El rostro del impostor

Capitulo 44

Flashback:

Era un día normal en el patio de la escuela. Niños jugando en los columpios y disfrutando de la compañía de sus amigos, niñas compartiendo sus almuerzos y hablando de lo bien que se les vería la nueva cartera de Barbie a cada una. Sí. No pasaba nada fuera de lo habitual, excepto po el hecho de que en cierta parte alejada del patio se encontraban una pequeña cantidad de alumnos que parecían observar con disfrute lo que sucedía en aquel punto.

-¡Ya dejénme en paz! -Pedía a manera de súplica la pequeña niña que era molestada por sus compañeros.

-¿O qué? ¿Nos vas a acusar con tu papá? ¿El que te abandonó? -Todos se echaron a reír por su comentario, Excepto la pequeña peli rubia que se aferraba a sus piernas y sollozaba levemente- ¡Miren! ¡Amber es una llorona! ¡JaJaJa!

Las críticas, burlas y comentarios sobre la familia Brown comenzaron a tener consecuencias sobre los más pequeños, quienes, como pueden ver, sufrían de maltratos, tanto físicos como psicológicos.

Amber (6 años): ¡Ya basta! ¡Paren!

Sin embargo, sus pequeñas súplicas, no lograban hacer que sus compañeros se detuvieran. La lastimaban.

-¡Oigan! -Se escuchó la voz de alguien diferente, por lo que tofos voltearon a ver al sujeto y resultó tratarse de joven de cabellos rebeldes, ojos color rubí y mueca molesta- ¡Alejénse de mi hermana!

Todos se sorprendieron al ver al pequeño rubio pararse frente a la pequeña, extendiendo sus brazos imitando una pose de protección.

- ¡Si vuelven a molestar a mi hermana, juro que los mataré! -Exclamó el pequeño.

Por supuesto, aquel juramento no sería cumplido por él, pero eso era algo que los demás no sabían, por lo que, temerosos por que cumpliera su palabra salieron corriendo.

-¿Amber, te encuentras bien? -Se acunclilló para verificar aquello. Sin embargo, cuando lo hizo obtuvo la mirada llorosa de la muchacha sobre sí.

Amber: ¡Hunti! -Exclamó, aún entre lágrimas, aferrándose al pequeño rubio- Hermanito...

Hunter (10 años): Tranquila Amber, esos chicos no volverán a hacerte daño.

Amber: Hunti... -Lloró sin parar.

Hunter: Tranquila. Nadie te hará daño mientras yo esté contigo. -La consoló- Yo te protegeré, incluso con mi propia vida.

Fin del flashback.

En ese momento, aquellas palabras quedaron más que olvidadas en el pasado para aquella mujer.

Hunter: ¿Qué haces, Hermana? ¡¿Qué demonios crees que haces?! -Preguntó enojado y nervioso al sentirse apuntado con aquella arma.

Amber: Protego lo que es mío. -Dijo con simpleza- Ahora, si no te molesta, podrías bajar el arma y dejar de apuntar a Luz? Por favor...

Le sorprendió.
Aquellas palabras fueron muy distintas a lo que realmente tenían en mente. Tal vez, no lo quería creer, ni mucho menos aceptar, pero su propia hermana lo estaba traicionando.

Hunter: ¿Qué? acaso... ¡¿No eras tú la que me dijo que queria destruirla?! ¡¿Verla sufrir?! -Le recordó sus palabras en un intento inutil de hacerla entrar en razón- ¡¿No lo recuerdas?! ¡Ella te destrozó!
¡Te lastimó! ¡Merece morir!

Amber: No. En realidad no quiero eso. -Dijo- Solo lo dije para poder tenerte controlado y así, no actuaras por tu cuenta. No queria que la lastimarás.