La Nueva Na'vi | Neteyam Sully

CAPITULO 122: "AL FIN APARECES"

Aleia fue la primera en despertar, miro a su costado encontrándose con un vacío en la otra mitad de la cama, Neteyam no había llegado a dormir. No sabia de el desde la noche anterior, se sentó sobre la cama y miro a los otros dos hermanos Sully quienes dormían plácidamente. No quiso perder mas tiempo, se levanto para guardar las ultimas cosas que le quedaban dentro de su maleta. No fue hasta que una voz ronca hizo que se sobresalte.

-Te falta esto- dijo, vio como a su lado aparecía una mano azul con un abrigo de cuero café. La chica levanto sus orejas, sentía como el aire volvía a entrar a sus pulmones, se sentía alegre pensando que el Omaticaya había pensado mejor las cosas y había vuelto por ella. Al darse vuelta, la pequeña curva en sus labios se desvaneció- Parece que no eras a mi a quien querías ver

-No, perdón Lo'ak- trato de forzar una sonrisa mientras recibía la prenda

-Es para que te abrigues cuando viajes, tal vez vueles por mucho tiempo y no queremos que te resfríes

-Gracias- dijo sin ánimos, el chico miro a su amiga por pocos segundos tratando de entender lo que le estaba pasando, cuando dirigió su mirada a la cama supo lo que sucedía

-¿Neteyam no durmió aquí?

-No...no se donde esta- el joven noto como las orejas de Aleia bajaron inmediatamente

-No se lo tomo para nada bien ¿Cierto?

-No, llego a un punto que ya no quería escucharme- volteo a mirar al Omaticaya con ojos lloroso, Lo'ak pego sus orejas a su cráneo al ver el rostro de la chica- Ni siquiera sé si vendrá a despedirse

-Tranquila- la rodeo entre sus brazos- guarda esas lagrimas para después ¿Sí? Si él no llega, él se lo pierde y yo después me encargare de golpearlo- la chica soltó una pequeña risa al escuchar como quería defenderla- Lo que si te puedo asegurar es que varios de nosotros estaremos ahí para hacerte sentir querida hasta el último momento

-Lo sé- dijo al separarse de el- gracias Lo'ak- el chico sonrió levemente mientras secaba las lágrimas que recorrían la mejilla de la chica

-¿Quieres hacer una última travesura antes de irte?- pregunto con una sonrisa traviesa en su rostro

-¿En que piensas?- pregunto de la misma forma, vio como Lo'ak volteo lentamente hacia la cama donde Kiri aun dormía- Eres malvado

-Gracias, eso aumenta mi ego- dijo compartiendo una gran sonrisa con la chica

Ambos chicos salieron de la tienda casi corriendo de Kiri, no fue tan buena idea despertarla de esa forma. Cada uno se había puesto en cada lado de la chica, se acercaron lo mas posible a sus orejas para posteriormente gritar lo mas fuerte posible haciendo que la Omaticaya de un brinco del susto. Los tres llegaron a la carpa de sus padres, lugar donde se calmaron y llevaron la guerra en paz pues era el ultimo desayuno de Aleia antes de su viaje. Durante todo ese tiempo, la chica veía constantemente la entrada del lugar esperando la llegada de Neteyam quien no apareció. Una vez terminaron y arreglaron las cosas, fueron en busca del equipaje de Aleia, había llegado el momento de su viaje.

-Mi pequeña- comenzó diciendo Neytiri mientras iban camino a la orilla de la playa- por favor cuídate y vuelve lo más pronto posible ¿Sí?

-Estaré de vuelta cuando menos se lo esperen, de eso estoy segura- respondió la joven tomando las manos de la madre

-Aleia- interrumpió el Olo'eyktan- como clan te deseamos un gran viaje, como líder te pido que cumplas con lo que Eywa te pide y como padre...te pido que te cuides y regreses con bien

-Gracias Eyktan- contesto la joven, Tonowari inmediatamente hizo un gesto la su mano y casi enseguida una sonora comenzó a escucharse, los Metkayinas tocaban sus instrumentos musicales como dándole una despedida a Aleia. La chica volteo a mirar a sus seres queridos para luego acercarse a ellos, se despidió de cada uno de ellos, Lo'ak, Kiri, Tsireya, Ao'nung, Roxto, Kai, pero cuando llego el momento de despedirse de Tuk esta no paraba de llorar, fue la ultima en enterarse, sus padres se lo habían dicho esa misma mañana.