15: reparando errores

367 55 9
                                    

Es un nuevo día de universidad, los pasillos que suele recorrer, ahora son más hostiles

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Es un nuevo día de universidad, los pasillos que suele recorrer, ahora son más hostiles. Ella puede sentir las miradas puestas en su actuar, y sabe que muchos conocen todo lo que ha pasado con ella y Eddie, aunque el hecho de no ser demasiado comunicativa le juega a favor. Con sus audífonos encuentra paz, escucha Michelle de los Beatles, su disco preferido es el Rubber Soul, aunque repudia la letra de Run For Your Life, escrita por Lennon.

Sus compañeros, que alguna vez compartieron risas y charlas con ella, la miran con expresiones olvidadizas, como si una vez cercana, ahora fuera una completa desconocida. Las conversaciones entre amigos, cesan, cuando ella se acerca, y los rostros que alguna vez le sonrieron ahora evitan su mirada. Florence, que solo busca pasar desapercibida, siente el peso de la indiferencia y la soledad en cada paso.

Mientras intenta integrarse en su rutina, Florence se enfrenta a la realidad de que la farsa con Eddie Munson ha dejado su marca. La universidad, que solía ser su refugio, se ha convertido en un recordatorio constante de las consecuencias de haber jugado a ser la novia falsa de una estrella de la música.

{...}

Eddie está sentado en una esquina, su postura refleja lo horrible de sus decisiones recientes que han afectado no solo su vida, sino la de aquellos a su alrededor. Willy, visiblemente molesto, se acerca para tratar la situación.

Willy, con gestos y palabras que denotan su desaprobación, regaña a Eddie por sus acciones. La esquina se convierte en una especie de lugar de la vergüenza, donde la realidad de las consecuencias comienza a carcomer la conciencia de Eddie. En el ambiente hay temor y remordimiento.

—¿Qué demonios estabas pensando, Eddie? Arruinaste todo— analiza la situación—Es que lo pienso y no me creo que seas tan idiota.

—¿De qué estás hablando, Willy? Fue solo una farsa, ¿no? Florence claramente quiere vivir su vida real, con ese chico...— lo dice molesto, recuerda aquella escena.

—¡Claro que sí, pero las farsas tienen consecuencias reales! Florence está sufriendo por esto, y tú también.

—¿Yo?¿Sufrir?— bufa— Por Dios— Willy lo mira enfadado.

— Aunque lo niegues estás celoso, o al menos algo, y la verdad es que no pienso reírme de ti por esto. Me interesa que Flo vuelva. Mejorar tu imagen no significa destruir la vida de alguien más. Florence no merecía esto, independiente de si ella besaba a alguien más, lo que hiciste estuvo mal.

—No lo vi venir, Willy..—Eddie da un argumento que parece molestar más al hombre.

—Necesitas entender las repercusiones de tus acciones, Eddie...

—Bueno de todos modos, esa chica, ¿Sienna? fue una cosa sin sentido, algo que no volverá a ocurrir.

—. Tienes que volver a buscarla, aclarar las cosas. Debes ir a esa fiesta con ella, sí o sí. Deben volver a verlos juntos.

lavender haze , Eddie MunsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora