Narra Megan.
Una estúpida sonrisa se planta en mis labios cuando abro la puerta de mi habitación y encuentro, nada más y nada menos, que al mismo protagonista de los sueños que hicieron que mi cama amaneciera empapada hoy. Alzo la cabeza y lo veo.
—Buenos días, Mikhail —saludo con la voz melosa. Alza una ceja, pero sonríe de lado. Mira un momento a los lados antes de responder:
—Parece que alguien tuvo una buena noche —dice. No borro mi sonrisa, me recuesto al borde de mi puerta y cruzo mis brazos por delante de mi pecho.
—Tuve a un hombre llenando mi coño y boca con su orgasmo. Sí, tuve una muy buena noche, Mikhail, ¿y tú? ¿Qué tal estuvo tu noche? —pregunto.
—Tuve mi polla en el coño y boca de una mujer, americana. Y ambas partes se sintieron de puta madre. ¿Cómo crees que amanecí después de eso? —pregunta con tono juguetón.
Algo en mi interior vibra con fuerza porque, de paso de que está admitiendo que le gustó lo de anoche, está dando indicios de querer repetir justo ahora. Saboreo mis labios, viendo la cámara.
—¿Qué excusa debería usar para que a las cámaras no se le haga extraño que entres a mi habitación y dures ahí un rato mientras mejoramos el día con un mañanero? —cuestiono. Sus ojos se dilatan y un gruñido brota de su boca que me pone los pezones como una roca. Gimo bajito.
—Me temo que ninguna, pero podemos pasar de tu cama para cogerte en uno de los cuartos útiles de abajo. Ahí no hay cámaras —admite. Una nueva punzada se hace presente, pero esta no es de placer, sino de duda.
¿Y si ya se ha cogido a otras ahí?
Al menos, en mi cama tengo la certeza de que solo ha estado él...
Aunque, si somos honestos, antes de mí, pudieron quedarse otras mujeres en esa habitación y él pudo haberlas cogido también.
Puede que sea la única americana que se ha follado, pero ¿qué hay del resto? Las rusas, por ejemplo.
Joder, cada nueva teoría que viene a mi mente me hace ir borrando la sonrisa hasta que ya no queda más alegría y solo queda un vacío porque sé perfectamente que, aunque para él es sexo, para mí es más que sexo y menos que amor, pero sí algo más.
No puedo definir con exactitud ahora mismo lo que siento por él, pero cada que lo veo, todo pierde sentido, hasta que a mi mente llegan sus palabras de aquel día o la duda siempre me embarga de no ser suficiente.
De que mi cuerpo no sea suficiente.
De que lo que le hago no sea suficiente.
De que lo que siento, no sea suficiente porque él no lo siente igual.
Suspiro con resignación y niego con la cabeza, evitando verle la cara.
—Para otra ocasión, Mikhail —musito y cierro la puerta para salir del todo. Coge mi brazo y me gira, dejándome de frente a él. Sin soltar mi brazo, eleva mi rostro.
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ESCOLTA DESIGNADO 🚘 [COMPLETA]
RomanceLibro #2 de la Trilogía "Independiente" Amores Designados. No es necesario leer el primer libro, pero se recomienda para entender situaciones de ciertos personajes. El plan de Megan de solo pasar dos semanas en esa ciudad para visitar a su mejor ami...