D I E C I S I E T E

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Monkey D. Yune

Un pequeño dibujo mal hecho le ha causado un miedo irracional a la señorita Domingo, sabía que funcionaría así que solo hice lo que tuve que hacer desde un principio.

—Estúpida —murmuro, ha creído algo que es obvio que es falso—

Siempre he sabido que todo el mundo teme al Gobierno Mundial, es algo que mi abuelo me dijo desde que era muy pequeña, supuse que ellos también temerían si viesen algo relacionado a ello.

Así que decidí tomar precauciones y dibujarme el sello del Gobierno Mundial, ha sido sencillo y parece que me ha quedado bastante realista.

—Es un plan horrible —dice Nami, tiene mucha razón, pero impediremos que lo logre—

—¿Qué tal? ¿Te gusta? La operación en la que participaste en algún momento, por fin ha tomado forma, si escuchas con atención seguramente oirás los aullidos de Alabasta —miro a la señorita Domingo, sus nombres en clave son estúpidos—. Y todos piensan lo mismo… “Protejan Alabasta”

—¡Basta! ¿Por qué eres tan cruel? —pregunta Viví desesperada—

—Es desgarrador, ¿verdad? El amor por el reino será el que lo destruya —sonríe cínico, patearemos su asqueroso trasero—

Mi hermanito comienza a intentar pasar su cuerpo por la parte de los barrotes que rompí, fue uno, pero me quitó la energía como si hubiese roto toda la celda.

—¿Ese mocoso es estúpido? ¿No escuchó lo que dije? —pregunta Smoker, frunzo el ceño—

—Claro que es un estúpido, pero por esa misma razón es nuestro capitán —contesta Roronoa, lo golpeo instantáneamente—

—No hables así de mi hermano, Roronoa —advierto antes de alejarme de nuevo—

—¡Crocodile, te daré una paliza! —dice Luffy, agarro mis katanas—

—Gomita, hazte a un lado —hago girar mi katana en el aire—

—Por cierto, tuve que hacer muchas cosas para llegar hasta aquí —sonríe Crocodile, ese maldito bastardo—. El sabotaje para incitar a los ciudadanos, dirigir la mala conducta del ejército real, ¿sabes por qué me esforcé tanto en apoderarme de tu reino?

—No podría entender lo que pasa por tu retorcida cabeza —gruñe Vivi, también estaría muy molesta si hicieran algo así en Villa Foosha—

—Para ser una princesa, eres muy grosera —acomodo mis katanas, lanzaré uno de mis ataques más poderosos si es necesario—

—¡Vivi! —miro a la peliceleste, intentó romper la silla, pero ha salido mal—

—¿En serio? ¿Qué intentas hacer, señorita Miércoles?

—Detenerte, voy a detenerte, aún hay tiempo… Si me dirijo al este y llego a Alubarna, si llego antes que el ejército rebelde, tal vez pueda detenerlos —se arrastra hacia nosotros, Luffy aún no se quita—. Tengo que llegar a Alubarna

—Gomita, muévete, derrumbaré esta estúpida celda —frunzo el ceño, debemos irnos—

—¡No dejaré que te salgas con la tuya! ¡No lo permitiré! —insiste Vivi, tampoco permitiré que algo salga mal—

—Vivi —dice mi hermano molesto—

—Qué coincidencia, nosotros también nos dirigimos a Alubarna, princesa —comenta Crocodile, su secuaz me mira—

—No olvides mi pequeña revelación, querida —muevo delicadamente mis dedos, ella tiembla ligeramente—

—Si quieres venir con nosotros, puedes hacerlo, pero si vas, no salvarás a tus amigos —enseña la llave, uno de mis ataques más poderosos podría destruir esto—

Let There Be Love || Zoro Roronoa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora