Capitulo 36.

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Al día siguiente...

-¡Buenos días!-gritó un pequeño que se metió en medio de Carlos y de mí-.

-Buenos días mi amor-Jaxon me dio un pequeño beso y me abrazó, después hizo lo mismo con Carlos-.

-¿Que haces despierto tan temprano enano?

-Son las once, podemos ir al parque, ¿por favor?

-Claro, Carlos te llevará-dije, Carlos me miró mal-.

-¿Y Matt?

-No esta.

-¿Y Drake?

-Salió.

-Solo te llevaré si _____ viene.

-Yo necesito dormir-me quejé-.

-Venga ____, por favor, te lo suplico-el pequeño me miró y no me pude resistir-.

-Esta bien, vamonos. Dile a Gracie que te ayude a vestirte.

-¡Eres la mejor!-y se fué corriendo-.

-Estoy muerta-enterré mi rostro en la almohada-.

-Venga dormilona, vamonos.

-No quiero...-me quejé, pero de pronto, unas manos empezaron a moverse por todo mi cuerpo haciendome cosquillas, empecé a reír sin parar-. ¡Esta bien, para!

-Venga levanta culo gordo-me pegó un azote y se levantó de la cama-.

-¡Oh no lo has dicho!

-Sí que lo he dicho.

-¡Mas te vale correr!

Y como si fueramos niños de tres años, Carlos empezó a correr por toda la casa y yo detras de el, por el camino el se cargo un jarron y yo un cuadro. El reía sin parar y yo estaba enfadada por lo que dijo de mi trasero, ¡no es gordo!

Al fin pude alcanzar a Carlos y me tiré encima de su espalda pegandolo, pero el no paraba de reír.

-¿Que ha pasado aquí?-dijo Drake entrando y Gracie bajando con Jaxon-.

-El imbécil de tu hermano-dije yo-es un idiota.

-Uuuy...____ ha dicho una palabrota y otra-dijo Jaxon tapandose la boca y riendo-.

-Solo era una broma-dijo Carlos aún riendo-.

-Te odio-lo miré mal y subí-.

Me vestí con algo comodo, dejé mi pelo suelto y baje para irnos al parque con Jaxon. Esta claro que no le hablare a Carlos.

Antes de irnos al parque, pasamos por un Starbucks para desayunar porque moría de hambre.

-Venga ______, era solo una broma-dijo cogiendo mi mano, el estaba enfrente mía. La quité-.

-¿Esta bueno Jaxon?-el pequeño asintió y Carlos bufó-.

-¿Puedo pedir más colacao?

-Claro.

Le pedimos a la camarera un poco más de colacao. Cuando terminamos de desayunar, Carlos pagó todo el desayuno y nos fuimos al parque que había al lado.

Cinco minutos después, cuando yo estaba mirando los patos que había en el agua y tirandoles comida, alguien apareció con una rosa enfrente mía y una mano en mi cintura.

-Venga mi amor, lo siento, era broma de verdad. A mi me encanta tu culo.

-Sí claro-lo ignoré-.

-Que sí, te lo prometo, venga, ¿me perdonas?-lo miré y suspiré, el besó mi mejilla y yo cogí la rosa-.

-Esta bien, perdonado.

-Te amo-dijo en mi oído-.

-Y yo-me di la vuelta y lo besé-mucho.

-¡____!-gritó Jaxon y lo miramos-¿puedo quedarme a comer y a jugar en casa de Andrew hoy?

-¿Esta aquí?-el niño asintió-. Deberíamos hablar con su madre, vamos.

Después de hablar con la madre del niño, dejé que Jaxon se fuera con ellos. Lo iban a traer más tarde a casa. Yo y Carlos volvimos a nuestra casa y nos sentamos a comer con sus hermanos y Gracie.

Cuando terminamos de comer, nos salimos a la piscina un rato. Carlos estaba tumbado boca abajo y yo haciendole un masaje por la espalda.

-Me voy a quedar dormido-murmuró-.

-No te duermas-me dejé caer sobre el y besé su hombro izquierdo-.

-Tengo ganas de un helado.

-Eres un gordo que siempre esta comiendo.

-Me has ofendido.

-Que lastima-dije riendo-.

-Levantate un poco que me voy a dar la vuelta-me levanté y el se puso boca arriba y yo me subí encima de el, sonrió.- Desde aquí tengo una buena vista de tus pechos.

-Hombre tenías que ser-rodé los ojos, el puso su mano en mi nuca y me atrajo a sus labios, besandomé-.

-Eres una quejica, siempre te quejas de todo.

-Sobretodo contigo porque me encanta-dije besandolo-.

-Lo se, te encanta sacarme de mis casillas-sus manos se posaron en mi trasero-.

-Mucho-lo volví a besar-.

-Por favor, subir a la habitación-dijo Matt acostandose en la tumbona de al lado, reí-.

-Que mala es la envidia-dijo Carlos sonriendo, me quedé encima de el acostada con mi cabeza en su pecho-.

-Matt, quiero hacerme un tatuaje, me voy a pasar un día por la tienda.

-¿Sí? ¿Que quieres hacerte?

-Quiero hacerme una frase debajo del sujetador, en el filo.

-¿Que te vas a poner?

-Nunca olvides quien eres.

-Trabajaré en ellos, te haré un par de bocetos y me dirás.

-Y tambien quiero otro con una fecha como el de Carlos, con el año en que mis padres se casaron, 1990.

-¡Eres una copiona-dijo Carlos-.

-Oh tu callate.

-No me mandes callar.

-Lo estoy haciendo.

-Eres insoportable.

-Tu mucho más.

-Y una mandona.

-Y tu un sumiso-Matt estalló en carcajadas y Carlos me miró mal-. Callate ya tonto, a pesar de todo, te quiero mucho-cogí su mano con la mía y entrelace nuestros dedos-.

-Y yo a ti.

-Sois tan bipolares-dijo Matt-. No hay quien os entienda-negó con la cabeza y cerró los ojos tomando el sol, yo y Carlos sonreímos mirandonos, a pesar de ser bipolares, eramos felices-.

- нe נusт ɴeeᴅlove. [carlos y tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora