El rostro del impostor

Capítulo 19

Su esposa la había amenazado con mucha seriedad al enterarse de que se saltaba las comidas, asique Luz sabía que debía acatar cualquier orden de inmediato porque si no, la cosa se pondría fea.

Se levantó finalmente, pero lo primero que hizo fue agarrar su celular que se encontraba en aquella mesita de noche junto a su cama y se percató de que tenía un nuevo mensaje.

El mensaje decía:
Me sorprende que hayas pérdido tu oportunidad de llegar a la verdad, solo por una noche con ella.
sr. Búho.

Luz vió muy extrañada aquel mensaje y para ser sincera se podría decír que un poco enojada.

Luz: ¿Qué significa esto? Acaso este maldito nos está espíando?-se preguntaba a sí misma mientras buscaba con la mirada alguna cámara en la habitación.

Como era de esperarse, no encontró nada. Sin embargo, recibió una llamada justo en el instante que terminó de buscar.

Luz: explícame ¿Qué quieres decír con aquel mensaje? -dijo apenas y contestó la llamada- Acaso me espían? ¿pusieron cámaras en mi habitación?

Sr. Búho: Para nada. Nadie te espía y mucho menos pusimos cámaras en tú habitación.-respondió muy sereno- pero por otro lado, a mí también me gustaría preguntar algo -no recibió respuesta, pero de igual manera prosiguió- ¿Dejarás de lado el saber tu verdad, solo por una noche en celo con tu esposa?

Luz: ¿Que dices?

Sr. Búho: lo repetiré. ¿dejarás de lado el saber tu verdad, solo por una noche en celo con tu esposa?-repitió sin problema alguno y casi con sarcásmo.

Aquellas palabras lograron enfurecer a Luz. Acavaban de meterse con su esposa y eso es algo que no toleraría a nadie.
Y Fuera quién fuera aquel hombre, no lo dejaría pasar.

Luz: ¿Cómo te atreves a decír eso?!-dijo apretando los puños- Estas hablando de mi esposa!! ¡Mi esposa! nada me importa más que ella y mi hija.
No te atrevas a vólver a mencionarla, porque prometo que descubriré quién sea que seas y te destruiré.

Luz nisiquiera colgó el celular, solo esperó. No hubo respuesta por un momento, pero si se escuchaba un ligero respirar del otro lado de la linea.

Sr. Búho: Lo siento.-dijo finalmente- Me dísculpo por lo que dije. No era mi intención hacerte enojar.

Aunque Luz no podía verlo, pero  por su tono de voz podía reconocer que realmente se arrepintió por aquellas palabras.

Luz: Dime ¿Qué otro acertijo tienes para mí?-preguntó un poco más calmada- porque estoy segura de que no me llamaste por nada.

Sr. Búho: Claro-dijo recordando lo que diría- Deberías saber bien con quién te involucras. El enemigo está muy cerca de tí y apenas puedes percibirlo.

Luz: ¿Qué tan cerca?

Sr. Búho: Lo suficiente como para atacar en cualquier momento y acabar contigo en el instante en que lo haga...-habló con mucha seriedad.

Luego de eso, la llamada fue cólgada dejando a la morena un poco pénsativa por aquella información. Sin embargo, decidió dejar el asunto por el momento, ya que su esposa la esperaba abajo y debía ir apenas terminara de bañarse.

Al cabo de media hora, Luz había terminado de ducharse y de cambiarse de ropa y estaba en camino a la cocina dónde se encontraba la hermosa pelimenta.

Luz: ¡Oh Vaya!-exclamó sorprendida al ver aquella mesa con varios platillos en ella- preparaste todo un banquete.

No, Luz no había exagerado al decír que era un banquete. Realmente habian muchas cosas en aquella mesa como: Huevos revueltos con jamón, tostadas con mermeladas y otras con mantequilla, queso y jamón. Una pequeña cesta de pan era el centro de mesa, jugo de naranja, café y leche en varios vasos y tasas, entre otras cosas más.