No tan ocultos • Cristiano Ronaldo ~ Messi ~ Ochoa

⚽ 63.- Tranquilidad

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Estando en Argentina unos cuantos días más, Julián se lo pasaba bien en casa, además se notaba de lejos cuánto lo mimaban, como su abuelita, Doña Tita, quién le preparaba los postres que más le gustaban entre ellos el arroz con leche.

A Guillermo le gustaba verlo feliz y tranquilo en especial. Sobretodo eso último pues no quería estresarlo para no afectarle al bebé. Los síntomas del embarazo eran todavía casi nulos, solo algunas leves náuseas y sus antojos hasta en ese momento estaban en paz. A Julián solamente se le antojaba lo dulce y chucherías pero su mamá y abuelita lo tenían en una dieta balanceada y lo que menos quería comer el joven era algo sano.

Estando en casa, ya habían decidido dejar ver la noticia sobre su embarazo aunque sutilmente. Tampoco era que quisieran a la prensa encima como le había pasado a Lionel.

Iban a tener cuidado en ello pero poco a poco dejaban ver las cosas. Cómo por ejemplo al salir. Julián usaba la ropa ligeramente ajustada de manera que se notará más su vientre.

Pero lo que comenzó a dejar de que hablar fue un regalo que Memo le había traído esa tarde. Pues el Portero se había visto rondando por tiendas donde vendían cosas únicamente para bebés.

— ¿Dónde andabas?.— Sonrió Julián bajando las escaleras. Su novio iba llegando de fuera.

— Cuando salimos a desayunar en la mañana pasamos por un local.— Explico Memo dándole la mano y llevándolo a la sala.— Y regrese, para comprarte esto, lo vi y me acordé de ti.

Cuando se sentaron, Julián recibió en sus manos una pequeña bolsa de regalo que tenía un osito por imagen.

— ¿Son dulces? ¿Qué es?.— Julián comenzó a abrir la bolsa y sacarle el papel de adorno.

— Bueno, en realidad no es para ti.— Había reído el mayor.

Cuando su novio dijo eso, Julián termino por sacar un pequeño mameluco bastante especial: era con el estampado de Spider Man e incluso el gorrito tenía la alusión a la máscara del personaje favorito de Julián.

— Es para nuestra arañita.— Guillermo al decir eso le acarició el vientre.

— Amor.— De la emoción Julián se seco las lágrimas.— Me encanta, gracias.— Le dio del mismo modo un beso.

— Te dije que quiero presumir que voy a ser papá.

— Y lo vas a presumir mucho ya verás.— Julián sonrió para ver nuevamente el mameluco.

Ver su cara de felicidad era lo que más le gustaba a Guillermo.

En Guadalajara, aún con la ligera comezón pero gracias a las pomadas está ya era menos, inclusive ya no incomodaba tanto.

— Menos mal eso no dejo marca...— Javier se vio su reflejo en el aparador al salir de la clínica.

Habían ido a checar que en efecto, el escozor ya no sea problema. Pero ahora en el cuello de Javier se dejaba ver un elegante, caro y llamativo collar de protección en color rojo con blanco, una vez que la incomodidad de las ronchas había pasado, Ronaldo le había dado el collar para protegerlo y también dejar ver quién era su Alfa.

— Pero tú querías hacerlo en el cerro ese...— Ronaldo se acomodo el saco.

— Bien que pedías más...— La voz de Javier fue coqueta y se lo sabroseo con la mirada viendolo de arriba a abajo.— Podemos repetirlo, hay un cerro que está cerca de aquí...

— Cállate...— Se avergonzó el Portugués interrumpiendolo.— Volvamos a casa.

Le había dado la mano para comenzar a caminar mientras iban hablando.

— Tengo un compromiso... aún está en pie lo de ese comercial.— Explicó Cris.

— Y sabes que me encantará ir contigo.— Sonrió su novio besando la mano que sostenía.

— También no se si después de eso... pensar en el retiro...

— Has lo que creas correcto.— Javier lo seguía animando.— Aún podemos jugar y si te sientes con fuerza y ánimo para hacerlo, ya sabes que a dónde tú vayas yo iré.

— ¿De verdad?.— A Ronaldo lo que le inquietaba era presionarlo a ir detrás de él y no dejarle disfrutar tampoco lo que le gusta.

— Podemos adaptar nuestros planes, incluso ver si podemos estar en el mismo equipo si quieres.— Javier seguía animado a hacer las cosas.— Bueno, ya veremos eso aún tenemos tiempo.

Aunque escucharlo decir todo ello, sentirse animado, ver qué Javier incluso cambiaría algunas cosas con tal de poder estar juntos, le había gustado. Lionel tenía su manera de pensar y muchas veces fue Ronaldo quién dejaba todo para estar con él... en los últimos tiempos dar sin recibir aunque sea un poquito de lo que daba.

Viendo a Javier... su manera de ser, su manera de corresponder... valoraba y agradecía enormemente eso.

Tras escucharlo, freno sus pasos a medio caminar y jalo suavemente a su Omega para besarlo con ternura. Aunque eso sorprendió a Javier, sonrió enmedio del beso y le correspondió rodeando su cuello con los brazos.

— ¿Y eso por qué fue?.— El Chicharito aún así le volvió a dar un beso más.

— Porque me doy cuenta de lo maravilloso que eres, y voy a hacerte feliz siempre.

— Yo también te amo wey.— Lo beso nuevamente.

— Que me digas así me prende.— Se burló Ronaldo sin soltar su cintura.

— Te digo que hay un cerro...

— Excepto eso.— Lo regaño su Alfa.

Tras reír un poco Javier volvió a besarlo y continuaron su camino a casa. Sin pasar desapercibidos claro por los medios de televisión.

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