Si Te Grito En Silencio.

Por verte sonreír.

Era sábado,aunque la temperatura era bastante baja hacia un fantástico día soleado, Kate se arreglaba para su salida con Daniel a la colina,no había pegado ojo en toda la noche,después de irse Daniel Kate a pesar de estar muy cansada no podía dormir sin intentar disipar sus dudas,buscó información en internet sobre Domenech y tras mucho buscar porfin encontró un reportaje en el periódico.

En la portada del periódico local se anunciaba su muerte en el lago,no habían muchos detalles,pero sí explicaban que había sido un asesinato debido a las muestras de forcejeo que había en la zona y a la profunda herida que había en su pecho hecha probablemente por un puñal.

También explicaba que la policía había cerrado el caso por falta de pruebas ya que nadie en el pueblo parecía tener nada en contra del hombre, el llevaba una vida normal,no encontraron nada relevante entre sus pertenencias y tras haber varios asesinatos similares en el centro de Noruega la policía pensó que se trataba de un asesino en serie y adjuntaron su caso a los otros,quedando así el caso en manos del cuerpo federal de policía noruego.

Kate había pasado hasta altas horas de la madrugada buscando información pero no encontró nada más, también aprovecho para buscar alguna tienda de electrónica por la zona donde poder comprar un cargador para el ordenador de Domenech y encontró que a las afueras del pueblo había una pequeña gasolinera donde vendían cargadores de teléfono, tarjetas de memoria etc.. para los turistas o la gente que pasaba por allí rumbo a otro lugar,pensó en que el lunes se acercaría para preguntar si tenían, si no no le quedaría otra que ir a Noruega porque ya no había nada más por la zona.

Kate terminó de arreglarse, se puso unos vaqueros azul claro y sus converse negras, junto a un jersey fino de punto negro que dejaba su hombro al aire, encima de una camiseta blanca de tirantes también dejó su pelo suelto cayéndole en cascada por la espalda hasta su pequeña cintura.

Daniel esperaba a Kate en su puerta apoyado en un deportivo rojo descapotable, iba vestido con una camiseta de manga larga gris y unos vaqueros pitillo negros cuando Kate salió éste la esperaba con una gran sonrisa.

- Por favor Dan dime qué lo del coche es por impresionarme y que vamos a ir andando.

- Jajaja, podemos ir andando si quieres pero espero que hayas traído calzado cómodo porque la colina está bastante lejos de aquí. - Daniel sonreía seductoramente.

- Bueno.. tal vez si me prometes que no vas a correr.. quizás y solo quizás te deje que me lleves - Kate se acercó sonriendo a Daniel a medida que iba pronunciando las palabras de forma pausada, entonces cogió las llaves del coche de las manos de Daniel e intento salir corriendo pero éste más rápido que ella atrapó las suyas y de un pequeño tirón la acercó a su cuerpo para luego rodearla por la cintura con ambas manos haciendo que quedarán rozando sus narices y quedándose el con las llaves

-¿Ibas a robarme kate? -Susurró Daniel sonriendo travieso

- Quizás... Solo te estuviera tomando el pelo..quizás.. ame la velocidad..y quizás.. uno de mis sueños siempre fue conducir un coche así..-Kate hizo un pucherito -¿Me dejas conducir porfis?. - Kate ladeó la cabeza haciendo un nuevo pucherito.

Daniel sonrió aquella chica lo iba volver loco,se acercó más a Kate rozando su nariz con la de ella, Kate fijo sus ojos en los labios de Daniel, no se había percatado de lo cerca que estaban entonces Daniel atrapó los labios de Kate entre los suyos depositando un suave beso y succionando su labio inferior, Kate rodeo su cuello con ambas manos y contestó al beso cerrando los ojos.

Fue un beso corto y suave,nada parecido a lo que Kate había experimentado con Nick. Daniel no besaba con intensidad ni con agresividad, su beso era cariñoso,lento y delicado. Entonces Daniel miro los verdes ojos de Kate y sonrió, ella bajó sus manos al pecho de él y esbozó una sonrisa algo avergonzada.

-No puedo negarte nada si me lo pides "porfis". - Daniel sacudió sus llaves en lo alto de la cabeza de Kate y ésta dio unos saltitos acompañados de unas palmaditas y cogió las llaves.

- Oh muchas gracias eres un amor Dan. - Dijo Kate depositando un beso en su mejilla.

Ambos se montaron en el deportivo y Daniel indicó a Kate el camino, arrancó y puso el coche a toda velocidad gritando yuhuu y levantando su mano hacia el cielo,Daniel sonrió pensando que esa chica definitivamente estaba loca,conducía como un camicaze, iba a una velocidad vertiginosa y Daniel no podía dejar de mirarla, su pelo volaba al compás del viento dejando su cuello al descubierto, su sonrisa era blanca, pura,perfecta aquella chica era preciosa le encantaba..

En cuanto se quisieron dar cuenta habían llegado, Kate bajo la velocidad hasta parar el coche.

-Ha sido..¡Alucinante! muchísimas gracias Daniel, nunca voy a olvidar este día.- Kate sonrió y le dio las llaves del coche a su dueño.

- Ha sido un placer..No sabía que tenías carnet - Dijo Daniel devolviéndole la sonrisa.

- No lo tengo - Kate bajo del coche subiendo por la colina y dejando a un confuso Daniel aún montado en el coche.

Daniel bajó rápidamente y se acercó al lado de Kate en lo alto de la colina.

- Kate..¿Te das cuenta de que soy el alcalde y acabo de dejar mi coche a una loca temeraria que iba a gran velocidad por el pueblo y sin carnet? -Kate miro como Daniel la veía levantando una ceja.

Kate sonrió tímidamente un poco avergonzada, quizás debería haberselo dicho pero la oportunidad de conducir ese coche la había cejado. Aún recordaba con cariño los días en los que su abuelo le dejaba el coche por el campo cuando tenía 9 años y apenas llegaba a los pedales de no ser por una silla de seguridad que el le ponía en el asiento.

Eran pocos los momentos en los que había disfrutado de su compañía, siempre estaba muy ocupado trabajando o demasiado cansado pero los domingos hacia el esfuerzo e intentaba pasar el rato con ella para conocerla mejor.

Por un momento en aquel coche se sintió como en aquellos domingos que pasaba con su abuelo en el campo. Cuando él murió nunca volvió a ir y era algo que realmente extrañaba y ni siquiera lo sabía. El rostro de Kate se tornó algo triste por los recuerdos y Daniel lo noto cogiendo su mano.

- Era una broma Kate.. puedes coger mi coche siempre que quieras, eso sí, si te para la policía diré que me diste una paliza y me robaste las llaves. - Daniel señaló a Kate con el dedo advirtiéndole, ella sonrió y lo abrazó.

Daniel contestó el abrazo sonriendo, cuando vio como su cara se entristecía sintió una punzada en el estómago,había conseguido hacerla reír y eso extrañamente hacia que se sintiera lleno.