Deseo, atracción y algo más | Soy Neel

Capítulo 37

Día siguiente.

Al yo despertarme, me sorprendo cuando no encuentro a Nelson a mi lado, pero entonces escucho el sonido de la ducha. Ok, se está bañando.

Estiro mi cuerpo y me froto los ojos, alcanzo mi celular en la mesita de noche y lo reviso. Tengo cinco mensajes de Andrea, tres de Víctor y dos llamadas perdidas de mi mamá.

Levanto la vista de mi celular cuando escucho la puerta del baño abrirse, y de este sale mi guapo novio con una toalla enrollada en su cintura y su cuerpo y cabello mojado.

<<Mi novio>>

Lo digo con orgullo, porque eso es. Y después de pasar por todo lo que pase con él, de luchar, lo logré y me merezco este momento.

Paseo mis ojos desde su pecho hasta sus piernas, y creo que la boca se me hizo agua.

O la entrepierna mejor dicho.

Él me ve al darse cuenta de que lo estoy observando y sus labios se estiran en una sonrisa ladina.

- ¿Por qué me miras así? - pregunta divertido.

- ¿Cómo?

- Como si quisieras comerme.

Me levanto de la cama y doy unos pasos hasta estar a un palmo de distancia de su cuerpo, respiro hondo. Huele riquísimo. Enredo los brazos alrededor de su cuello y lo atraigo a mí para darle un beso con lengua, mis senos se pegan a su pecho poniéndome los pezones duros (ayer antes de dormirnos se me había olvidado colocarme una pijama) Sus manos las mantiene en mi espalda baja, sosteniéndome.

- Eso es lo que quiero - le digo al separarme.

Me besa.

- Buenos días - me dice.

- Buenos días.

- ¿Cómo dormiste?

- Divino - sonrío - ¿Y tú?

- Caí como un tronco.

Suelto una risita y vuelvo a conducirlo hacia mi boca para besarlo.

- ¿Quieres comer?

- Ujum - musito cerca de su boca - A ti.

Sonríe antes de besarme otra vez, nos quedamos así durante unos minutos más.

- Anda a bañarte para que vayamos a comer - dice y me planta otro beso.

- Mhm, no tengo apetito la verdad.

- Amor, tienes que comer. Acuérdate lo que pasó la última vez que no lo hiciste. Al menos intenta comer un poquito.

Medio sonrío y le doy otro beso.

- Está bien.

- ¿Y que quieres comer?

- Ensalada de frutas, con juguito de naranja.

- Ok. Ahora anda a bañarte y nos vamos.

Intento separarme de su cuerpo, pero me vuelve a pegar a él cuando me jala del brazo.

- Beso primero - pide.

Sonrío y me junto a él para besarlo.

Me alejo de su cuerpo y entro al baño, me hago un moño en el cabello para no mojarlo y me meto a la ducha.

Salgo después de unos minutos cubierta por una toalla hasta el pecho, cuando regreso a la habitación Nelson ya está vestido. Lleva puesto una franela azul claro con un jogger negro y unas botas blancas, tiene un collar de perlas alrededor del cuello.