La hija de Volkov. TERMINADA

33.

Al día siguiente estaban todos en el despacho de Horacio, Luna estaba sentada en la silla de Horacio jugando con su consola mientras que los mayores estaban en el centro de la sala charlando sobre el tema, todos estaban vestidos con sus respectivos trajes, tenían la cara al descubierto, todos estaban hablando menos Horacio que estaba distraído en sus pensamientos, después suspira para mirar por la ventana, estaba nervioso, se había alejado dos meses de sus pollitos, se cruza de brazos mientras veía el parking que justamente entraba el coche de Alana, se da la vuelta para avisar a los demás.

-Ya están aquí, id a la sala de reuniones y esperarme allí, iré con Luna en unos minutos.

-¿A la grande o la que esta aquí? 

-A la grande, la que esta aquí al lado he decidido ponerla como área de descanso.

-Vale, Gustabo y yo nos adelantamos.

Horacio ve como su hermano y Conway se tapa la cara para salir del despacho, Horacio se acaricia el brazo mientras suspira, Volkov se acerca a el para darle un corto beso y acariciarle la cara.

-Todo va a salir bien, somos una familia.

-Lo se, pero la sensación de angustia no se va, Viktor, quiero a Luna más de lo que la quisieron sus padres biológicos y soy capaz de llevarme por delante a cualquiera.

-Y todos te vamos ayudar, me voy a la reunión, relájate y ahora nos vemos ¿Vale?

-Vale.

Volkov le vuelve a dar un beso pero esta vez más intenso que el anterior, después se pone la mascara mientras le guiña un ojo a su novio y sale del despacho para dar a Horacio sonrojado y a Luna contenta pues había presenciado como sus nuevos papas se mostraban cariño, se levanta de aquella silla para acercarse a Horacio y le da la mano, este nota a la niña, se pone de rodillas en el suelo para mirar con una sonrisa en los labios.

-¿Estás aburrida? 

-No, me gusta este sitio, de mayor quiero ser como tu.

-¿Quieres ser policía?

-Agente federal como tu y papi V.

Horacio sonríe mientras le da un abrazo a su hija, le había dicho que en el trabajo no podía llamarles por su nombre que allí solo usaban la inicial del nombre porque eran agentes secretos y Luna con tan solo nueve años lo entendió al instante, pero que esperábamos de una niña que ha visto de todo, lo único que asustaba a esa niña era quedarse sola en este mundo pero sabia que con Horacio y si familia le había tocado la lotería.

-¿Quieres conocer a tu hermana?

-Sii, quiero conocer a Elena.

-Vale, pero cuando la veas no vayas hasta que no diga quien eres ¿Vale?

-Yo hago caso a todo lo que me digas, papi H.

-Perfecto.

Horacio se levanta del suelo, se limpia los pantalones, se pone la mascara de calavera, se iba a poner la gorra pero se la puso a Luna quien ríe al ver que le queda grande pero aun así no se la quita, se cogen de la mano para ir a la gran sala de reuniones.

Mientras en esa sala de reuniones, estaban todos de pie hablando de cosas sin sentido, Conway y Gustabo les había dicho que se iban a ir unos días con Danielle pero que había surgido otro caso y hasta que no se solucionara no se irían, Volkov ve que Horacio estaba asomado en la puerta le hace una seña que el entendió, se aclara la garganta y ve como la puerta se vuelve a cerrar con Horacio fuera, todavía no iba a pasar.

-Bien, lastimosamente las vacaciones se terminaron, hay un nuevo caso y no quiero que ni la LSPD ni la LSSD entren en esto. Es un caso federal y confidencial ¿De acuerdo?