Capitulo 14 - Un buen amigo

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Susana

Sentía un extraño hormiguero en la boca junto con un gusto amargo , lleve mi mano a mi cabeza y sentí un pequeño dolor en el brazo que me obligo a abrir mis ojos con pesades. 

Me encontré con una habitación completamente blanca, al mirar mi brazo pude ver la aguja clavada en mi piel. Realmente había terminado en el hospital, era lo que me faltaba . Intente incorporarme y note la mano sujetar mi hombro para volverme a acostarme con suavidad. Mire al hombre frente a mí.

-Bienvenida de vuelta a entre los vivos -Casi sonrió pero de verdad no pude darle otra cosa que no fuera una mueca-

-Hum, sospecho por tu bata blanca que estoy en el hospital, una lástima que nos encontremos así, Julio-

- Grande fue mi sorpresa cuando me enteré que la empresaria Montesdeoca había sido ingresada de urgencia en mi hospital-

-Y hace cuanto que estoy aquí y ... ¿Por qué? -

-Dímelo tu ¿Desde cuándo sufres ataques de ansiedad? Llevas aquí dos horas en estado de inconciencia-

- ¿Me preguntas como médico o amigo ?-

- Soy ambas cosas -Suspire sabía que me encontraba en sus terrenos y no iba a poder deshacerme ni del médico, ni del amigo- Se por las noticias que no estas pasando un buen momento, pero no es sano encerrarse en uno mismo-   

-La verdad que he estado bajo mucha presión estas últimas horas, pero de ninguna manera pensé que podía perjudicar mi salud en el proceso, nunca me había pasado algo como esto- Él se sentó a mi lado y  tomo mi mano- 

- Susana, hay cosas que están fuera de nuestro alcance y no podemos excedernos a nosotros mismos por esos motivos, así que te voy a pedir que la próxima vez que te sientas superado por los acontecimientos recurras a mi o a las chicas para que te demos apoyo o simplemente te llevemos a emborracharte a un bar de mala muerte - Carcajee por lo último -

-Lo tendré en cuenta en especial lo del bar de mala muerte - Él sonrió ampliamente-

-Eso es bueno- Me resolvió el cabello como una cría- Las chicas se enteraron por la prensa y se volvieron locas- Suspire - No te preocupes les dije que estabas bien y que no te molestaran -

-Te lo agradezco - Extendí mis brazos para que me abrazara y rápidamente nos encerramos en un abrazo de hermandad - Realmente Julio siempre fue un buen amigo tanto para mí como para las chicas-

La puerta fue abierta en ese momento y los dos nos separamos para ver a la persona que  entraba a la habitación. Mi asistente quedo congelada en el marco de la puerta mientras un color rojo se apoderaba de su rostro-

-Yo ... lo siento - Por dios era solo una abrazo pero por su actitud parecía haberme encontrado follando con un médico. -

-No tienes por qué disculparte, entra ya - Ella dudo un segundo y luego entro- Julio, ella es Anabela mi asistente. Anabela él es julio mi mejor amigo -

Después de presentarlos Julio se retiró anunciando que una enfermera vendría a sacarme el gotero y en una hora más podía irme a casa. Por supuesto que me prohibió volver a la empresa por hoy, solo podría descansar por el momento. 

Anabela se encargó de todo y poco después la mande a su  casa  con la excusa de que ella se encargara de averiguar quién había mandado las flores y la corona funeraria. La verdad era que yo tenía planes que realizar y lo primero era garantizar mi propia seguridad.  

Lo primero fue conectarme con una empresa de seguridad, quería cámaras de seguridad en todo mi apartamento. Mientras tanto me concentré en llamar gente para acondicionar uno de los cuartos como una oficina y me puse manos a la obra apenas mi asistente cruzo la puerta.   

Me enviaron un joven muy agradable que en menos de dos horas me había instalado un gran equipo de seguridad, las cámaras no se veían y grababan veinticuatro horas, se atibaban con el más mínimo movimiento.   

El mismo joven me enseño como ver lo grabado en mi computadora y teléfono. Y aunque no tenía mucha idea de estas nuevas tecnología se me daba muy bien el manejo, también me recomendó no compartir la clave de aseso y no comentar ni siquiera que las cámaras estaban allí.

 Luego llame a mi abuela para ponerla al día de todo lo sucedido tanto ella como yo sospechábamos que los de las flores no era una simple broma de mal gusto. Ella quería tomar el primer avión para N.Y sin titubear pero después de un largo rato logre que entrara en razon, además necesitaba que alguien vigilada a mi madre ya que ambas estaban en la misma ciudad. No necesita otro escándalo por el momento.  

Encendí la tele mientras el equipo de gente se encargaba de acomodar los muebles en la oficina, no era nada fuera de lo normal un escritorio mesa, sillón, biblioteca y silla. Lo primero que me llamo la atención fue los encabezados de noticias "La familia Viera paga una fortuna para sacar al hijo prodigo" Aparentemente Fabian salió de la cárcel gracias a una fianza millonaria mientras se preparaba el juicio.

Para mi padre eso no era posible ya que sobre él, aparte de los cargos de prostitución infantil,  porque se comprobó que una de las chicas del video solo poseía dieciséis años, también tenía de extorción y acoso sexual a las empleadas de la empresa. Por lo tanto se le negó rotundamente la fianza. 

Decidí llamarlo, aun quería recuperar el veinte por ciento que el poseía de la empresa, solo que no sabía cómo encararlo y estuve con el teléfono en la mano por un largo tiempo para al final desistir  de hacerlo. Y se me ocurriría algo.   

Los trabajadores se despidieron uno por uno al caer el atardecer y solo dos minutos después la puerta de la entrada  fue tocada, confiada que sería alguno de ellos abrí con una cálida sonrisa que rápidamente se convirtió en una tensa cuando vi al hombre frente a mí. 

Fabian se encontraba desalineado, con el rostro triste frente a mí. Yo solo pude mirarlo sin decir nada y luego me corri de la puerta para dejarlo pasar. El solo asintió como agradeciendo y entro hacia la sala de estar.  

-¿Quieres algo de tomar? - Podía preguntarle como estaba o tal vez solo abrazarlo por los viejos tiempos pero solo se me ocurrió decirle eso en el momento- 

- No gracias, solo quería verte, es que no fuiste a verme- Las últimas palabras las susurro - Se que no he sido el mejor novio pero, yo te quiero- No podía recordar un momento más incómodo en mi vida, a pesar de ser la primera vez en dos años que este hombre me decía que me quería -  

- Yo ... bueno tú sabes -El timbre de la puerta volvió a sonar y agradecí a todos los santos por ello-

Prepárate para mi venganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora