Capítulo 5

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Capítulo 5 - El día 31 de agosto, 298 años después de la conquista de Aegon


Se acordaron los términos para el envío de una embajada, y en poco tiempo el séquito de Westerosi regresó colina abajo a su campamento, mientras la delegación de la Tierra hacía los preparativos. Al día siguiente, una fila de helicópteros se acercó al Anillo, con gruesos cables atados a la parte inferior.


El terreno inmediatamente delante del Ring se consideró demasiado accidentado para los vehículos. Ya era bastante difícil para los hombres a pie oa caballo. Con el tiempo pudieron despejar un camino, pero hoy necesitaban un método más rápido. Habían reunido nueve helicópteros de transporte para este punto, en su mayoría los viejos Chinooks construidos por Boeing. Cada uno podía levantar las diez toneladas de un Vehículo de Movilidad Protegida Bushmaster completo, capaz de transportar a diez hombres. Eran esencialmente camiones robustos con un emplazamiento de ametralladora en la parte superior. Difícilmente eran tanques, pero servirían.


La compañía de comandos volvería a ser la escolta. Veinte de los vehículos fueron recogidos en pequeños grupos, conducidos a través del Ring y transportados a través del paisaje al otro lado de la carretera cercana. Varios vehículos civiles, automóviles y camionetas, siguieron el mismo camino para transportar al equipo diplomático de treinta personas. Los hombres (y algunas mujeres) de la expedición bajaron la colina y se encontraron allí con sus vehículos frente a los Westerosi cada vez más asombrados.


A media mañana estaban organizados y listos para partir. El séquito de Lord Renly había levantado sus tiendas y también estaba listo. Peter Dutton se acercó al Señor, le deseó buenos días y lo invitó a unirse a él en la parte trasera de su Land Rover asignado. Habiéndose maravillado con la aparición de más máquinas voladoras, el señor accedió de inmediato y entregó su caballo a un criado.


"Esos se ven diferentes al que vimos ayer" comentó, mientras caminaban entre los hombres y carruajes reunidos.


"Sí, esos son helicópteros. Son un tipo diferente de máquina voladora. Los otros son aviones. Son más grandes y más rápidos, pero los helicópteros pueden despegar y aterrizar en un área muy pequeña, muy útil", explicó Dutton pacientemente, con la mano que lo acompaña. movimientos


"Ciertamente..." dijo el señor lentamente, tratando de ocultar su escasa comprensión. Hizo un gesto hacia los vehículos cercanos.


"¿Y qué son estos aquí? ¿Son estos carruajes de metal ? Siento que debes criar grandes caballos para tirar de ellos".


El ministro australiano tuvo que contener la risa. Lo sostuvo en una sonrisa.


"Bueno, en realidad, mi señor, no requieren caballos".


"¿No? Entonces, por favor, ¿cómo se mueven?"


"Bueno, eh..."


Dutton intercambió algunas palabras con el conductor. El joven tiró de una pequeña palanca y se oyó un ligero ruido sordo en el carruaje. El Ministro caminó alrededor y buscó la liberación. El capó subió suavemente. Renly miró fascinado la estructura debajo.

A Song of Guns, Germs and Steel en españolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora