La Nueva Na'vi | Neteyam Sully

CAPITULO 78: "LA REUNIÓN"

El grupo de jóvenes exploraba el lugar donde el clan Mit'kante estaba ubicado, observaban como ejercían sus diferentes labores y construían más carpas. Había pequeños niños corriendo alrededor de ellos, Ao'nung volteo a mirar a Aleia la cual entendió rápidamente lo que quería hacer, sonrió para luego comenzar a correr tras los pequeños al igual que su amigo, los demás solo los miraban felices pues estos jugaban con los infantes como si fueran uno de ellos.

-¡Ayuda!- grito uno de los niños mientras corría con una gran sonrisa en su rostro- ¡Me va a alcanzar!

-Te voy a atrapar- respondió Aleia en tono divertido, los pequeños seguían corriendo hasta que desaparecieron entre el bosque. Ao'nung y Aleia se detuvieron, estaban cansados pues no tenían la misma energía que los menores.

-¿Como pueden correr tanto con esas piernas tan pequeñas?- pregunto Ao'nung junto a ella

-Es lo mismo que me pregunto- respondió ella- Ven vamos con los demás, nos alejamos un poco de ellos y tal vez nos están....-la joven no termino su oración haciendo que su compañero la volteara a ver encontrándose con los ojos de Aleia puestos en una dirección, rápidamente volteo a ver al mismo lugar. Lo que observo fue a Nakoa junto a sus padres quienes la miraban atentos, los adultos la veían de pies a cabeza para luego compartir una mirada de complicidad mientras que su hijo la miraba triste.

-Ven, no perdamos mas tiempo- dijo su amigo para tomarla de la mano y sacarla de ahí, luego de unos cuantos pasos se encontraron con el grupo

-¿Dónde estaban? Los perdimos de vista de un de repente- hablo Lo'ak caminando hacia ellos haciendo que todos imitaran su acción

-No nos dimos cuenta, solo estábamos jugando y...nos alejamos- respondió el joven Metkayina quien no soltaba la mano de su amiga. Aleia se notaba algo de caída después de ver a Nakoa, era entendible, después de haber confiado tanto en alguien y llevarse tan bien con el al punto de llegar a sentir emociones que no sentirías normalmente en una amistad para después enterarte de que te ocultaba cosas muy importantes para ti, debe ser horrible.

-Si, al parecer se divirtieron- comento Neteyam haciendo que Ao'nung dirigiera su mirada a él, este miraba fijamente sus manos unidas. Fue ahí cuando el joven se había dado cuenta que aun sostenía la mano de su amiga, rápidamente la soltó mientras sus mejillas entraban en calor y sus niveles de nerviosismo subía velozmente

-Si...yo...nosotros...diversión...claro- decía palabras al azar y sin sentido- Aleia- nervioso llamo a su amiga para que dijera algo, pero esta estaba con la mirada perdida sin emitir una sola palabra, esto hizo que el joven se preocupara de inmediato- ¿Aleia?

-¿Mmh?- fue lo único que dijo mientras levanto su vista al escuchar su nombre

-¿Estas bien?- pregunto Ao'nung tocando su hombro

-Si, yo...solo...estaba pensando- respondió ella

-¿Estas segura? ¿Paso algo? - pregunto Neteyam al darse cuenta de todo

-No, todo bien tranquilo...mejor vamos a seguir viendo el clan- Aleia fingió una sonrisa antes de comenzar a caminar, el grupo la observo extraño antes de seguir su paso. La joven se dirigió al centro de la aldea, lugar donde se encontraban varias mujeres tejiendo vestuarios típicos del clan mientras que otros Na'vis realizaban rituales típicos de su cultura. Aleia veía como algunos de ellos emitían sonidos o realizaban gestos de saludos entre ellos, eso le recordó al saludo que tenía con Nakoa, suspiro fuertemente antes de volver a fingir una sonrisa y dirigirse a su grupo- Todo esto es muy lindo ¿No es así?

-Si, me gusta mucho las cosas que hacen- respondió Tsireya- tienen una cultura y tradiciones muy buenas

-Así es, hasta a mi me sorprende- dijo Aleia- ¿Qué les parece si vamos a nadar ahora? Siento como mi piel seca

-Por favor, mi cuerpo ya me esta pidiendo agua- hablo Roxto en un tono gracioso haciendo que todos rieran.

El grupo bajo velozmente desde las montañas hasta la orilla del mar, se adentraron para llamar a sus ilus quienes aparecieron rápidamente. Una vez se vincularon con ellos y los montaron comenzaron su viaje. Así es como ellos pasaron mucho tiempo nadando y disfrutando de su día hasta que llego el momento de volver a casa. Todos salían del agua muy sonrientes mientras lanzaban comentarios graciosos al aire, no fue hasta que Ao'nung noto como el clan Mit'kante estaba reunido junto a su padre y demás Metkayinas en la gran carpa donde solían tener reuniones.

-Chicos- hablo llamando la atención del grupo, el joven no quito la mirada del lugar haciendo que los demás vieran a esa dirección, rápidamente sus sonrisas se borraron- No parecer ser nada bueno- dijo para voltear a ver a sus amigos encontrándose con sus caras de preocupación

-Ven, tenemos que ir- dijo Tsireya tomando a su hermano del brazo

-Iremos también- agrego Neteyam haciendo que la joven volteara, pensara por unos segundos para terminar asintiendo con la cabeza. Todos se apresuraron para poder escuchar la conversación, pero al entrar a la carpa todos los presentes voltearon a mirar un punto fijo, Aleia.

-¿Qué esta pasando?- pregunto la hija del Olo'eyktan, su padre la miro con sus orejas agachadas sin decir nada

-Queremos que nuestro clan tenga lideres- hablo el padre de Nakoa y al parecer el representante del clan Mit'kante- hace muchos años que no tenemos un Olo'eyktan ni una Tsahìk y creemos que es el momento- guardo silencio unos segundos para luego apartar la vista de Tsireya y dirigirla a Aleia- En especial si tenemos a la heredera del mandato aquí con nosotros

-¿Yo?- pregunto ella al notar su mirada

-Si, eres la única hija de nuestros últimos lideres...tienes que ser nuestra futura Tsahìk- respondió el hombre- pero...nos faltaría el Olo'eyktan y.....como clan llegamos a un acuerdo el cual estábamos discutiendo con Tonowari

-¿Qué acuerdo?- pregunto la joven dudosa mientras su mirada viaja desde el padre de Nakoa hasta Tonowari y viceversa

-Nuestro mejor guerrero y el Mit'kante que fue en busca de ayuda para su clan trayéndonos aquí y brindándonos seguridad....creemos que el seria un gran líder, mi hijo...Nakoa seria un gran Olo'eyktan- dijo para luego acercar al joven quien estaba escondido a sus espaldas- para que esto suceda deben crear la unión, podemos realizar una ceremonia de bodas para que después ustedes puedan vincularse

-¡¿Qué?!- Exclamo ella mientras tenia sus ojos y boca abiertos- ¿Es enserio?

-No tengo tiempo para bromas jovencita- respondió el hombre

-No, no, no y no, no me casare ni mucho menos me vinculare con el- dijo para luego mostrar su espalda y empezar a dar unos pasos en dirección a la salida, lugar donde se encontraba su grupo de amigos quienes miraban atentos la situación, algunos estaban confundidos otros preocupados y otros enojados, sin embargo, Neteyam poseía las tres emociones en su rostro.

-¿No lo harías? ¿Ni siquiera por tu clan? - pregunto el mayor haciendo que la joven se detuviera y mirara el suelo mientras muchas cosas venían a su mente. No quería que su propio clan la rechazara, pero tampoco quería hacer algo en contra de su felicidad y sumado a eso cargar con una responsabilidad para la cual no estaba preparada.