Aegon:
Los días en Dragonstone pasaban con lentitud y rapidez al mismo tiempo: lentitud porque no veía la hora de tener a mis hijos en brazos, cada día la ansiedad se apoderaba de mi ser; y rapidez porque en cuanto mis mellizos den su primer respiro, eso implicaría mi despedida de Dany y del resto de mi familia por un largo tiempo.
Mi sobrino crecía a pasos agigantados, si bien Sansa estaba convencida de que los genes Bolton quedaron olvidados, su hijo tenía un parecido bastante notable a su padre. ¿Negación? es probable, pensar que su bebé no tiene el rostro de aquel vil hombre le debe dar consuelo a su alma.
En este tiempo mi paranoia no se había esfumado, pero se había confirmado, días después de regresar llegó un cuervo informando de un enfrentamiento en el norte, un punto que estaba incluído en nuestra ruta, y que de no haber regresado con Sansa hubiéramos formado parte. Las tropas de Stannis se enfrentaron con las de los Lannister y el derramamiento de sangre fue devasador, Jaime Lannister salió victorioso y su ejército masacró al de Baratheon. Pero eso no fue lo más atroz que informó el cuervo, este tipo de noticia, por más lamentable que resulte, es común en periodos de guerra, siempre habrá un bando vencedor y uno perdedor, la noticia que me agobia y me llena de odio es algo terrible de pensar incluso en tiempos de guerra. Stannis viajaba con una sacerdotisa roja, según Melisandre dicha mujer había sido expulsada del templo de Dorne por realizar prácticas extremistas y muy antiguas. Esta mujer le prometió la victoria a Stannis a cambio de un sacrificio, su hija. La pequeña Shireen Baratheon padecía de psoriagris, y muchos la consideraban un milagro del señor ya que los niños que nacen con esta enfermedad, no suelen superar los primeros años de vida. El desenlace fue terrible, una niña entregada a la hoguera por la ambición de su padre y el fanatismo de una extremista religiosa.
En mi cabeza no paraba de rondar la idea de uno de mis hijos sufriendo lo que esa niña debió sufrir... me despertaba en medio de la noche por el miedo que mis pesadillas me infundían, y me preguntaba si en algún momento la famosa locura Targaryen me podría afectar de tal manera... "Locura y grandeza son dos caras de la misma moneda y cada vez que un Targaryen nace, los dioses lanzan la moneda al aire y el mundo aguanta la respiración para ver de qué lado caerá."... esa frase tan famosa de uno de mis antepasados resonaba a diario, y suplicaba a todos los dioses que solo sea producto de una mala crianza que ni Dany ni yo tuvimos, y que no planeamos darles a nuestros hijos.
Una tarde particularmente gris, mientras estaba contemplando la vista del océano desde uno de los balcones de la fortaleza, Gendry entra agitado y practicamente sin poder respirar, y entre respiraciones cortadas esboza la frase que tanto anhelaba y temía: "Es hora, tus hijos están por nacer". Esas siete palabras bastaron para que salga a buscar la habitación en donde mi esposa estaba dando a luz, había participado del nacimiento de mis primeros dos hijos, y esta oportunidad no sería la excepción, serían nuestros primeros hijos nacidos en el continente.
Al llegar a nuestro dormitorio, lo primero que vi fue a Daenerys cubierta en sudor y con cara de agonía, me sentía un completo inútil, no podía sacarle dolor ni ayudarla, solo podría acompañarla. Ella al percatarse de mi presencia, me miró y me regaló una sonrisa que a decir verdad me generó confusión, ¿quién podría sonreir en un momento de dolor casi agónico?, en ese momento comprendí que las mujeres poseían una fuerza que ni el mejor guerrero del mundo tenía. Luego de casi dos noches, nuestros hijos salieron del vientre de su madre al mismo tiempo que el sol salía desde el este.Una niña y un niño, hermosos con cabellos oscuros típicos de los stark, y los preciosos ojos violetas de su madre; Lyanna y Aemond fueron los nombres que les dimos.
Dany había quedado muy débil luego del parto, y el maestre nos había recomendado esperar un poco para buscar más hijos, lo cual nos pareció adecuado ya que pronto partiría y no tenía fecha de regreso definida. Su estado me preocupaba, pero ella insistió en que debía irme para recuperar a nustros hermanos, cumplir mi promesa, y darle su merecido al desgraciado de Ramsey.
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El retorno de los Targaryen
FanfictionEste es un #Jonerys fanfic. Cuenta la historia de como habría sido todo si Jon se hubiera criado con Daenerys en Winterfell y hubiera descubierto la verdad sobre su origen, la verdad sobre sus padres.