Cony.
Me desperté con un dolor de cabeza inimaginable, ni siquiera abrí los ojos y pensé el desastre que había hecho anoche.
¿Escapar de la casa e ir a una fiesta?
¿A quién se le ocurre eso?
A mí y a... Luna.
La ví con una chica cuando entré a la fiesta con Danielle, estuve varios minutos viendo cómo hablaban muy entretenidamente mientras Dani buscaba los tragos.
No sé porque pero me molestó, me sentí una adolescente que no sabe lo que siente y revuelve sus sentimientos por cualquier persona.
Pero obvio yo no era así, tenía claro que yo, que yo tenía claro que yo...que tomé y tomé sin parar mientras hablábamos con Isaac, el chico que organizo la fiesta.
Después de eso tuve que esforzarme para recordar.
Desearía no haberlo hecho.
Abrí los ojos asustada y me di cuenta de que no estaba abrazando mi almohada, si no que era la cintura de Luna.
No me moví.
¿Por qué estaba durmiendo con ella?
¿Me habrá secuestrado?Tenía sus brazos envolviendo mi espalda e irónicamente tenía mi cara muy cerca de su pecho.
Sentí las mejillas rojas y no sabía que hacer, estaba cómoda, muy cómoda. Pero era Luna, de ninguna manera me quedaría acostada abrazando a Luna.
Levanté la cabeza para verla y se ve que por el movimiento abrió los ojos.
—Buenos días —dijo adormilada y cerró los ojos.
Pasaron dos segundos en los que no supe que hacer, pero abrió los ojos de golpe y me empujó, ella estaba al borde de la cama por que su intento tirarme al suelo le salio mal y fue ella la que terminó en el suelo.
—¡Mierda! Me había olvidado de la obra de caridad que hice anoche —dijo revolviendo se en el suelo.
—¿Que hiciste y porque estoy en tu cama? —pregunté sentándome y todo me dio vueltas.
—Bueno...ya sabes, lo de siempre, una cosa llevó a la otra y puse en práctica el hecho de que te dije que podía controlar bien las dos manos —contó entrelazando los dedos por detrás de su cabeza.
—¡¿Qué qué?!
Empezó a reírse y obviamente me dí cuenta que me estaba molestando.
—Es broma, pero si quieres no es broma —me guiñó un ojo y se levantó—, te caíste a la piscina y te traje al hotel porque no sabía dónde llevarte. Fuiste tan inteligente que ni las llaves tu casa tenías.
—Te hubieras quedado hablando con esa chica en vez de prácticamente secuestrarme —me quejé y me dí cuenta muy tarde lo que había salido de mi boca.
Había empezado a caminar hacia el baño pero se frenó en seco y se dió la vuelta.
—¿Cómo sabías que estaba con una chica? —preguntó y sonrió cruzándose de brazos—, al parecer tengo una acosadora y no lo sabía.
—Te ví al entrar a la fiesta, eso es todo.
—¿Celosa de algo que no es tuyo? —sugirió y abrí la boca indignada.
—Claro que no, no estaría celosa de una persona como tú.
—Claro, se vé que sigues enojada porque el alcohol no te quitó nada de la cabeza ¿Cierto?
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Ganar Su Corazón
Teen Fiction«Todo comenzó por un simple choque» Una mañana una chica iba de camino a la pista de carreras para unas practicas, pero el colmo fue que chocaran su auto por la parte de atrás. La responsable de ese choque era otra chica, una muy linda y que también...