CAPITULO 90: "MALA IDEA"

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Escucharon como voces se oían cerca de ellos, al voltear notaron muchos mas botes con Mit'kantes de todas las edades estaban sobre estos.

-¡Rápido! Debemos salir de aquí lo antes posible- dijo una de las mujeres apurando la velocidad que tenía el bote

-Tengo una idea- hablo un hombre quien se hundió bajo el agua cambiando su forma a un gran animal marino, se posiciono bajo la barca y apuro su movimiento, las demás personas imitaron su acción

-¡Los atraparon!- exclamo un pequeño Na'vi al ver como varios botes desaparecían a su tras- Los tienen mamá- dijo para voltear su mirada a la mujer a su lado

-Lo sé amor, pero no podemos volver- respondió con sus orejas bajas mientras contenía las lágrimas- Tenemos que salvarnos- rodeo a su hijo entre sus brazos para que no continuara viendo tales monstruosas escenas

-Mis amigos estaban ahí- hablo ocultando su cabeza en el cuerpo de la mujer para llorar sin parar. Luego de unos minutos, los sobrevivientes llegaron a una no tan grande isla.

-Vengan ocultémonos aquí- dijo el hombre que en un comienzo había cambiado su forma, esta vez en su estado original. Con ayuda de los demás tomaron el bote y lo introdujeron en el bosque para evitar dejar rastro alguno.

El grupo de amigos se adentro a la isla tratando de seguir el paso a los Mit'kantes. Notaron como el paisaje iba cambiando, se dieron cuenta que ya había cabañas a su alrededor, era un salto en el tiempo.

-¡Nakoa no llegues tan tarde!- exclamo la mujer dentro de la cabaña, el mismo niño del comienzo pero esta vez mas alto salió del lugar corriendo.

-¡Lo se mamá!- respondió con una sonrisa en el rostro, corrió hasta llegar a la orilla del mar lugar donde miro el horizonte con admiración. Miro a sus espaldas asegurándose que nadie lo vea, se adentró lo más rápido posible al agua cambian su forma a una acuática, el joven nadaba divertidamente en el mar. Cuando salió a la superficie por un poco de aire se dio cuenta que estaba muy lejos de la isla, asustado nado de regreso. Al llegar a la orilla se encontró con su padre cruzado de brazos.

-Nakoa, sabes bien que tienes prohibido acercarte a las orillas de la isla- dijo en un tono serio haciendo que el pequeño bajara las orejas

-Lo sé, es solo que me aburro estando solamente en el bosque, antes solíamos nadar juntos papá- respondió triste con sus ojos puestos en la arena, el hombre suspiro y se arrodillo quedando a la altura de su hijo

-Te pueden ver, no queremos que algo malo te pase cariño- dijo en tono dulce mientras tomaba los hombros de su hijo haciendo que este lo mirara fijamente a los ojos- ¿Sabes? Creo que ya tienes edad para aprender a utilizar las armas de guerra

-¿Enserio?- pregunto el pequeño cambiando rápidamente su estado de ánimo, estaba emocionado

-Claro, tenemos que hacer una lanza especialmente para ti primero- dijo el hombre colocándose de pie, el niño tomo la mano de su padre y lo jalo llevándolo al bosque

-Vamos papá no perdamos mas tiempo- hablo feliz mientras su padre reía por su actuar

Nuevamente, el grupo de amigos noto que algo extraño pasaba a su alrededor. Vieron como del bosque salieron más Na'vis, entre ellos la figura actual de Nakoa, era otro salto en el tiempo. Los Mit'kantes abrían el paso cada vez que sentían al joven cerca.

-Hijo mío, que tengas un buen viaje- dijo su madre a un costado de la balsa, el chico se aproximo a ella para darle un abrazo, la mujer no pudo aguantar mas el llanto al tener a su pequeño entre sus brazos como lo tuvo mucho tiempo atrás.

-Volveré madre, no tienes que llorar- le dijo en su oído

-Lo sé, pero me es difícil tenerte lejos mi niño- hablo alejándose de su hijo para posar una de sus manos en su mejilla- cuídate ¿quieres?

La Nueva Na'vi | Neteyam SullyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora