𝐋𝐕𝐈.

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⚠️⚠️⚠️ESTE CAPÍTULO TIENE CONTENIDO EXPLÍCITO SI NO TE GUSTA FAVOR DE PASA AL SIGUIENTE CAPÍTULO Y ABSTENTE DE MALOS COMENTARIOS ⚠️⚠️⚠️

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Mientras cenaban, Taehyung le había contado a Jungkook la conversación que había tenido con sus padres. Pensó que iba lanzar el cuchillo contra la pared cuando le contó la actitud que había mostrado su madre.

—De verdad —dijo Taehyung —No me sorprende, siempre ha sido un poco fría y ha empeorado con los años.

Jungkook apretó la mandíbula.

—Eres mejor persona que yo —dijo Jungkook.

Taehyung se encogió de hombros, pensando en que Jungkook no diría eso si escuchara sus monólogos internos.

—Me alegro de haber hablado con ellos. ¿Y papá? Todo eso de la música era para mostrarme que se arrepentía de algún modo. Por lo menos comprendió de qué estaba hablando, ¿sabes?

Jungkook asintió.

—¿Y como te sientes ahora? —preguntó.

—La verdad es que no siento nada. Quiero decir, ya te digo que estoy contento de haberlo hecho al fin. Es como ir al dentista. No quieres hacerlo, pero sabes que tienes que hacerlo y después te alegras de haber ido —dijo Taehyung.

Jungkook se inclinó sobre la mesa y cubrió su mano con la suya.

—¿Todavía quieres ir a ver a Minho mañana?

—Sí, todavía quiero ir a verlo —respondió Taehyung.

Había revisado su correo electrónico después de haber comprado los boletos, buscó un correo de Minho y le mando un breve texto diciéndole que iba a estar en la ciudad y que quería verlo, le había respondido en menos de una hora diciéndole que sí.

Jungkook miró a otro lado con la mandíbula tensa. No le parecía una buena idea, pero lo apoyaba después de todo. Ese era uno de los momentos en los que Taehyung se daba cuenta de lo afortunado que era al haber chocado con él yendo a clase de astronomía. Necesitaba recordarlo más a menudo.

Y lo necesitaba a él, de verdad que lo necesitaba.

No quería seguir hablando de sus padres o de su próxima visita a Minho. Quería enseñarle a Jungkook lo mucho que lo deseaba. No porque pensara que eso era lo que esperaba de él, si no porque él mismo lo quería.

—¿Listo para volver? —le preguntó Taehyung con el corazón acelerado.

Pagaron la cuenta y volvieron al hotel. Todavía era pronto y había un montón de cosas que Taehyung quería mostrarle a Jungkook, pero quería aprovechar el tiempo con él. No quería compartirlo.

Jungkook se sentó al borde de la cama, quitándose la gorra mientras trasteaba con los botones del control a distancia. Taehyung había corrido las cortinas del ventanal y solo entraban unos débiles rayos de sol.

—Voy a darme una ducha rápida —dijo Taehyung tomando sus cosas de aseo y se dirigió al baño.

Jungkook lo miró fijamente, abrió la boca y después asintió. Una luz extraña brillaba en sus ojos. Sonriendo Taehyung se metió al baño, dejó el neceser en el lavabo, no se había llevado ropa para cambiarse y se preguntó si Jungkook se habría fijado en eso.

Y si se había fijado, ¿en qué estaría pensando?
¿En lo mismo que él?

Se dio una ducha rápida, para quitarse el inevitable olor del avión. Utilizó ese tiempo para borrar de su mente la conversación que había tenido con sus padres. Cosa que no le costó mucho. Sus latidos estaban ya acelerados y todo sus ser estaba concentrado en ese azabache.

𝐘𝐨 𝐭𝐞 𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐚𝐫𝐞́.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora