Let There Be Love || Zoro Roronoa

S E S E N T A Y S I E T E

Narración omnisciente

Luffy había enfrentado solo una vez a Kiyoko y con eso le bastó para conocer por qué decían que era la mujer que lleva la paz a cualquier mar, su fuerza era descomunal.

—¡Su retina fue dañada, no puede ver! —exclama Chopper preocupado, Gomorra los estaba trasladando aunque su vida estuviese en riesgo—

—Tranquilo, Gomorra, te limpiaré el camino —dice Yune desenvainando sus katanas—

—¡Detente, Gomorra! —grita Mozu, Yune estaba limpiando el camino para que el King Bull no sufra más daños—

—¡No puedes seguir en ese estado! —agrega Kiwi, Yune sacó el frasco de Shinwa no igaku y subió corriendo hasta la cabeza del animal—

—Dice que le hizo una promesa a Sodoma —cuenta el pequeño renito capturando la atención de todos—. «Déjame el resto a mí, también haré mi parte y los llevaré a todos en mi espalda»

—Gomorra…

—Oye, doctor, ¿cuánta es la dosis necesaria para el tamaño de este nakama? —pregunta Yune, Chopper la miró esperanzado—

—¡Veinte! —grita el médico, Yune asiente antes de obligar a Gomorra a tomar la medicina—

—Vamos, tú puedes —susurra Yune sacando el pedazo de vidrio que Gomorra tenía en el ojo izquierdo—. Tranquilo, Sodoma… Estará bien

—¡Es un callejón sin salida, se matará si se estrella a esta velocidad! —exclama un miembro de la Familia Franky—

—¡Gomorra, detente, no sigas a esta velocidad! —exige Zambai, Yune volteó a ver a su novio y a Sanji—

—¿Callejón sin salida? ¿Ves algo parecido? —consulta Zoro, él y Sanji harían lo que fuera para sacar ese edificio—

—No, yo no veo nada de eso —contesta el cocinero, Yune salta directo al edificio—

Los dos hombres saltaron junto a ella destruyendo el edificio para que Gomorra pudiese pasar sin inconvenientes.

—¡Llegamos al Palacio de Justicia, Gomorra! —exclama Zambai contento, Sanji bailaba al lado de Yune—

—¡Yune-swaaaaaaaan, te veías grandiosa cortando ese edificio! ¡¿Te enamoraste de mí al ver como destruí ese edificio?! —pregunta Sanji mirando enamorado a la pelinegra—

—Lo hiciste bien, Sanji-kun —alza el pulgar, Sanji intentó acercarse más, pero la katana de Zoro lo detuvo—

—¡Ya estamos aquí, Gomorra! —dice Chopper conteniendo el llanto—

—Estará bien, ese medicamento funcionará dentro de poco y podrá escapar —asegura Yune, no podían dejar a nadie atrás—

—¡Buen trabajo, Gomorra, no dejaremos que su trabajo sea en vano!

—Debemos empezar a movernos —dice Yune, todos asienten—. Oye, ustedes, avancen lo más que puedan… Los alcanzaré cuando esté libre

Yune tenía toda la intención de salvar a Robin, sin embargo, estaba tan cerca de obtener más información sobre Mary Geoise para su futura venganza. La pelinegra quería encontrar algún mapa o algo que le diera una idea de cómo infiltrarse sin causar tanto alboroto.

—No te vas a quedar, Yune —reclama Nami, la pelinegra tembló un poco—

—Tengo que hacer algo, Nami, es algo importante —insiste Yune, la pelinaranja se sentía un poco defraudada—

—Robin es nuestra prioridad —susurra la navegante, la espadachina asiente—

—Vengarme también, Nami —contesta la mujer, solo quería matar a los Tenryubito para sentirse satisfecha—