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El gran pasillo de celdas era lo único que podía ver Gisselle,de alguna manera el asco de sentir que su cuerpo fue tocado de todas las formas posibles volvió. Sus labios temblaban y sus manos sudaban exageradamente.

Quizo que Bill la esperara fuera de ahí,no le gustaba que la viera tan débil. Comenzó a caminar tratando de llegar hasta la celda de Ben,respiro repetidas veces para calmar la ansiedad pero era casi imposible.

Observo como el masculino estaba cómodamente recargado en la pared,no tardo mucho en darse cuenta de la presencia de ella.

-Gisselle....cuanto tiempo,¿te preocupaste por mi o por qué veniste?.

Una pequeña sonrisa apareció en el,se acercó lentamente apoyando sus manos en las rejas.

-Jamas entendí tu sinismo....espero que esta vez pagues por todo lo que haz echo.-Se alejo lo más que pudo.

-Se que en el fondo aún siente algo por mi,fui tu primera maldita vez en todo ¿cómo puedes decir eso cielo?.-Su voz grave ponia la piel chinita de la pelinegra.

-Deje de sentir algo por ti en el momento que te atreviste a tocarme.-Trato de mostrarse firme pero era complicado.

-Estoy arrepentido,demasiado....era el alcohol lo que actuo,¿cómo podría aver lastimado a la persona que queria?.-Fingió redención.

Una ira incontrolable apareció en cada parte del cuerpo de Gisselle,su garganta quemada y su estómago dolia.

-Eres un imbecil,¡actuabas de la misma manera sobrio,deja de culpar al jodido alcohol!.

Se acercó con fuerza sosteniendo una de las vigas de metal.

-No creo nada de lo que dices,se que lo disfrutaste. Siempre te a gustado demostrar que eres un puto machito.-Unas lágrimas traicioneras bajaron por sus mejillas.
-Dejas de serlo cuando estás frente a los hombres ¿no?.

El masculino tomó con fuerza su brazo terminando de acercarla.

-Deja de pensar que puedes hablarme de esa manera perra,no actuabas igual cuando te tenía en el piso rogandome que me detuviera.-Río secamente.

-¿Qué harás?,¿me golpearas aquí mismo Ben?. ¡Te puedes ir al infierno pedazo de mierda,estaré frente a ti el día que dicten tu sentencia!.-Se solto de su agarre con bastante enojo.

Lo miro una última vez con todo el desprecio y odio que le tenía para comenzar a caminar de regreso con Bill.

-¡Esto no se quedara aquí maldita zorra!,¡no saldré de tu vida tan fácilmente, recuerda mis putas palabras!.

El masculino golpeo con fuerza las rejas,no dejaría que nadie se atreviera a encararlo y menos si se trataba de una mujer. Sentía un odio enorme hacia Ryan por tenerlo en ese lugar y también a Amelie por humillarlo de esa manera en la fiesta de compromiso.

Estaba solo,con Marcus y Mila aún en el hospital y los otros dos presos tendría que actuar por su cuenta. Claro que cumpliría sus palabras,siempre lo hacía.







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Gisselle y Bill quedaron en no hablar de su visita del día anterior. Por más que se negó el pelinegro termino aceptando.

Simone fue a la casa de los Kaulitz por ropa limpia para Tom. La castaña esperaba sentada en la cama mientras que la madre llenaba el papeleo de salida, Bill fue con Georg y Gustav a mover el auto a la parte trasera para evitar a la mayoría de la prensa y fans que estaban fuera del hospital.

Amelie aprecio la ropa que llevaba puesta el guitarrista una vez que salio del baño. Sus característicos pantalones,una sudadera negra floja y por ultimo un gorro del mismo tono que cubria su frente.

𝐔𝐧𝐚 𝐬𝐨𝐥𝐚 𝐝𝐞𝐜𝐢𝐬𝐢ó𝐧; 𝐓𝐨𝐦 𝐊𝐚𝐮𝐥𝐢𝐭𝐳 (EDITING)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora