La Nueva Na'vi | Neteyam Sully

CAPITULO 156: "LA PARED"

La chica se movía en su cama, trataba de acomodarse en ella para no despertarse del todo. Algo se había posado en su mejilla, podría decir que era una mano pues sintió el movimiento de uno de los dedos dándole cariño.

-Hora de despertar bella durmiente- abrió los ojos lentamente al reconocer la voz de Neteyam, se encontró con esos ojos amarillos brillante que la observaban felices- despertaste algo tarde, nosotros ya desayunamos- decía el chico acariciando su mejilla- no quería despertarte antes porque te veías tan relajada así que pensé en dejarte dormir y traerte el desayuno después- dijo dándose vuelta para tomar algo que estaba en la mesita de al lado, Aleia se acomodó en la cama antes de recibir cualquier cosa- aquí tienes

-Muchas gracias- sonrió está- que lindo detalle

-No fue nada- hablo el chico con una gran sonrisa- hay fruta picada ahí, yo mismo fui a recogerla está mañana al bosque- decía apuntando uno de los platos

-Si ya lo vi, gracias- trato de hablar con algo en la boca, el Omaticaya veía atentamente cada movimiento de la chica mientras desayunaba- ¿Te quedarás viéndome hasta que termine?

-Podría verte hasta mis últimos minutos de vida- comento el chico sin apartar la mirada, la Mit'kante solo nego con la cabeza mientras dirigía su mirada al plato tratando de evitar que Neteyam viera su pequeña sonrisa y su leve sonrojo

-Muchas gracias, estuvo delicioso- dijo al terminar de masticar el último bocado de comida

-Podría hacer esto más seguido si lo deseas- mencionó levantando los platos vacíos del lugar

-No me molestaría la verdad

Ambos salieron de la carpa, Neteyam llevaría los platos de vuelta a la tienda de sus padres y Aleia buscaría al Metkayina con el que tenía una conversación pendiente.

-¡Tau!- lo llamo al encontrárselo caminando a su dirección con la cabeza baja, este al verla levanto sus orejas rápidamente y se acercó a paso veloz

-Aleia- la nombró lanzándose sobre ella en un abrazo- lamento lo que pasó ayer, no debí acceder a las provocaciones de Neteyam, te juro que no volverá a suceder- decía en su hombro

-Tau, no te preocupes- Aleia sonreía al notar al Metkayina tan arrepentido, tan preocupado de que la chica estuviera enojada con el- no estoy enojada, Neteyam me dijo todo

-¿Así?- dudo separándose de ella

-Si, no debía decir eso, yo soy la que decido con quién estar y no el- el Metkayina sonrió al saber que su "rival" había dicho la verdad y que Aleia había estado en desacuerdo con el- ya hablamos sobre eso, espero no vuelva a pasar situaciones similares

-De mi parte intentaré comportarme- levanto su mano como si estuviera haciendo un juramento- pero si llega a decir o hacer cosas algo elevadas voy a defenderme- advirtió el chico, Aleia lo miro de mala gana con una pequeña sonrisa antes de reír. Su momento se vio interrumpido por el llamado de la caracola, sus miradas se dirigieron rápidamente al mar, los visitantes se aproximaban. La gente del clan comenzó a acercarse formando un círculo, el Olo'eyktan y la Tsahík hicieron presencia en el lugar al igual que los Sully.

-¿Qué pasa?- pregunto Kiri quien estaba junto a Aleia, al lado de la Omaticaya se encontraba toda su familia

-Vienen por mi- respondió Aleia ganándose la mirada de cada uno de sus cercanos, antes de que alguno de ellos pudiera hablar la chica se acercó a los recién llegados- Eyktan y Tsahík del clan Kekunan- decía haciendo el típico saludo formal- y claro su mejor guerreros- decía mirando al chico a su lado

-Bienvenidos- dijo Tonowari- según lo que dice Aleia, viene por el puesto de Krag Makto ¿No es así?

- Así es, trajimos a nuestro gran y poderoso guerrero Koa, es el mejor de su generación- hablo el hombre