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Se sentía mareado, abrazando la camisa de aquel alfa, no sabía cómo llegó a aquella extraña y enorme habitación, pero el aroma era tan tranquilizador que hacia que su cuerpo este relajado, acomodando a gusto las prendas como poniéndose otras para ...

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Se sentía mareado, abrazando la camisa de aquel alfa, no sabía cómo llegó a aquella extraña y enorme habitación, pero el aroma era tan tranquilizador que hacia que su cuerpo este relajado, acomodando a gusto las prendas como poniéndose otras para sentir el aroma más cerca de su cuerpo.

Cerró sus ojos complacido, de su nido, tenía un espacio considerable, no acupaba toda la cama, pero podia acomodar tranquilamente el lugar a sentoras seguro, abrazo la almohada, frotándose contra esta, como apoyando sus manos en momentos sobre su vientre, ardía, dolía y le daba cierta sensación de molestia el echo de estar lubricando.

——Huele diferente... -susurró, estaba acostumbrado a usar las ropas de su hermano ou del militar, principalmente del militar ya que su hermano al estar trabajando no podía darle todo su ropa.

Gruño bajo al no sentir el aroma de ninguno de los dos, gustaba mucho pero se calmo rápidamente al esconder su rostro el otro almohada, agradable, delicioso y relajante.

Comenzó a dar vueltas en la cama, mientras miraba con ojos borroso todo al rededor.

——¡HerMaaaAaaNOoooooo! -se removió molesto ante la caliente que se sentía su cuerpo.

Al no escuchar respuestas chillo con dolor, para luego sentir lágrimas asomarse sobre sus ojos, puto celo de mierda.

——Cuan...cuando pueda los mataré a todos... -grupo bajó, para luego suspirar deprimido, estaba solo como un perro.

Todo era culpa de los comunistas.

Todo culpa de los judíos.

Ahora tendrían que vivir la fuera cual tormenta fuego.

——¡Tengo hambreeeeEeee! -se removió más asta caerse de la cama, mirando todo al rededor con enojo. ——¡Me duele! ¡Llamen a un cura! -talvez ya estaba alucinando, mientras se tocaba el vientre y trataba de pararse cayendo su rostro contra el piso quedando en cuatro. ——Hermanito...prometo portar me bien, por favor vuelve... -las lágrimas comenzaban a acumularse sobre sus ojos, mientras sentía su nariz derramar leves mocos.

No supo cuando comenzó a llorar, mientras trataba de subirse en la cama nido que abría echo, era doloroso mover su cuerpo, mientras sentía cada punsada sobre su vientre, como si lo estuvieran apuñalado una y otra vez en esa región.

Sentía su cuerpo devil.

——Tu ni estándares debía tener... -susurró, recordando las palabras del tricolor. ——Soy un asco, soy un estúpido. ¡Solo quiero a papá! -golpeo el piso sintiendo el dolor sobre su cuerpo. ——¡Papa ich vermisse dich! ¡Bitte komm zurück! ¡Du bist nicht tot! Bitte.../¡Papa te extraño! ¡Por ahora regresa! ¡No estas muerto! Por favor.. -usurro, sintiendo como todo se volvía cada vez más borroso.

Sintió su cuerpo caer completamente, haciendo como mirar debajo de la cama, oscuro.

¿Por se volvía tan sensible en su celo?

Omega imperfecto. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora