Mi vida en Nueva York no siempre fue una mierda.
Al principio las cosas salieron bien, tal como yo esperaba. Llegué al dormitorio nuevo y fui amablemente recibida. Comencé inmediatamente mis clases de inglés, al igual que mis prácticas en la nueva academia de danza. Sobre la escuela, las fechas de inicio de clases en Estados Unidos y Corea no calzan, así que asistiría un par de meses cuando iniciara el siguiente año escolar, pero sería solo por diversión y para vivir la experiencia, ya al volver a Corea asistiría a la escuela como correspondía, así podría estar con Tzuyu, Dahyun y Chaeyoung en el último año.
La academia nueva era muy exigente, en un principio me costó ajustarme al ritmo, pero con un poco de practica extra, pude alcanzar el nivel de mis compañeros. La academia era enorme y tenia a disposición salas extras en las que podías practicar fuera de horario de los ensayos oficiales, y como yo tenía bastante tiempo libre, lo usaba practicando durante horas. El resto del tiempo que me quedaba lo usaba para hablar con mi familia, mis amigas y con ella.
Durante meses, todos los días, hacíamos una videollamada, aunque fuese corta, para hablarnos y vernos. Mentiría si dijera que cada segundo pensaba en ella, porque muchas horas del día estaba pendiente de nada más que la danza, pero la mayor parte del tiempo en que no estaba en la academia, si pensaba en ella y la extrañaba como no tienen idea. Ver su hermoso rostro en la pantalla apaciguaba un poco mi sentir, escuchar su risa alegraba hasta mi peor día. Escuchar sus "te amo" cada mañana hacían que empezara bien mi día. Había una diferencia de 11 horas, así que eran mis mañanas y sus noches cuando podíamos hablar con mayor libertad, aunque a veces me llamaba entre sus clases, que justo coincidía con la hora en la que yo volvía a casa por la noche.
—Tienes los ojitos cansados, amor —me dijo con un puchero.
—Es la luz —me excusé, aunque realmente estaba cansada.
—Amo hablar contigo, y realmente me gustaría tenerte aquí dos horas más, porque quiero seguir escuchando cómo es que tu amiga Amy terminó en el hospital por comer un hotdog en mal estado, o lo que sea que tengas para contarme, pero quiero que, si realmente estás cansada, vayas a darte una ducha y te acuestes pronto a dormir —dijo con seriedad.
—Fue un día agotador —admití.
—Ya ves, no puedes mentirme Myoui.
—Quería hablar un poco más contigo —mi turno de hacer un puchero.
—Mañana, cuando despiertes, yo estaré esperando para que hablemos —acercó su cara a la pantalla, mientras sonreía, se veía chistosa, linda, pero chistosa.
Reí.
—¿No ibas a juntarte con Dahyun y Tzuyu a estudiar?
—Sí —rodó los ojos—, pero tengo prioridades, Mina, tú eres mi prioridad, puedo tomarme un descanso del estudio por un rato.
—No quiero que descuides tus estudios.
—Te envidio tanto por no tener que estar pendiente de la escuela.
—El próximo año seremos compañeras, ¿te imaginas nos toca en el mismo salón?
—Sería un sueño, pero en ese caso sí que no podría concentrarme en clases, no dejaría de mirarte.
—Ni yo a ti, y nos enviarían juntas a detención por no prestar atención.
—Y no podríamos ir al club, y Jihyo nos mataría.
—Amor, el próximo año Jihyo no estará en la escuela.
—Ah, tienes razón... ¡Tendremos que buscar nuevos miembros!
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Malentendido 2 (Michaeng)
عاطفية¿Habrá tiunfado el amor sobre la distancia en la relación de Mina y Chaeyoung? Las cosas no siempre salen como uno lo espera y nos toca enfrentar diversas adversidades. Lo importante es nunca soltar la mano de quienes nos aman. Mina tiene mucho que...