POV Alexia
Fue sin ninguna duda uno de los peores momentos de mi vida. Se había terminado. Se me había ido a la mierda todo lo conseguido. Me perdería la Eurocopa, la temporada que viene... Me perdería una temporada después de haber estado en mi mejor estado físico. Al romperme noté como aquella Alexia que levantó la Champions en Göteborg, como aquella Alexia que jugó en el Camp Nou ante más de 91.000 personas, la Alexia que tenía un balón de oro se iba. Iba a ser otra Alexia y eso me creaba nostalgia.
Sara me acompañó en todo el proceso. Aún quedaba la operación, pero no quería arrastrarla conmigo a todas partes. No quería que me viese débil y decidí distanciarme un poco para que no pudiera verme en esa situación. Ella se había enamorado de aquella Alexia que era la mejor jugadora del mundo, pero yo ahora mismo no llegaba ni al talón de la que fui hace algunos meses.
- Alexia, te estás cerrando en banda. Sé que es difícil asimilar lo que te está pasando, pero no te reconozco y eso me preocupa – había venido a mi casa para ver que tal estaba.
- Pues si no me reconoces, no sé qué haces aquí. Lo único que haces al preocuparte por mí es distraerte de tu trabajo – dije al sentarme en el sofá y encendiendo la tele.
- Ahora tú eres mi trabajo. ¿Te lo vuelvo a recordar? El club me ha puesto como tu fisio personal.
- Sabes que puedes rechazarlo, ¿verdad?
- Pero no lo haré, no quiero hacerlo.
- Pues eres una tonta si prefieres estar conmigo antes que ayudar al equipo a ganar partidos. Además, estoy considerando el dejar el futbol y ser entrenadora.
- Alexia, puedes dejar de comportarte como si tú no valieses nada. Ahora mismo eres lo más importante para mí. Y ya te digo yo que no dejas el fútbol, antes prefiero morir – dijo poniéndose delante de la tele, obligando a juntar nuestras miradas – Estás sintiendo dolor, lo sé, pero tienes que dejar de tener esos pensamientos.
- No gastes tu energía en mí. Ahora mismo soy una jugadora que no puede trabajar por la puta rodilla. No puedo vivir así. Tú mejor que nadie sabes que el futbol es mi vida, no soy nada sin el futbol.
- Alexia Putellas no solo es futbol, Alexia Putellas es la persona que tengo delante. Alexia es la persona que me apoyó cuando discutí con mi padre, es la persona que hace que tenga ganas de ir a la ciudad deportiva todos días. Eres la que siempre me saca una sonrisa, la que hace que me sienta cómoda siendo yo misma, la que me hace ser feliz por primera desde hace mucho tiempo. Y esta actitud que tienes desde que te lesionaste no es propio de ti. Sé que lo único importante para ti es el futbol, pero tienes que aprender a vivir sin él. Estás obsesionada por derrotar a las rivales, por mejorar tu rendimiento... Pero tienes que aprender a desconectar. Utiliza esa energía para mejorar mentalmente. Las personas a tu alrededor estamos haciendo lo posible para que estés bien, pero lo único que haces es enfadarte con todos y decir que eres una mierda.
- No lo entiendes...
- CLARO QUE LO ENTIENDO, TE RECUERDO QUE YO TAMBIÉN HE PASADO POR ESTA LESIÓN – dijo enfadada, sin poder aguantar las lágrimas – Piensas que no podrás superarlo, pero teniendo ese pensamiento no llegarás a ningún sitio. Eres la mejor jugadora del mundo y te has lesionado, pero porque no aprovechas este tiempo para mejorar como persona. Vas a ser dependiente durante un tiempo, pero aprovéchalo para estar con las personas que más quieres.
- Nunca volveré a estar al mismo nivel. He trabajado duro para luego que... Tirarlo todo por la borda – dije desviando la mirada.
- Ese es el pensamiento que tienes que evitar. Sigues siendo la misma Alexia, eres la misma de la que me enamoré, pero estás obsesionada con ser la mejor como futbolista. Alexia ya eres la mejor...
- NO, NO LO SOY. CON ESTA PUTA LESIÓN NO SOY NADA.
- Siempre serás la mejor, para mí nunca dejarás de ser la mejor. Me apoyaste en mis peores momentos y yo estoy intentando hacer lo mismo, pero no me dejas ayudarte.
- No necesito tu ayuda.
- Entonces no sé qué hago aquí... - dijo con lágrimas entre ojos – Alexia, yo te quiero mucho, pero si no me dejas ayudarte, no puedo hacer nada más – me beso en la frente – Estaré dispuesta a hablar cuando quieras, pero hasta entonces te doy las gracias por los momentos vividos.
Se levantó y se fue. Que me estaba pasando. Empecé a llorar sin saber por qué. ¿Qué acababa de hacer?
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Te lo voy a volver a preguntar...
RomanceSara es una fisio cuya hermana trabaja en el FCB como CM del equipo femenino. Un partido, una cena y una mirada cambian su vida y decide aceptar ir a vivir a Barcelona. Ahí se encontrará con un pasado que la traumó, un presente que la apoya hasta la...