𝐗𝐈𝐈𝐈.

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—¿Qué? Tampoco es para tanto —dijo Taehyung ocultando su pena.

Jungkook se giró y volvió a mirar al cielo.

—¿Nunca has tenido una pareja? —preguntó.

—No —respondió Taehyung removiéndose por la incomodidad.

—¿Nada de nada? —volvió a preguntar Jungkook.

—Eso es lo que implica el "Nunca" —dijo Taehyung.

Jungkook abrió la boca para cerrarla después.

—¿Cuantos años tienes? —preguntó.

Taehyung puso los ojos en blanco ante la pregunta, mientras seguía intentando conseguir una postura más cómoda

—Veintiuno —respondió.

—¿Y no has tenido pareja nunca? —preguntó por segunda ocasión.

—No —respondió Taehyung, ya comenzaba a arrugar el papel con sus dedos —Mis padres... eran demasiado estrictos —una mentira pero sonaba bastante creíble —Quiero decir, de verdad lo son.

—Si, ya veo —Jungkook golpeó el cuaderno del Taehyung con su bolígrafo —¿Así que nunca has tenido una cita ni nada?

Suspirando Taehyung dirigió su mirada a sus apuntes.

—Pensé que veníamos a localizar estrellas —dijo Taehyung queriendo cambiar de tema.

—Y lo estamos haciendo —respondió Jungkook.

—No, no estamos haciendo nada, todo lo que tengo es una línea garabateada y tú ni siquiera tienes eso —alegó Taehyung.

—Esa línea "garabateada" conecta la Delta y la Gamma —se inclinó hacia él y unió dos puntos —Aquí está Theta y Alpha, la estrella más brillante, ves ya hemos hecho la mitad.

Taehyung frunció el ceño mientras miraba al cielo, siguiendo el diseño de las estrellas y Jungkook tenía razón.

Entonces Jungkook se volvió a inclinar, su hombro presionaba el de Taehyung mientras dibujaba una línea perfecta en otro punto del mapa. Se giró para mirarlo.

—Ves, ya hemos acabado de localizar estrellas —dijo Jungkook.

Taehyung contuvo el aliento, sus caras estaban a escasos centímetros de distancia. Sus ojos se detuvieron en sus labios, se curveaban hacia un lado y le empezaba a asomar un hoyuelo en la mejilla, comenzaron a moverse, pero Taehyung no escuchaba ni una palabra de lo que estaba diciendo. Quería alejarse, pero... La verdad es que no quería. Comenzó a sentirse muy confuso, mientras intentaba no apartarse..., pero tampoco acercarse a él.

Taehyung se obligó a levantar la vista, no quería parecer un pervertido, y vaya que se había equivocado, ya que ahora se había quedado perdido en esos ojos tan negros como la noche que hasta hace un momento admiraba. Seguro que había un sendero lleno de bragas quitadas a donde quiera que fuera Jungkook.

Volvió a removerse sin ser capaz de recordar cuando fue la última vez que se había sentido de esa forma, como mínimo desde la fiesta de Halloween, quizás antes.

Había algo en Jungkook que hacía que se olvidara de todo, excepto de lo que estaba ocurriendo ese mismo instante.

—¿Me estás escuchando? —dijo Jungkook.

Taehyung parpadeó con lentitud.

—¿Qué? Si, si claro.

Jungkook sonrió con complicidad, y Taehyung solo quería esconderse bajo un arbusto.

𝐘𝐨 𝐭𝐞 𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐚𝐫𝐞́.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora