choque con el suelo — Eso era para mí ¿Porque lo hiciste? — no había energía espiritual, estaba bloqueado y tardaría.