La Nueva Na'vi | Neteyam Sully

CAPITULO 77: "ESTAMOS AQUÍ PARA TI"

Aleia entro a su carpa encontrándose con los tres jóvenes Sully, los cuales había regresado a ella, estos estaban teniendo una conversación algo cómica pues reían fuertemente. La joven entro e ignoro la situación, se sentó en su cama y miro fijamente su pulsera.

-¡Aleia! ¿Cómo te fue? - pregunto alegre Lo'ak, la chica la devolvió una mirada algo enojada haciendo que el joven se sintiera un poco mal.

-¿Cómo crees que me fue?- pregunto algo sarcástica para luego tirarse sobre la cama y suspirar fuertemente. Los tres hermanos se miraron entre ellos, se acercaron a ella y vieron como sus brazos pasaban sobre su rostro, cubriéndolo por completo.

-Aleia...no te enojes con nosotros por algo que no hicimos- dijo suavemente Kiri haciendo que la chica descubra su cara para mirarla, suspiro levemente antes de volver a sentarse para comenzar a hablar.

-Lo siento- fue lo único que dijo para luego bajar su mirada y guardar silencio unos segundos- es que han pasado muchas cosas en tan poco tiempo y tengo tantas emociones juntas

-Lo entendemos y créenos que estamos aquí para ti- hablo Neteyam mientras colocaba un mano en su hombro haciendo que la joven suba su mirada hacia el

-Gracias- respondió fingiendo una sonrisa a comparación de él que traía una sonrisa completamente sincera. El joven lo único que quería era hacerla sentir bien a pesar de todas las cosas que estaba viviendo en ese instante, no podía pensar en todo lo que podría estar pasando por su mente ahora mismo ni mucho menos en cómo se sentía.

-Vamos...nuestros padres nos están esperando para cenar, ustedes adelántense- dijo el mayor a sus hermanos- nosotros ya los alcanzamos- volteo a mirar a Aleia, los dos jóvenes entendieron a lo que se refería, no dudaron y obedecieron a su hermano dejándolo a solas con la chica- No tengo idea de lo que sientes ni de lo que piensas pero quiero que sepas que estoy aquí para ti si quieres llegar a hablar sobre el tema- dijo para luego besar una de las manos de la joven- o si simplemente quieres compañía, puedo estar aquí contigo en completo silencio

-Lo se Net y te lo agradezco muchísimo- respondió Aleia con una leve sonrisa- pero ahora no quiero hablar, estoy muy enojada y triste para querer tener una conversación sobre todo esto....espero lo entiendas- hablo para luego acariciar una de las mejillas de Neteyam

-Claro que lo entiendo- dijo mientras posaba su mano sobre la mano que acariciaba su rostro- solo quiero que sepas que estoy aquí para cualquiera cosa- Aleia asintió con la cabeza levemente para luego rodear su cuello con sus brazos, el joven respondió a esto abrazándola por la cintura- Te amo y no me gusta verte así...sufriendo

-Creo que ya deberíamos ir a cenar- dijo la joven al separarse de el

-Si tienes razón- respondió el con una amplia sonrisa, contagiando de esta emoción a Aleia. Rápidamente salieron del lugar e ingresaron a la carpa de sus padres en donde toda la familia estaba reunida esperándolos. Aleia se sintió como en la primera vez que comió junto a ellos, se sintió bienvenida e integrada a la familia, pero esta vez había algo diferente, se sentía amada por ellos.

Cuando la cena acabo, los jóvenes volvieron a su hogar para poder dormir, a la joven Mit'kante le costó conciliar el sueño, pero luego de muchos minutos lo logro. A la mañana siguiente todo transcurrió con normalidad, se despertaron para ir a desayunar en familia luego de eso los cuatro jóvenes junto a la pequeña Tuk salieron de la carpa para encontrarse con Tsireya, Roxto y Ao'nung.

-Hola amiga ¿Cómo amaneciste hoy? - pregunto Tsireya al ver a Aleia

-Bien, con otra mentalidad- respondió con una sonrisa- Nos podemos ir, quiero conocer mas sobre mi gente- dijo algo emocionada, los jóvenes Metkayinas irán a ver al clan Mit'kante por órdenes del Olo'eyktan. Aleia quería vivir en carne propia sus culturas y costumbres, quería conocer lo más posibles sobre ellos.

-Pues ya vámonos que la berenjena parlante tiene muchas ganas de ver al clan- dijo Ao'nung para luego acariciar la cabeza de la chica

-¿Enserio? ¿Otro apodo? - pregunto ella cruzándose de brazos mientras reía- escúchame marisco oloroso si te vuelvo a oír otro de tus apodos tontos te juro que...

-¿No te gusto mi lindo apodo?- pregunto mientras colocaba una de sus manos en su corazón fingiendo que le dolía- Y yo que lo pensé con tanto cariño y juraba que te iba a encantar- decía sarcásticamente

-Corre- advirtió Aleia haciendo que el joven la mirara extraño- Voy a golpearte así que mejor ve corriendo ahora- Ao'nung con una sonrisa en su rostro comenzó a correr pues sabia que lo que decía lo iba a cumplir, luego de darle ventaja Aleia comenzó a correr tras él. Los demás se quedaron mirándolos confundidos

-¿Desde cuando estos dos se volvieron....así?- pregunto Kiri mientras se cruzaba de brazos y ladeaba la cabeza

-Pues cuando ella iba a mi casa, se supone que iba a verme a mí pero......se terminó llevándose mejor con mi hermano y ahora son así- dijo Tsireya sonriente- La verdad....Aleia influye de una manera positiva en el

-Bueno...eso es verdad, ya no es el idiota que era antes- comento Lo'ak- de hecho, ahora se lleva bien con el grupo

-Si, nunca había visto a mi hermano tan feliz y eso me gusta- hablo Tsireya mientras comenzaba a caminar junto con los demás

-Si....esta diferente- agrego Neteyam mientras miraba fijamente a los dos jóvenes que aun corrían con grandes sonrisas en su rostro.

-¡Basta! Ya me cansé- rogo Ao'nung empezando a bajar la velocidad- Mis pies fueron hechos para nadar no para correr- De pronto Aleia cambio de forma en un pequeño insecto, voló lo más rápido que pudo para luego tomar su forma original colocándose frente al joven Metkayina, lo que no pensó fue que este seguía corriendo por lo que choco con ella haciendo que ambos cayeran a la arena. Cuando se dieron cuenta comenzaron a reír a carcajadas al igual que el grupo de amigos que había observado todo, Neteyam por su parte sonreía levemente pues había algo ahí que no le agradaba del todo- Me asustaste- dijo Ao'nung entre risas

-Ya deja de llorar y párate- dijo ella colocándose de pie para luego extenderle la mano para ayudarlo a pararse. El joven la acepto, se puso de pie y comenzó a caminar junto con los demás en dirección a las montañas pobladas de árboles lugar donde el nuevo clan se encontraba.