Cami
Verla después de tanto tiempo fue un golpe que no estaba preparada para recibir.
Se me vinieron a la mente los miles de momentos que tuvimos cuando solíamos ser mejores amigas. Todos esos años que habíamos pasado juntas, siendo inseparables se habían desvanecido en cuestión de segundos, porque eso fue lo que necesite para darme cuenta de la verdadera persona que era.
Me quede helada mirando como socorría a la niña sacándola de la pista y sentándola en una banca cercana, atendiendo su herida, la pequeña sacudía su cabeza restándole importancia pero Olivia recorrió la pista con la mirada y cuando sus ojos se encontraron con los míos, sentí como se me comprimía el pecho.
—¡Aquí estas! —Mi hermana apareció a mi lado entrelazando su brazo con el mío. —¡Lo logre, ya puedo patinar yo sola y todo gracias a mi pequeño bebe!
Le lanzó una mirada a Johnny que estaba a mi lado sonriendo.
—Vamos, alcancemos a mama y a Oscar. —tiro de mi llevándome por la pista.
Perdí el contacto con Olivia y una parte de mi respiró tranquilamente por ello, no tenía idea de lo mucho que se había acelerado mi corazón hasta que escuché los latidos en mis orejas, fuertes y latentes.
Era claro que verla había sacudido mis emociones por completo, sobre todo porque sabía que ella aún mantenía contacto con Josh y solo le bastaba una visita para que el supiera que estaba aquí.
—Oh no. —dije sintiendo nauseas.
—¿Cami? —mi hermana se detuvo, preocupada y tuve que apartarme para patinar hacia la orilla y llegar al bote de basura más cercano.
Escuche un par de quejas de las personas que se encontraban alrededor pero no me importó, mi estómago no cedía y continuaba regresando el desayuno.
—¡Cami!
Carolina me ayudó a recoger mi cabello para no estropearlo con vomito, no tardó mucho Johnny en unirse y aconsejarme que me quitara los patines para sentarme un momento.
Una vez que terminé me sostuve con ambas manos en el bote de basura tratando de regularizar mi respiración.
—Mierda, esto no se ve bien. —dijo ella mirándome. —¿No estarás embarazada?
Levante mi cabeza de golpe y dije que no.
—Tengo el DIU.
—Si, pero no es cien por ciento efectivo. Ningún anticonceptivo lo es y verte así solo me está poniendo en duda.
—No estoy embarazada. —dije limpiándome la boca con la mano.
No podía estarlo, hace poco había hablado del tema con Daniel y aunque nos emocionaba la idea de tener un pequeño Wilson no estábamos listos.
—Tengo que ir al baño. —me senté para quitarme los patines, Johnny me ayudó con ellos. —Gracias, ahora vuelvo.
Me puse rápidamente los zapatos y camine entre la gente hasta llegar a los baños más cercanos, fui directamente al lavamanos y me enjuague la boca, quite todo rastro de vomito y luego me moje el rostro para despabilar los síntomas.
No estaba embarazada, no podía estarlo, no ahora cuando estoy volviendo a correr peligro.
—Vaya, vaya. —susurró una voz a mi espalda, se me erizó el vello de la nuca. —Pero mira quien ha decidido aparecer por estos humildes rumbos.
Me enderece sintiendo un nudo en mi garganta, tenía el espejo frente a mí así que podía verla a un par de metros de mi espalda. Tenía el cabello castaño más largo, casi rozando su cadera y un flequillo que le llegaba a las cejas, se veía más delgada y con unas curvas fenomenales que pude notar aun teniendo el abrigo negro puesto.
ESTÁS LEYENDO
¡Siempre Nuestro! (+18)
Teen Fiction》Tercera Temporada de ¡Eres tú! 《 ¿Qué haces cuando tienes que dejar a la persona que amas por haberte roto el corazón? Seguir adelante. Es lo que se repite Cami una y otra vez cada que piensa en él, ahora ha regresado a Denver y ha continuado con s...