La Nueva Na'vi | Neteyam Sully

CAPITULO 141: "NO TE NIEGUES"

Los días pasaron y Tonowari se encargó de esparcir la verdad de los hechos para que su clan no quede con una mala imagen de la chica, ahora los Metkayinas la observaban con más admiración que antes, no solo fue elegida por Eywa para hacer el viaje, sino que también estaba dispuesta a darlo todo para salvar al planeta y sus habitantes y eso era de admirar.

Aleia cada vez que caminaba por la isla sentía las miradas, ahora no solo de los hombres sino también de las mujeres, estas se sentían especial al ser vistas o al recibir cualquier comentario de Krag Makto. Esto impulso a que la chica tomara una actitud coqueta para conseguir cualquier cosa que quisiera tanto de hombres como de mujeres.

Neteyam, por otra parte, al saber el verdadero motivo por el que Aleia tuvo que irse pudo colocarse más en su lugar y comprenderla, no les mentiré, aún seguía con ciertos sentimientos de orgullo que le hacia retroceder cada vez que quería hablar las cosas y resolverlas de una buena vez, habían veces en las que la veía y quería lanzarse a su brazos, dormir en ellos, besarla pero su cuerpo no se lo permitía, el no se lo permitía y estaba tratando de trabajar con eso para que el día en el que este preparado pueda decirle todo lo que siente y sintió en su momento.

Kiri caminaba tranquilamente por la playa, quería relajarse sintiendo la arena en sus pies y oyendo las olas chocar contra la isla, estaba completamente sola o eso creía. Su tranquilidad se vio afectada por Atik y su grupo de amigos, estos habían aprovechado el tiempo en el que Aleia se había ido para molestar a Kiri y pocas veces a Lo'ak tirando comentarios desagradables sobre sus dedos y ser de sangre demoniaca.

-¿Por qué tan solita demonia?- decía una de los cinco jóvenes

-Ya les he dicho que no me digan así- respondió Kiri rodando los ojos

-¿Cómo? ¿Demonia? Pero si eso es lo que eres- decía Atik

-Ya no me molesten- Kiri estaba dispuesta a salir de ahí, pero fue rodeada rápidamente por todos, la joven los miro algo asustada mientras su cola se enredaba entre sus piernas

-La na'vi demonia tampoco esta tan mal ¿No lo creen chicos?- pregunto una de ellos con una sonrisa algo picara, los demás sonrieron de la misma forma mientras se miraban entre ellos cosa que no le agrado para nada a la Omaticaya

-¿Creen que tenga nuestra misma anatomía?- pregunto Atik

-A mí no me molestaría descubrirlo- respondió rápidamente uno de ellos- podríamos divertirnos los seis juntos- Kiri había entendido lo que estos querían hacerle, miro a cada uno de los chicos y en sus caras podía notar las intensiones que tenían, de un momento a otro corrió, pero fue detenida por uno de ellos quien la tomo del brazo para luego apegarla a su cuerpo

-¿A dónde crees que vas bonita?- dijo acercándose a su cara para darle un beso, la chica trato de alejarse lo más posible de este

-¡No me toques!- gritaba mientras trataba de dar golpes

-No te niegues- hablo Atik- será más difícil para ti si te resistes, es mejor que colabores- sintió como era arrastrada por los brazos, tenían la intención de llevarla al bosque, la chica se movía tratando de escapar. A veces se lograba soltar de su agarre, pero no duraba mucho porque volvían a sujetarla. Sentía como algunos tocaban zonas que no deberían cosa que la hacía sentir más insegura.

-¡Hey!- escucho la voz de su hermano- ¡Suéltenla ahora!

-Lo'ak- dijo más aliviada al ver la figura de su pequeño hermano

-¿O qué?- pregunto desafiante uno de los chicos

-Les romperemos la cara- hablo Neteyam apareciendo detrás de su hermano, el grupo de jóvenes libero a la chica para ponerse frente a los dos hermanos Sully. Kiri rápidamente se posiciono detrás de ellos, a pesar de sentirse protegida aún tenía miedo

-¿Tu nos romperás la cara? Somos cinco contra dos- decía Atik- no te tenemos miedo

-Si, son cinco cobardes atacando a una chica- contesto Neteyam- a nuestra hermana, créanos cuando les digo que les romperemos la cara- los jóvenes, exceptuando Atik, cambiaron completamente su semblante, al parecer tenían miedo, Neteyam pensó que tal vez era por lo que el había dicho.

-Quiero que lo intentes- volvió a hablar Atik

-Cállate Atik- susurro uno de sus amigos mirando a Neteyam, o eso parecía

-¿Qué? ¿Por qué? si este...-el chico guardo silencio al ver al mismo lugar que sus compañeros, Neteyam vio de reojo como un arco y flecha pasaban junto a el para luego mostrar el rostro del responsable que apuntaba el arma, Aleia con cara molesta observaba al grupo

-De tin- comenzó diciendo entre dientes apuntando a uno de ellos- Marín- se dirigió a otro de ellos- de do- esta vez apunto a otro distinto- pingüe- al ultimo que apunto fue a Atik- contare hasta tres y dispararé- los chicos comenzaron a retroceder lentamente- uno...-comenzó diciendo, los chicos dieron media vuelta para salir corriendo siendo Atik el ultimo de ellos- dos...- dijo bajando lentamente el arco y flecha para mirar a Kiri quien tenia las orejas bajas, su vista se dirigió rápidamente a Neteyam quien observaba su acción atento, algo impresionado- ¡TRES!- exclamo volviendo a subir el arma para luego lanzar la flecha llegando justo al muslo del ultimo de ellos. La chica al ver que cumplió con su cometido bajo su arco y se dirigió a Kiri- ¿Estas bien? ¿Te hicieron algo?- preguntaba preocupada cambiando completamente su actitud mientras acariciaba el rostro de la Omaticaya

-Aleia...-decía asustada antes de liberar lágrimas, la chica abrazo a su amiga mientras miraba a sus hermanos

-Tranquila, llegamos a tiempo- trataba de calmar a la Omaticaya quien se aferraba a su cuerpo, estaba totalmente asustada- ellos no te harán daño, yo estoy aquí ¿Sí?- la chica asintió entre su abrazo- hay que llevarla a casa- le dijo a los chicos, tan pronto como Kiri pudo calmarse se dirigieron a la carpa y les contaron lo sucedido a sus padres. Neytiri se encargo de aliviar a su hija, consolándola y preparándole una especie de té para calmarla, Jake por otra parte no se lo tomo de la mejor manera, pidió nombres los cuales se los dio con gusto Aleia. El padre estaba cansado de que sus hijos reciban insultos por tener cuatro dedos, pero se los había aguantado por que estaban viviendo en su isla, sin embargo, esto paso su límite, iría a hablar con Tonowari para que los responsables reciban algún castigo, no podía siquiera pensar en cómo alguien se quería aprovechar de esa manera de su hija.

-Te viste genial haciendo eso- decía Lo'ak saliendo con Aleia y Neteyam de la carpa- llegaste de la nada y los asustaste

-No fue increíble- reprocho Aleia al joven- tuve que aguantar las ganas de dispararle en la cabeza y sinceramente no quiero volver a verme incluida en una situación similar, no hice esto para verme genial, lo hice por Kiri ¡Tu hermana! Quien casi le hacen algo horrible- decía furiosa- piensa en eso- fue lo ultimo que dijo antes de seguir caminando dejando a los dos hermanos parados

-Perdón- susurro Lo'ak con orejas bajas- no quería restarle importancia a lo que le sucedió a Kiri, solo quería alagar su forma de actuar- le hablan a su hermano mayor

-Lo sé bro- dijo colocando su mano en el hombro de su hermano moviéndolo ligeramente- te entendí, pero no era el momento, no te sientas mal por lo que te dijo ¿Sí? Mejor entendámosla, Kiri casi sufre algo que no quería si no llegábamos a tiempo

-Si lo sé- decía entristecido- mejor entremos, quiero asegurarme que este bien- dijo caminando de vuelta al hogar, Neteyam volteo a ver unos segundo a la dirección a donde se había ido Aleia antes de seguir a su hermano.