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——Parece que no te importara, te estas alejando de nuevo, no quiero que se repita aquello

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——Parece que no te importara, te estas alejando de nuevo, no quiero que se repita aquello.

——Tercero, te dije que estoy ocupado.

——Ya llevas mucho tiempo ocupado, Weimar, ¿Cuando más estaremos en esta situación?, me preocupa tu alimentación y como estas actuando con la situación.

El tricolor suspiro con calma se, tenía demaciado estrés acumulado.

——Solo preocupate en ser un buen Omega, ¿Ya dejaste de vagar y comenzar a buscar una pareja? -al notar la negativa, gruño en enojo. ——¡¿Estas esperando que yo haga todo?! ¿¡As vendido asta mi jodida Oficina a solo quejarte!? ¡Tercero debes actuar como un buen Omega si quieres una pareja y un cachorro, y ya pasaron dos jodidos años!

——Yo...simplemente no se como comenzar, estoy tratando de mejorar...eh mejorado mucho con preparar postres y dulces, preguntale a Schutzstaffeln (SS), el te lo puede confirmar.

——Crees que con unos dulces lograrás tener un Alfa.

El silencio mantuvo, el Omega agachó la cabeza, mientras sentía su cuerpo temblar, leves lágrimas comenzaron a acumular para deslizarse sobre sus ojos, ¿Eso era una voz de mando?

——Lo siento...lo siento...tengo miedo, no quiero ir a esas escuelas, pero tampoco quiero que te alejes hermano...perdon, trataré de cambiar, pero no hagas eso de nuevo...

El alfa, suspiro, se abría pasado y sin darse cuenta uso aquello que no debía, no sabía que hacer, ¿Debia acercarse y calmarlo?

——Espero una mejora muy pronto, deja de vagar y ponte a actuar como un buen Omega, ahora veo que la voz de mando si te afecta mucho, como a un Omega normal, al parecer no eres tan raro como pensé. -sonrió suavemente, acarcando su su mano, la cual fue rápidamente alejada. ——¿Que sucede?

——No...no soy un perro para que hagas eso Alemania naz*, lamento interrumpir en ti tiempo. -susurró, tratando de calmar su cuerpo y mente. ——Con su permiso me retiraré.

Dicho aquello salió de la habitación, con sus pasos torpes, lentos sin verse ridículo.

——Papá... -susurró para si mismo, para salir de las instalaciones, sus pasos lentos mientras caminaba por las calles de Berlín.

Todo cambio a bién, la gente se veía alegre y trabajando, los niños corrían de un lado a otro siendo cuidados por los Omegas y betas.

——¡Omega Tercer Imperio por favor podría responder algunas de las dudas sobre los movimientos y los discursos que a dicho!

——¡¿Van a intentar intervenir en causa de los los judíos que se niegan a entrar al registro militar obligatorio?!

——¡¿Se podrá acabar con el Tratado de Versalles?!

——¿Tiene pensado en iniciar una relación con el uno de los “polocias”? ¡Ese Rubió del cual se informa que lo vio salir!

Oh, abría olvidado las noticias, rápidamente salió corriendo, en busca de no ser acorralado, menos con los ojos levemente inchados por su estúpido llanto, sus pasos fueron torpes al tratar de escapar, para finalmente esconderse en un callejón.

Omega imperfecto. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora